Escala de valores

A?o tras a?o, a comienzos de septiembre, invariablemente los medios de comunicaci¨®n convierten en noticia "el precio del material escolar", que tanto preocupa a las familias. Sin embargo, nada se dice a lo largo de los meses anteriores de los pr¨¦stamos que tantas familias solicitan para disfrutar de vacaciones de verano, de los elevados precios de los alquileres en las playas, de la subida de precios en hoteles y restaurantes, o del imparable precio del combustible gastado en los millones de desplazamientos veraniegos.

Indudablemente, la alerta social, la vigilancia de los peligros que amenazan a la sociedad o la creaci¨®n del estado de opini¨®n est¨¢n en gran medida en manos de los medios de comunicaci¨®n. Pero ?por qu¨¦ se tiene la percepci¨®n de que los euros gastados en material escolar son m¨¢s costosos que los que hemos pagado por gasolinas, paellas, piscinas, cambios de temporada, vuelos, etc¨¦tera?

Sin g¨¦nero de dudas, la responsabilidad recae en la escala de valores que poseemos las personas, las familias y la sociedad, y parece que la educaci¨®n no figura en los primeros lugares. Si as¨ª fuera, no nos "doler¨ªa" tanto el precio de una libreta escolar y s¨ª lo que hemos pagado por la raci¨®n de langostinos en el chiringuito. Noticias, reportajes y actitudes alarmistas de los medios de comunicaci¨®n en estos d¨ªas refuerzan esa visi¨®n negativa de la inversi¨®n del gasto familiar en educaci¨®n.