"Creo en la competencia entre hospitales"
El andaluz Manuel Trujillo triunfa en Nueva York como psiquiatra, aunque no descarta el viaje de vuelta
Cuando Manuel Trujillo P¨¦rez-Lanzac (Zaragoza, 1945) dej¨® Sevilla para irse a Nueva York, la situaci¨®n de la psiquiatr¨ªa espa?ola era tan insular como el resto del pa¨ªs, aislado de la escena internacional por una dictadura. "Si eres curioso y quieres estar al d¨ªa, Espa?a no era el sitio para saciar esa curiosidad; y los sevillanos somos muy curiosos". Trujillo, licenciado en Medicina, manten¨ªa una consulta en Sevilla con la que ganaba "un dinerillo" puesto que los pacientes comenzaban a entrar en las consultas psiqui¨¢tricas, pero nada en el entorno alimentaba sus inquietudes. La especialidad comenzaba a tener otras miras con el psicoan¨¢lisis o la psiquiatr¨ªa comunitaria, aunque en Espa?a los trastornos segu¨ªan encerrados en manicomios.
Se fue a Nueva York con la idea de formarse durante dos a?os, y luego otros dos; y otros dos, y hasta hoy sigue all¨ª, convertido en un neoyorquino m¨¢s sin renunciar a su alma andaluza. "Sevilla me puso y Nueva York me ha hecho la persona que soy", confiesa.
Trujillo regresa con frecuencia a Espa?a para participar en reuniones cient¨ªficas (esta semana ha participado en el Congreso Nacional de Psiquiatr¨ªa en Sevilla) y asistir a las sesiones de alguna de las fundaciones en las que participa (Alicia Koplowitz, Castilla del Pino y OMIE). Se fue como un reci¨¦n licenciado curioso y viene como un reputado profesional que tambi¨¦n da clases en la Universidad de Nueva York. Tras los atentados del 11-S, adem¨¢s, se ha convertido en una de las voces m¨¢s autorizadas para hablar del estr¨¦s postraum¨¢tico que sufren los afectados por cat¨¢strofes, ya que el departamento de psiquiatr¨ªa que dirige en el hospital Bellevue, en Nueva York, fue uno de los que atendi¨® a las v¨ªctimas.
De su prestigio y su vinculaci¨®n a su tierra se beneficia desde hace tres d¨¦cadas la psiquiatr¨ªa espa?ola: casi 200 especialistas han pasado por su hospital para ampliar su formaci¨®n antes de regresar a Espa?a. Los estudiantes andaluces son enviados a trav¨¦s de la Fundaci¨®n Castilla del Pino. Trujillo aprecia un cambio sustancial en la sanidad espa?ola desde que emigr¨®. "Es la noche al d¨ªa, se ha normalizado la asistencia psiqui¨¢trica, a nivel de principios estamos como cualquiera, pero en la pr¨¢ctica tardamos un poco m¨¢s", compara. Y a?ade: "Estamos en la modernidad cient¨ªfica en calidad, pero no en cantidad".
A pesar de lo fascinante que le resulta la oferta cultural y el alma multicultural de Nueva York, Trujillo no descarta hacer el viaje de vuelta: "No estoy cerrado, pero tendr¨ªa que ser algo tan atractivo e interesante que mereciese la pena volver".
El psiquiatra est¨¢ a caballo entre los dos mundos, de igual forma que su modelo sanitario ideal es un h¨ªbrido entre el estadounidense y el espa?ol: "Lo ideal es que el derecho sea universal e individual, pero que se pueda competir por la prestaci¨®n del servicio". El modelo de Estados Unidos, expone, discrimina a las clases medias que no puede pagar un buen seguro privado, pero que superan el umbral de ingresos para acceder a la cobertura gratuita que tienen los m¨¢s desfavorecidos. "Lo bueno de Espa?a es que la sanidad es universal e igualitaria, eso hay que conservarlo, pero yo creo en la competencia porque he visto sus efectos entre los hospitales de Nueva York", concluye.
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