?Desaparecer¨¢ la mierda (de toro)?

Optimista como soy, discrepo en un punto del magn¨ªfico art¨ªculo de Juan Luis Cebri¨¢n (Sobre la mierda (de toro), EL PA?S del 12 del corriente). A diferencia suya, considero pasajera la malhadada situaci¨®n que tan bien describe, donde cada d¨ªa se derrama en la vida pol¨ªtica espa?ola, en la acertada expresi¨®n de Cebri¨¢n, esti¨¦rcol bendito. Frente a los aspectos negativos de esa labor para la convivencia, el jugar al catastrofismo permanente, cuando no hay cat¨¢strofe alguna, tiene una consecuencia positiva, a saber, la pr¨¢ctica imposibilidad de que el Partido Popular, con sus posiciones actuales extremas, gane las pr¨®ximas elecciones. Y aunque se dice que la pertinacia en el error no tiene l¨ªmites, parece probable que la l¨®gica pol¨ªtica obligue al PP, tras su previsible derrota, a cambiar de l¨ªnea. Sin ese apoyo, el amarillismo medi¨¢tico quiz¨¢ se vuelva menos desaforado. ?Por qu¨¦ no confiar en que vuelva a la cosa p¨²blica y a todos los medios de comunicaci¨®n el sentido com¨²n, el respeto a los dem¨¢s y un proceder, en suma, propio del pa¨ªs avanzado que somos en tantos aspectos?- Francisco Bustelo. Madrid.

El editorial del 12 de octubre, Sin excusa, afirma que no hay excusa posible para las agresiones contra el PP en Martorell y que "el PP no es un partido fascista ni de extrema derecha". Lo que significa tambi¨¦n una desautorizaci¨®n de aquellos que insisten en que el PP s¨ª es un partido fascista y de extrema derecha; lo que podr¨ªa excusar, por ejemplo, incidentes como los de Martorell.

Sin embargo, en la p¨¢gina de al lado, el muy autorizado Juan Luis Cebri¨¢n sostiene con mucha pasi¨®n y contundencia todo lo contrario que el editorialista. En Sobre la mierda (de toro) habla Cebri¨¢n de "la conversi¨®n del PP en un partido de ultraderecha, vociferante hasta la extenuaci¨®n, atrabiliario, enrocado en s¨ª mismo, y orgulloso due?o de todos los estereotipos que el franquismo difundi¨® durante a?os...". -Abelardo Linares Crespo. Sevilla