Cientos de j¨®venes se organizan para exigir los pisos que ganaron en un sorteo

Tras la decepci¨®n, la organizaci¨®n. Los centenares de menores de 35 a?os que se creyeron durante unos d¨ªas agraciados con un piso p¨²blico piensan plantar batalla. El 27 de septiembre la Comunidad sorte¨® 779 viviendas de alquiler con derecho a compra en M¨®stoles y meti¨® en la rifa a 76.000 solicitantes, incluidos los que no cumpl¨ªan los requisitos del Ayuntamiento: estar empadronados o trabajar en la localidad. Unos 150 afectados se reunieron el domingo en la calle, frente a la oficina de vivienda regional, donde decidieron crear una asociaci¨®n de afectados y no cejar hasta que les devuelvan unas viviendas que ellos sienten que les han robado. La Comunidad dice que se les incluy¨® en el sorteo porque no ten¨ªan informaci¨®n sobre d¨®nde trabajaban.

"Esto es un cambalache impresentable. Si no pod¨ªamos optar a los pisos, ?para qu¨¦ nos metieron en el sorteo?". Pedro Camacho, de 25 a?os, es uno de los que se acercaron el domingo a la avenida de Asturias, justo enfrente de la Oficina de Vivienda de la Comunidad, para organizar la batalla legal que han puesto en marcha. Planean presentar una reclamaci¨®n conjunta y otras tantas individuales ante la Comunidad y el Ayuntamiento de M¨®stoles (210.000 habitantes), ambos gobernados por el PP. Adem¨¢s, a las cinco de la tarde de ma?ana se concentrar¨¢n de nuevo en la avenida de Asturias y se presentar¨¢n el jueves ante el pleno del Consistorio mostole?o. En los pr¨®ximos d¨ªas buscar¨¢n un abogado y redactar¨¢n los estatutos de la asociaci¨®n que piensan crear en defensa de sus intereses.

El director general de Arquitectura y Vivienda, Juan Blasco, apareci¨® en la concentraci¨®n del domingo para templar los ¨¢nimos. "Nos dijo que eligi¨¦ramos a cuatro o cinco representantes y que le llam¨¢ramos hoy [por ayer] para entrevistarnos. Llevamos todo el d¨ªa intentando hablar con ¨¦l, pero es imposible. Lo ¨²nico que ha hecho es darnos largas", se queja Camacho.

En la Consejer¨ªa de Medio Ambiente y Ordenaci¨®n Territorial, responsable del Plan de Vivienda Joven, desconocen el n¨²mero de personas que creyeron durante unas horas haber resuelto sus problemas de vivienda. De los 779 ganadores y 392 suplentes del sorteo, seg¨²n el Ayuntamiento, s¨®lo 230 est¨¢n empadronados en M¨®stoles, por lo que el n¨²mero de afectados puede superar las 900 personas.

Fuentes de la consejer¨ªa restan importancia a las reclamaciones y explican que los que protestan no tienen ning¨²n derecho sobre las viviendas. "Simplemente, no cumplen los requisitos de la convocatoria", sostienen. Pero entonces, ?por qu¨¦ los incluy¨® la Comunidad de Madrid en la lista de participantes en el sorteo? "El Ayuntamiento decidi¨® que pudieran participar no s¨®lo los residentes en M¨®stoles, sino tambi¨¦n los que trabajan all¨ª. Y, como en el momento de la inscripci¨®n no dispon¨ªamos de la informaci¨®n sobre los lugares de trabajo de los aspirantes, los incluimos a todos", aseguran fuentes de la consejer¨ªa de Medio Ambiente y Ordenaci¨®n Territorial. Por ello, en el bombo donde se decidi¨® qui¨¦n vivir¨¢ en las 779 casas en juego compitieron todos aquellos que, o bien hab¨ªan especificado que quer¨ªan un piso en M¨®stoles, o bien no hab¨ªan mostrado ninguna preferencia previa. En total, 76.000 candidatos. Al mismo tiempo que niega ning¨²n derecho a los afectados, la Comunidad ya ha anunciado que, "para que no se repita esta situaci¨®n" piensa cambiar el sistema en pr¨®ximas convocatorias.

"Me han robado la casa"

Y aqu¨ª llega otro de los asuntos que indignan a los que se sienten despose¨ªdos de unas viviendas ganadas en un sorteo oficial. Si entre los que ganaron el sorteo o quedaron suplentes no hay suficientes aspirantes que cumplan los dos requisitos -vivir o trabajar en M¨®stoles-, el Ayuntamiento repartir¨¢ el resto de viviendas entre los mostole?os que entraron en la rifa y no fueron agraciados. Una portavoz del Ayuntamiento recalca que un notario ya avis¨® el mismo d¨ªa del sorteo de que se seguir¨ªa este sistema para las viviendas que no se cubrieran, pero los damnificados se sienten estafados.

"Primero nos dicen que nos ha tocado un piso que unos cuantos ya hab¨ªan celebrado comprando un jam¨®n; luego que disponemos de 15 d¨ªas para demostrar que vivimos en M¨®stoles y m¨¢s tarde nos enteramos de que algunos de nuestros pisos se los va a quedar gente que ni siquiera gan¨® en el sorteo. Los que nos reunimos el domingo sent¨ªamos que nos han robado nuestras casas", cuenta F¨¦lix Zapata, otro de los que tuvo suerte s¨®lo por unas horas.