El tonto m¨¢s popular

El ciudadano m¨¢s popular en Espa?a es un individuo que est¨¢ en la c¨¢rcel acusado de delitos econ¨®micos que acumulan medio C¨®digo Penal. Juli¨¢n Mu?oz es m¨¢s conocido que el mism¨ªsimo presidente del Gobierno. As¨ª lo se?ala el ¨²ltimo ranking de Personajes Populares del instituto Gallup. Desde El Lute, no ha existido en Espa?a un preso con m¨¢s proyecci¨®n medi¨¢tica. Y tiene su m¨¦rito lo de Mu?oz. Cuando se hizo la encuesta estaba en prisi¨®n. Por lo tanto, sus apariciones p¨²blicas se limitaban a ir al juzgado con la cabeza escondida debajo de una chaqueta, y sin poder saludar a la concurrencia porque las manos las ten¨ªa entrelazadas por las esposas. Las rejas de la prisi¨®n de Alhaur¨ªn de la Torre han terminado de catapultarlo a la fama. M¨¢s, incluso, que la reja del Roc¨ªo, en Almonte, donde se destap¨® p¨²blicamente su relaci¨®n con Isabel Pantoja, a la que supera en popularidad. La estancia en la c¨¢rcel de Mu?oz cuenta ya con m¨¢s letra impresa que la historia del Conde de Montecristo.

Juli¨¢n Mu?oz (una vez que resuelva algunos asuntillos que tiene con la justicia) deber¨ªa recibir un homenaje de las televisiones. ?l podr¨ªa agradecer a los medios que lo hayan subido a los altares de la fama, y las empresas medi¨¢ticas agradecerle a Mu?oz lo mucho que ha hecho por sus cuentas de resultado. Juan Jos¨¦ Mill¨¢s dej¨® escrito que se valora poco a la gente que crea puestos de trabajo. Especialmente "a esos famosos que sostienen, sobre sus genitales mayormente, un imperio editorial que da ocupaci¨®n a miles de personas". Sin embargo, se da la paradoja de que Juli¨¢n Mu?oz ha pedido amparo al Defensor del Pueblo. Se siente una clara v¨ªctima de la violencia medi¨¢tica. Nadie le ha hecho caso. Le est¨¢ ocurriendo lo mismo que les pas¨® a algunos vecinos de Marbella con ¨¦l, que se sintieron v¨ªctimas de la violencia pol¨ªtica y nadie les defendi¨®.

El ex alcalde de Marbella es el tipo m¨¢s popular de Espa?a y dan ganas de llorar al saberlo. Cualquier d¨ªa le hacen una canci¨®n: camarero de luces o ex alcalde que no tiene luces. Este personaje se remang¨® un d¨ªa los pantalones, hasta coloc¨¢rselos debajo del sobaco, y tir¨® la vara de mando para poder agarrar el cartab¨®n del PGOU de Marbella. Los planos los tom¨® s¨®lo con una mano, lo que le permiti¨® tener libre la otra. Un peligro. Luego se ech¨® una novia tonadillera y logr¨® su minuto de gloria. Lo alcanz¨® con tal ¨¦xito, que hoy est¨¢ entronizado. Seg¨²n la encuesta, existen espa?oles a los que se les pregunta por alg¨²n l¨ªder de opini¨®n, escritor de fuste, artista o cualquier persona verdaderamente importante y no saben qui¨¦n es. Sin embargo, son capaces de reconocer a Mu?oz con la cara tapada y escondi¨¦ndose de los periodistas entre un pu?ado de guardia civiles que lo llevan a la c¨¢rcel.

De qu¨¦ nos extra?amos. Esta sociedad lleva a?os ocupada en que sus ciudadanos consuman la mayor parte del d¨ªa una sarta de estupideces. Y la televisi¨®n se ha puesto a liderar este empe?o, vendiendo nada podrida aderezada de tomate y salsa rosa. El nivel de desarrollo de un pa¨ªs tambi¨¦n se mide por el calibre de sus personajes m¨¢s populares, y a tenor de lo que revela esta encuesta vamos para atr¨¢s como los cangrejos, pero a la velocidad del guepardo. El individuo m¨¢s popular en Espa?a es un presunto chorizo que cada vez parece menos presunto y m¨¢s de lo otro. Una persona que tiene muy mal concepto de s¨ª misma: "He sido el tonto que firmaba los documentos", dijo el otro d¨ªa ante un juez. El tonto del pueblo. Pero de un pueblo muy grande, Marbella, el municipio que ha dado m¨¢s listos por metro cuadrado y adem¨¢s en menos tiempo. Mu?oz fue al juzgado a responder por convenios firmados cuando era concejal de Urbanismo en Marbella y por los que se esquilmaron al Ayuntamiento 136 millones de euros.

El personaje m¨¢s popular de Espa?a es un abobado, un lelo, un corto de alcances, un alcornoque, un cebollino, un bobalic¨®n, o un mel¨®n o un sandio... Pero el problema de Mu?oz no es que se crea uno de esta lista, o un tonto como ¨¦l mismo ha dicho. El problema del personaje m¨¢s popular de Espa?a es que piensa que lo somos todos los dem¨¢s.