Un podio de campeonato

Jaleado por la proximidad de un t¨ªtulo que ya mastica, Jorge Lorenzo festej¨® ayer su tercer puesto como si hubiera ganado la carrera. En otras condiciones, este temperamental mallorqu¨ªn de veinte a?os hubiera montado en c¨®lera despu¨¦s de pelearse durante m¨¢s de media carrera con su Aprilia. Pero Lorenzo se mostr¨® ayer encantado al bajarse de la moto, y no es extra?o que as¨ª fuera por las circunstancias en las que ara?¨® el caj¨®n, uno de los m¨¢s sudados que se le recuerdan ¨²ltimamente. Acostumbrado como est¨¢ a engullir rivales cu¨¢ndo y como se lo propone, el espa?ol sud¨® tinta en Motegi, aunque nunca lleg¨® a tener opciones reales de meterse en la pomada por llevarse la carrera. No hubo rastro de la supremac¨ªa que demostr¨® en todas las sesiones de ensayos y, a pesar de que el espa?ol se muestra siempre cauto durante los primeros giros, pronto se adivin¨® que algo no funcionaba debidamente en su Aprilia, que al paso por la sexta vuelta rodaba quinta a m¨¢s de dos segundos de la cabeza.

"No me he encontrado a gusto. Quiero pedir disculpas al equipo. He fallado yo", dijo Lorenzo

Por delante estuvieron siempre Hiroshi Aoyama, el piloto local de Ktm vencedor aqu¨ª el pasado curso, y que ayer repiti¨®; Alex De Angelis; Andrea Dovizioso; y su compa?ero de equipo Yuki Takahashi, determinante el japon¨¦s tras darse un costalazo en la vuelta quince que parti¨® el grupo en dos partes.

Dovizioso qued¨® descolgado entonces a merced de Lorenzo que, ante su presa y ¨²nico rival por el t¨ªtulo, estruj¨® al m¨¢ximo el acelerador de su Aprilia y comenz¨® a barrer los metros de ventaja que ten¨ªa Dovizioso a su favor. Hasta que contact¨® con ¨¦l, a falta de cuatro vueltas.

El italiano es un excelente piloto, muy fino en su trazada, pero excesivamente calculador. Lo demostr¨® la temporada pasada, su primera en la categor¨ªa intermedia, en la que lleg¨® a pelear por liderar la clasificaci¨®n antes de desinflarse hacia el final. Y lo est¨¢ demostrando ¨¦ste. Pero a su extrema frialdad se le a?ade ahora un problema: el salto de calidad que han dado Aprilia y Lorenzo. Si la temporada pasada fue la Honda de Dani Pedrosa la que arroll¨® y se apunt¨® ocho victorias y once podios, la Aprilia de Lorenzo calc¨® ayer esos mismos n¨²meros cuando a¨²n faltan dos carreras para que se cierre la temporada en el circuito valenciano de Cheste. Concentrados pr¨¢cticamente en exclusiva en recuperar la corona de MotoGP, la marca de Tokio parece haber dejado un poco descuidadas sus motos de dos tiempos. Ayer volvi¨® a evidenciarse cuando el espa?ol, a tres vueltas para el final, peg¨® el guardabarros delantero de su moto al neum¨¢tico trasero de la de Dovi, le gan¨® la posici¨®n y le rebas¨® en la siguiente curva.

Dos vueltas giraron pegados los dos primeros clasificados en la tabla. Dio la sensaci¨®n de que uno, Dovizioso, estudiaba al otro, Lorenzo, para identificar el punto de adelantamiento m¨¢s indicado en el que desatar su ataque. Nunca lleg¨®. Nadie en la parrilla frena mejor y m¨¢s tarde que Lorenzo y, en aceleraci¨®n, la Aprilia es este a?o superior a la Honda.

Lorenzo tiene todo de cara para festejar su primer titulo mundial el pr¨®ximo quince de octubre en Portugal. S¨®lo necesita quedar por delante de Dovizioso. "No me he encontrado en ning¨²n momento a gusto con la moto", reconoci¨® el espa?ol. "He fallado yo. Quiero pedir disculpas al equipo, porque mi rendimiento ha estado por debajo de las posibilidades de la moto".