"Si vuelve el tripartito lo normal es que tengamos m¨¢s poder"

Joan Saura (Barcelona, 1950) hace meses que tiene claro lo que quiere y lo dice sin complejos: la repetici¨®n de la alianza de izquierdas. El candidato de ICV-EUiA presume del "rigor" y de la "seriedad" de la labor de su coalici¨®n en el Gobierno tripartito, y est¨¢ convencido de que los ciudadanos se lo agradecer¨¢n en las urnas el pr¨®ximo 1 de noviembre. Seg¨²n repite continuamente, la familia rojiverde crecer¨¢, sumar¨¢ y gobernar¨¢.

Pregunta. Por mucho que se lo pida, ni Montilla ni Carod dicen que apostar¨¢n por reeditar el tripartito. ?Por qu¨¦ es usted el ¨²nico que lo reivindica?

Respuesta. Yo s¨¦ por qu¨¦ lo reivindico yo, lo que no s¨¦ es por qu¨¦ ellos no lo dicen. Yo quiero un Gobierno de izquierdas porque hemos iniciado un cambio, un cambio progresista, de pol¨ªticas de izquierdas, que tiene una orientaci¨®n absolutamente diferente del Ejecutivo anterior. Si gobernara CiU volver¨ªamos de forma peligrosa a las pol¨ªticas derechistas y conservadoras que tienen consecuencias negativas sobre la gente, la vivienda, la educaci¨®n, la sanidad. Montilla y Carod tienen que explicar qu¨¦ quieren, por qu¨¦ dejan puertas abiertas a CiU.

"Hay que renegociar el Plan de Infraestructuras con un pacto por la modernizaci¨®n ecol¨®gica"

"ICV-EUiA es la formaci¨®n de izquierdas que m¨¢s ha innovado"

P. Como partido de izquierdas, ?qu¨¦ les diferencia del PSC y ERC aparte del matiz ecologista?

R. No s¨®lo se trata de la ecolog¨ªa. En pol¨ªtica fiscal, el PSC quiere rebajar impuestos diciendo que son de izquierdas cuando Catalu?a necesita aumentar el gasto p¨²blico. Y en sanidad y educaci¨®n nosotros consideramos fundamental el papel del sector p¨²blico. Los retos de modernizaci¨®n de este pa¨ªs necesitan la respuesta de una mayor¨ªa de izquierdas. Nuestro capital, como coalici¨®n, es que pasamos momentos muy dif¨ªciles, incluso estuvimos a punto de desaparecer en el a?o 1999 y tuvimos que hacer un esfuerzo de innovaci¨®n pol¨ªtica. Hoy, creo que desde el punto de vista de los partidos de la izquierda catalana, nosotros somos los que m¨¢s hemos innovado y nos hemos adaptado a los modelos modernos de crecimiento econ¨®mico y sostenibilidad.

P. Su coalici¨®n ha salido bastante bien parada de la aventura tripartita. S¨®lo una peque?a pol¨¦mica: un informe sobre la felicidad que le cost¨® 17.400 euros al erario p¨²blico. ?Le sirvi¨® de algo? R. Me sirvi¨® para ver la frivolidad y el desconocimiento que hay en relaci¨®n con este asunto. En Estados Unidos y en la Uni¨®n Europea, una de las encuestas fundamentales que se elaboran es para medir el nivel de bienestar subjetivo de las personas. El plan estad¨ªstico que aprob¨® el Parlament por unanimidad prev¨¦ que una de las cosas que tenemos que medir es el nivel de satisfacci¨®n subjetiva. Porque de la misma manera que nos interesa saber qu¨¦ piensa la gente sobre la inmigraci¨®n, tambi¨¦n nos interesa saber si las cosas que hace el Gobierno, en definitiva, producen, para entendernos, m¨¢s felicidad.

P. Las encuestas indican que la coalici¨®n crecer¨¢. ?A qu¨¦ precio repetir¨ªan el tripartito?

R. El Pacto del Tinell, con algunas actualizaciones, es una gran hoja de ruta para modernizar Catalu?a. Nosotros tenemos cuatro prioridades: hacer un gran esfuerzo en pol¨ªticas de vivienda; que el Gobierno sea m¨¢s activo, que no lo ha sido lo suficiente, para hacer frente a la temporalidad; aumentar el gasto p¨²blico hasta el 1% anual del PIB, y la modernizaci¨®n ecol¨®gica de Catalu?a. ?stas son nuestras condiciones sine qua non para reeditar la alianza. Respecto a un reparto de responsabilidades y de poder, lo normal es que si crecemos y vuelve el tripartito, tengamos m¨¢s poder. Las encuestas dicen que el PSC y ERC bajan y que nosotros subimos, as¨ª que la redistribuci¨®n del poder nos favorece claramente a nosotros.

P. ?Las pol¨ªticas medioambientales pueden paralizar el crecimiento econ¨®mico?

R. No, todo lo contrario. Lo que paraliza Catalu?a es un fracaso escolar del 33%, un nivel de temporalidad del 26% y del 60% entre los j¨®venes, y que Catalu?a sea la regi¨®n n¨²mero 60 en inversi¨®n en investigaci¨®n y desarrollo. Las pol¨ªticas medioambientales son la condici¨®n necesaria para que Catalu?a sea competitiva. Todas las pol¨ªticas del mundo endurecen las exigencias con el medio ambiente. El siglo XX ha sido el siglo de la internalizaci¨®n de los costes sociales. Y el XXI, el de la internalizaci¨®n de los costes medioambientales. Y cuando antes lo asumamos, mejor.

P. Pues algunos empresarios no est¨¢n de acuerdo.

R. Es el problema de algunos, no de todos, porque existe un amplio sector que est¨¢ asumiendo las exigencias medioambientales. El tema pasa por el Cuarto Cintur¨®n y la l¨ªnea de muy alta tensi¨®n (MAT). Me atrevo a decir que resulta provinciano pensar que la competitividad de Catalu?a pasa por el Cuarto Cintur¨®n.

P. Pero el Vall¨¨s y los accesos a Barcelona est¨¢n colapsados.

R. Los problemas de gesti¨®n viaria del ¨¢rea metropolitana no los tenemos en la zona del Cuarto Cintur¨®n, sino en el Cintur¨®n del Litoral -y no podemos hacer otro porque no hay espacio-. Los tenemos en la Ronda de Dalt, en todas partes. Esto demuestra el fracaso de un modelo de transporte basado en el uso del coche. En los pa¨ªses de Europa, la red ferroviaria duplica la que tenemos nosotros. En cuanto a la l¨ªnea de alta tensi¨®n, el objetivo de la pol¨ªtica energ¨¦tica es disminuir el consumo de energ¨ªa. Esto est¨¢ pasando en Europa, ahora empieza a pasar en Catalu?a y nadie ha demostrado, m¨¢s bien al contrario, por qu¨¦ la necesitamos. Catalu?a est¨¢ interconectada con Francia a trav¨¦s del Coll d'Ares, el TGV no la necesita y si Girona necesita, que necesita, m¨¢s energ¨ªa a medio plazo, har¨¢ falta construir una central de ciclo combinado, pues es la ¨²nica provincia que no tiene centrales de ciclo combinado.

P. Aunque ustedes no lo apopoyaron, el Plan de Infraestructuras lo acab¨® aprobando un Gobierno del que ustedes formaban parte. ?Lo tendr¨¢n que asumir?

R. El Plan de Infraestructuras hasta 2016 s¨®lo prev¨¦ el tramo Abrera-Terrassa del Cuarto Cintur¨®n. Todo lo dem¨¢s queda por estudiar. Lo que aprob¨® el Gobierno no tiene en cuenta el Cuarto Cintur¨®n como tal. En cambio, lo que s¨ª prev¨¦ es una reivindicaci¨®n nuestra de 10 a?os, la construcci¨®n del Cuarto Cintur¨®n ferroviario.

P. Si es tan positivo, ?por qu¨¦ votaron en contra?

R. Por otras cuestiones. Porque hab¨ªa poca red ferroviaria y hab¨ªa una gran programaci¨®n de otros tipos de autov¨ªas que no nos gustaba. Y porque no pudimos acabar la negociaci¨®n, pues Montilla hizo unas declaraciones que interfirieron en ella. En definitiva, en la d¨¦cada de 1980 la competitividad de un pa¨ªs pasaba por la movilidad. Pero en estos momentos no ocurre lo mismo. Lo que proponemos es llegar a un pacto por la modernizaci¨®n ecol¨®gica. El Plan de Infraestructuras lo tendremos que renegociar.

P. ?Empezar¨ªa otro tripartito con m¨¢s desencuentros?

R. No, pero hay que llegar a un acuerdo. Los problemas del Gobierno no han sido pol¨ªticos. De ¨¦stos s¨®lo ha habido un par. Los ruidos han venido por viajes, declaraciones, coronas de espinas y cambios de Gobierno que no se han consultado con los partidos. Habr¨¢ que cambiar las formas.

P. Los socialistas han cambiado su discurso sobre inmigraci¨®n. ?Defiende los papeles para todos?

R. No lo defendemos. Lo que s¨ª queremos es adecuar los permisos de residencia que se dan a las necesidadades del mercado laboral. Esto ahora no es as¨ª. Para adaptarnos a la realidad tenemos que regularizar a un mill¨®n de inmigrantes m¨¢s en los pr¨®ximos 10 a?os.