La ley 'antibotell¨®n' divide a los j¨®venes y a los partidos

En un mes entrar¨¢ en vigor la conocida ley antibotell¨®n. Los ayuntamientos tendr¨¢n que establecer las zonas donde los j¨®venes podr¨¢n concentrarse a consumir alcohol y tendr¨¢n potestad sancionadora contra ciudadanos y hosteleros. El Parlamento andaluz aprob¨® el pasado mi¨¦rcoles esta norma con los ¨²nicos votos del PSOE, que tiene mayor¨ªa absoluta. El Partido Popular se abstuvo. Izquierda Unida y Partido Andalucista se opusieron. Tras la votaci¨®n, EL PA?S reuni¨® en la C¨¢mara auton¨®mica a dos universitarios -Inmaculada Beltr¨¢n, estudiante de Econ¨®micas de 26 a?os, y Daniel Bernet, alumno de Ingenier¨ªa Industrial de 24- y a los portavoces del PSOE y PP en esta materia, Eduardo Boh¨®rquez y Arantxa Mart¨ªn, respectivamente, para ofrecer su visi¨®n sobre el botell¨®n y la nueva ley.

Inmaculada Beltr¨¢n y Daniel Bernet ten¨ªan previsto participar en el botell¨®n las madrugadas de este fin de semana en compa?¨ªa de sus amistades. "Pero, ?qu¨¦ pasar¨¢ dentro de un mes?", pregunta este ¨²ltimo. "Es que hay una desinformaci¨®n enorme", afirma la primera, antes de inquirir con sorna: "?Podr¨¦ hacer el botell¨®n en mi casa?".

Los diputados del PSOE y PP escuchan. "?Qu¨¦ es eso del botell¨®dromo? ?S¨®lo va a haber uno?", cuestiona Daniel. "Hay sanciones de hasta 60.000 euros ?Me pueden explicar c¨®mo un joven va a pagar ese dinero? Tendremos que ir directamente a la c¨¢rcel", apostilla Inmaculada con claras muestras de indignaci¨®n. Eduardo Boh¨®rquez matiza a esta joven universitaria. "Las m¨¢ximas sanciones para los j¨®venes son de 300 euros. Las otras multas son para los empresarios. A m¨ª no me parece mal que se act¨²e con severidad contra hosteleros desaprensivos y desalmados que se aprovechen de los j¨®venes con pr¨¢cticas abusivas e irresponsables".

Beltr¨¢n reitera: "?C¨®mo podemos pagar ese dinero si estamos estudiando? Adem¨¢s, ya hay leyes que nos pueden sancionar por miccionar, hacer ruido o ensuciar las calles". "Es que es una ley mala, muy mala, que no da respuestas a las inquietudes y necesidades de los j¨®venes y suelta la patata caliente a los ayuntamientos", a?ade Arantxa Mart¨ªn.

Estas fueron algunas de las reflexiones que compartieron estos tertulianos en un debate que dur¨® m¨¢s de cuarenta minutos y en el que los j¨®venes dejaron bien clara su postura, aunque con ello pusiesen en ocasiones contra las cuerdas a los parlamentarios, especialmente al del PSOE.

"Creo que es una ley negativa para los j¨®venes, que no ofrece alternativas y no act¨²a sobre los problemas de base por lo que se produce el botell¨®n", afirma Inmaculada Beltr¨¢n, quien pertenece adem¨¢s al Consejo de Gobierno de la Universidad de Sevilla. Arantxa Mart¨ªn tambi¨¦n debe escuchar reproches. "A m¨ª no deja de sorprenderme la actitud de los partidos pol¨ªticos, que en Andaluc¨ªa tienen un discurso y en Madrid otro", a?ade la estudiante, quien ve pocas cosas positivas en la ley reci¨¦n aprobada.

Daniel Bernet, sin embargo, asume y comprende esta nueva norma. "Estoy a favor del botell¨®n en su origen y ra¨ªz. Con todo, ahora mismo, considero que los j¨®venes somos los culpables de la ley porque somos los j¨®venes los que estamos atentando contra los principios del descanso y las calles las dejamos fatal", se define este estudiante de ¨²ltimo a?o de Ingenier¨ªa Industrial. A rengl¨®n seguido, matiza su apoyo. "La ley era necesaria porque los j¨®venes nos hemos desmadrado, pero tengo la sensaci¨®n de que se ha hecho un poco a la ligera, de manera precipitada. No se ha tomado en cuenta la palabra de los j¨®venes", sostiene.

"S¨®lo sanciones"

En ese momento, los parlamentarios explican a los universitarios las virtudes o defectos de la nueva norma. Para Eduardo Boh¨®rquez, la ley antibotell¨®n "conjuga el ocio de los j¨®venes y el descanso del resto". Y a?ade: "Busca el equilibrio entre el derecho de unos y el derecho al descanso, que es en realidad una necesidad vital". La diputada popular le refuta: "La ley es muy mala. Creemos que es necesario que se ordene el botell¨®n, pero no estamos de acuerdo que se haga de la forma que lo hace esta ley, que s¨®lo contempla medidas sancionadoras. No incluye adem¨¢s determinadas medidas necesarias para la educaci¨®n y la prevenci¨®n. Se ten¨ªa que haber actuado m¨¢s desde el origen. Lo que hay actualmente no funciona porque cada vez bebemos m¨¢s y a edades m¨¢s tempranas".

Los j¨®venes atienden estas explicaciones, pero mantienen sus posiciones. "No estoy a favor del botell¨®n como est¨¢ concebido hoy. Se necesita una actuaci¨®n pero lo de hoy es un simple maquillaje. No se ha actuado profundamente", lamenta Inmaculada Beltr¨¢n. Bernet sigue pregunt¨¢ndose si s¨®lo habr¨¢ un botell¨®dromo. "La ley era necesaria a corto plazo tras los macrobotellones de los ¨²ltimos a?os, pero quiz¨¢s no a tan corto plazo. Espero que las administraciones equilibren entre los sectores y derechos y que todos lleguemos a esa paz social que tanto queremos", afirma.

El diputado socialista bendice adem¨¢s otra de las se?as de identidad de la norma. "Va a permitir que aquellas administraciones m¨¢s cercanas al ciudadano, como son los ayuntamientos, tengan la capacidad de ordenar este fen¨®meno y generar la participaci¨®n de todos las gentes afectadas en esta expresi¨®n de ocio de la juventud que acarrea alguna molestia a la convivencia".

Esta respuesta divide nuevamente a los j¨®venes. "El que los ayuntamientos puedan decidir unilateralmente crear¨¢ discriminaci¨®n entre los j¨®venes de unos u otros municipios, donde se podr¨¢ hacer o no botell¨®n, donde habr¨¢ m¨¢s o menos ofertas de ocio", denuncia Beltr¨¢n, quien apostilla: "Adem¨¢s las actuaciones municipales depender¨¢n mucho de la arbitrariedad de los alcaldes ante la cercan¨ªa de las elecciones locales. Los alcaldes actuar¨¢n seguro en funci¨®n de si interesa o no, de si las medidas son m¨¢s o menos impopulares y les favorezcan para sus intereses".

Daniel Bernet discrepa: "Yo creo que es bueno que sean los ayuntamientos los que tengan el poder en su mano de actuar porque nadie mejor que ellos saben donde se concentra la juventud en cada poblaci¨®n". Arantxa Mart¨ªn insiste en sus cr¨ªticas: "Con 16 art¨ªculos, donde solamente se proh¨ªbe el botell¨®n, lo ¨²nico que hace la Junta de Andaluc¨ªa es escurrir el bulto, desprenderse de una competencia que tiene y le dice a los ayuntamientos que tienen que regular el botell¨®n y sin un aspecto fundamental por el que la ley ya nace mala e inaplicable, como es la financiaci¨®n. Se tendr¨¢n que poner en marcha muchas cosas pero ser¨¢ por la predisposici¨®n de los ayuntamientos, que tendr¨¢n que actuar con poca financiaci¨®n".

Lo m¨¢s barato

De dinero hablan tambi¨¦n los j¨®venes. "El botell¨®n es la forma de ocio que mejor se adapta a nuestras posibilidades econ¨®micas. Es la ¨²nica manera que tenemos para no tener un gasto extraordinario en nuestras d¨¦biles econom¨ªas", afirma Inmaculada Beltr¨¢n. Su compa?ero comparte el sentido del botell¨®n: "Es un fen¨®meno social y la forma de ocio que tenemos los j¨®venes para divertirnos. Tiene su origen en nuestras condiciones econ¨®micas y sociales, porque en un pub nos cobran por dos copas lo que vale una botella entera". "Influye tambi¨¦n el buen clima de Andaluc¨ªa", a?ade el diputado del PSOE. De inmediato, le replica Inmaculada: "Me reitero en que la cuesti¨®n fundamental es la econ¨®mica porque en invierno te garantizo que es mucho m¨¢s c¨®modo irse a un pub y no pasar fr¨ªo. Adem¨¢s, hay gente que podr¨ªa permitirse ir a los bares pero se adaptan al resto de j¨®venes que no tienen esas posibilidades".

La diputada popular se alinea con los universitarios: "Estoy a favor siempre de cualquier forma de ocio que elijan los j¨®venes pero siempre que no entre en colisi¨®n con el descanso de la mayor¨ªa". Su hom¨®logo socialista es m¨¢s vehemente. "No estoy de acuerdo con la manera actual de botell¨®n. Est¨¢n produci¨¦ndose enfrentamientos entre dos derechos: ocio y descanso. La gran mayor¨ªa abrumadora de j¨®venes no est¨¢n de acuerdo con los abusos y excesos que se est¨¢n produciendo. Hay que ofrecerles una alternativa de ocio dada su econom¨ªa. Con esta ley, buscamos la convivencia entre todos los vecinos, sin m¨¢s pretensiones porque ya existen otras leyes o herramientas en Andaluc¨ªa que ya trabajan la oferta educativa y de ocio, como el Instituto Andaluz de la Juventud".

En los instantes finales del debate, los cuatro tertulianos apuran sus botellas de agua y sus ideas. Daniel Bernet lamenta: "Nos ten¨ªais que haber escuchado antes. Ahora soy realista y ya tenemos la ley". El diputado socialista lo agarra del brazo y le explica casi con actitud paternal: "En la Comisi¨®n de Participaci¨®n Municipal, los ayuntamientos escuchar¨¢n a los j¨®venes sobre sus inquietudes y necesidades de ocio". La universitaria irrumpe: "Me gustar¨ªa seguir siendo joven para disfrutar de esos planes de ocio que anuncias, pero creo que ser¨¢ dif¨ªcil si tenemos que esperar a que los pongan en marcha los ayuntamientos". Arantxa Mart¨ªn asiente con la cabeza al tiempo que afirma: "Es que no se les da dinero para actuar".