Lentes progresivas mejor toleradas
La edad, el tipo de defecto visual o el uso que se le d¨¦ a las gafas contribuyen a la buena adaptaci¨®n a la doble graduaci¨®n
A partir de los 40 a?os, casi todo el mundo tiene vista cansada o presbicia. Esta dificultad para ver de cerca (leer, por ejemplo) se a?ade a menudo a otros problemas de visi¨®n, como la miop¨ªa o la hipermetrop¨ªa, por lo que las personas que los padecen se ven obligadas a llevar dos pares de gafas. Las lentes progresivas solucionan este inconveniente al integrar varias graduaciones en un solo cristal y permitir al usuario una visi¨®n correcta tanto de lejos como de cerca en funci¨®n de la parte del cristal por donde se mira. El problema de estas lentes es la adaptaci¨®n, una cuesti¨®n que depende de la propia lente, del tipo de defecto visual, de la edad y del uso que se le d¨¦ a las gafas.
M¨¢s de 18 millones de espa?oles sufren presbicia, diez miop¨ªa y seis hipermetrop¨ªa
M¨¢s de dieciocho millones de espa?oles tienen presbicia o vista cansada, m¨¢s de diez miop¨ªa y m¨¢s de seis hipermetrop¨ªa, seg¨²n el Libro Blanco de la visi¨®n en Espa?a 2003, de la Federaci¨®n Espa?ola de Asociaciones del Sector ?ptico. Todos los miopes e hiperm¨¦tropes de cierta edad son usuarios potenciales de las lentes progresivas. El reto de estas lentes se centra ahora en la personalizaci¨®n, esto es, la adaptaci¨®n de la gafa a las caracter¨ªsticas de cada persona en funci¨®n de su forma de mirar, de mover la cabeza, o la montura escogida.
Los ¨®pticos y optometristas indican que la elecci¨®n de lentes progresivas debe regirse por criterios de salud. "Los problemas de la vista son un asunto serio en el que se debe escoger al profesional por su cualificaci¨®n y experiencia y no por la publicidad. La poblaci¨®n debe saber que en todos los centros ¨®pticos existe, por ley, un responsable t¨¦cnico, un ¨®ptico diplomado en ¨®ptica y optometr¨ªa que, ante la duda, puede atenderle durante todo el proceso o hacerse cargo de cualquier problema que surja", apunta Enrique Gonz¨¢lez D¨ªaz-Obreg¨®n, profesor titular de Optometr¨ªa de la Universidad Complutense de Madrid.
Las lentes progresivas corrigen, adem¨¢s, otros problemas visuales frecuentes como son la insuficiencia de acomodaci¨®n (el sistema ocular tiene menor capacidad para adaptarse a distintas distancias y se cansa la vista o duele la cabeza), la seudoafaquia (operados de cataratas con mala visi¨®n de cerca) o ciertos casos de estrabismo.
"Desde los a?os noventa, cuando se introducen las lentes de superficies suaves, que producen menos deformidades y m¨¢s comodidad en la visi¨®n, casi todo el mundo se adapta a los cristales progresivos, siempre que se hayan seguido criterios de selecci¨®n del paciente. La mayor¨ªa de los casos de intolerancia se solucionan con un profesional que conforme la gafa, esto es, que le d¨¦ la inclinaci¨®n adecuada, curve la montura o ponga las varillas en su sitio", explica Enrique Gonz¨¢lez.
Entre las situaciones m¨¢s habituales de inadaptaci¨®n, seg¨²n ha explicado este especialista en el 19? Congreso Internacional de Optometr¨ªa, Conctatolog¨ªa y ?ptica Oft¨¢lmica, celebrado recientemente en Madrid, figuran las alteraciones binoculares, y, entre ellas, algunos tipos de estrabismos; las tort¨ªcolis oculomotoras (posici¨®n forzada de cabeza que impide la acci¨®n de los m¨²sculos extraoculares), y algunos tipos de nistagmo (movimientos oculares involuntarios).
Algunas condiciones visuales plantean problemas de adaptaci¨®n, como por ejemplo cuando la persona tienen una diferencia significativa de graduaci¨®n entre un ojo y otro (aniseiconia). Pero "estas contraindicaciones no son absolutas, sino que, en estas condiciones, hay personas que se les adapta un progresivo y otras que no", a?ade Enrique Gonz¨¢lez.
T¨¦cnicamente, se llaman lentes negativas a las que compensan la miop¨ªa, positivas a las que corrigen la hipermetrop¨ªa, y de adici¨®n a las de presbicia (se denominan as¨ª porque la graduaci¨®n de la presbicia se coloca sobre la del defecto de refracci¨®n). Estas lentes de adici¨®n son lentes convexas que relajan la acomodaci¨®n y la convergencia de los ejes visuales. Tienen dos superficies: una cara externa, que es definitiva (semiterminado), y otra interna, que se talla para darle a la lente la potencia (dioptr¨ªas positivas o negativas que corrigen el defecto visual) que se precise. Las aberraciones o deformidades se producen cuando se superponen dos superficies de diferente graduaci¨®n en una lente.
"El por qu¨¦ se producen las aberraciones en una lente es muy f¨¢cil de entender si imaginamos qu¨¦ sucede cuando se encaja un bal¨®n de f¨²tbol en uno de rugby. El bal¨®n de f¨²tbol corresponder¨ªa al cristal de la graduaci¨®n de lejos, que es esf¨¦rico, y el de rugby al de cerca, ovalado y con una graduaci¨®n y radio diferentes. En los puntos donde coinciden los ¨¢ngulos de ambas superficies la visi¨®n es clara, y donde no encajan ser¨ªa la zona donde aparecen las aberraciones", explica Alain Afflelou, presidente de las ¨®pticas que llevan su nombre.
Felisa Fern¨¢ndez, directora de Confort Visi¨®n Orense, de Madrid, puntualiza que "es f¨ªsicamente imposible obtener unas lentes multifocales sin ninguna distorsi¨®n. Otra cosa distinta es que con los nuevos avances estas deformidades sean tan peque?as que ni se perciban y la adaptaci¨®n sea muy r¨¢pida en casi todos los pacientes seleccionados", declara.
Los pacientes que mejor se adaptan a las lentes progresivas son los miopes, sobre todo los que tienen menos de cuatro dioptr¨ªas; luego, los hiperm¨¦tropes, porque tienen muy pocas dioptr¨ªas o porque la mayor¨ªa no ha llevado nunca gafas, y despu¨¦s los que tienen astigmatismos altos, de m¨¢s de 1,5 dioptr¨ªas. "Tampoco se puede olvidar que las lentes progresivas requieren de un periodo de aprendizaje en el que el cerebro tiene que acostumbrarse a eliminarlas y saber ver de cerca, de lejos y de pasillo", concluye Alain Afflelou.
Cristales personalizados
E l uso de lentes progresivas de adici¨®n (para ver de lejos y de cerca) no se extiende hasta la d¨¦cada de 1990. Pero no es hasta 1994 cuando se introduce una nueva forma de tallado de cristal punto por punto o tecnolog¨ªa de generaci¨®n libre (free form, en ingl¨¦s), que ha permitido desarrollar lentes personalizadas, algo que s¨®lo han conseguido fabricantes con gran experiencia en ingenier¨ªa mec¨¢nica como Essilor, Shamir, Zeiss o Indo.
"La personalizaci¨®n sintoniza las caracter¨ªsticas de la lente a las particularidades de cada persona", indica Jos¨¦ Alonso Fern¨¢ndez, catedr¨¢tico de Escuela Universitaria en la Escuela de ?ptica de la Universidad Complutense de Madrid. "Hasta ahora se han desarrollado tres l¨ªneas de personalizaci¨®n: morfol¨®gica, que valora el conjunto rostro-montura; ¨®ptica, que calcula la superficie ¨®ptima para minimizar el problema visual del paciente, o fisiol¨®gica, que busca la coordinaci¨®n ¨®culo-motora, c¨®mo mira el paciente o c¨®mo mueve los ojos".
La personalizaci¨®n mejora enormemente la adaptaci¨®n. "Los fabricantes que utilizamos tecnolog¨ªa free form partimos del mismo principio, y luego cada uno lo adapta a sus productos y a su forma de trabajar. En nuestro caso, los cristales se fabrican especialmente para cada montura, y hemos conseguido que, por ejemplo, para una graduaci¨®n de menos dos dioptr¨ªas que hasta ahora ten¨ªan una precisi¨®n del 0,125% (un octavo de dioptr¨ªa) tengan ahora 0,01% (una cent¨¦sima de dioptr¨ªa), lo que se traduce en que el 97,35% de nuestros clientes se adaptan en menos de 15 minutos", sostiene el ¨®ptico franc¨¦s Alain Affelou. Para Enrique Gonz¨¢lez D¨ªaz-Obreg¨®n, profesor titular de Optometr¨ªa de la Universidad Complutense de Madrid, "si hablamos desde el punto de vista t¨¦cnico es un avance interesante, pero todav¨ªa tienen que demostrar su validez en la cl¨ªnica diaria y solucionar los problemas de los pacientes que no se adaptan en condiciones normales".
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