La contradicci¨®n de Nyamko Sabuni

La designaci¨®n de Nyamko Sabuni, de 37 a?os, una musulmana nacida en Burundi, como ministra de Integraci¨®n e Igualdad en el nuevo Gobierno burgu¨¦s sueco fue una apuesta, para muchos sorprendente, del primer ministro, Fredrik Reinfeldt. Algunas de sus primeras propuestas, como la de prohibir el velo isl¨¢mico o exigir el examen ginecol¨®gico a las escolares musulmanas, han encendido la pol¨¦mica.

Sabuni tambi¨¦n ha recibido muestras de aprobaci¨®n porque se la considera que "es un s¨ªmbolo de que Suecia desarrolla una sociedad con igualdad de oportunidades. Ella misma lo ve as¨ª: "Sent¨ª mi nombramiento como irreal, pero es justo, porque soy muy competente".

"Siente fobia por el islam". ?sa ha sido la contundente opini¨®n del conocido periodista Kurdo Baksi, de origen kurdo. Por su parte Babak Rahimi, redactor de la revista Mana, editada por un colectivo sueco-iran¨ª, dice que "si la ministra de Integraci¨®n hubiera sido hombre, cumplir¨ªa todos los requisitos para ser llamada T¨ªo Tom". Ambos critican que en su primera entrevista tras ser designada se refiriera a los extranjeros "en tercera persona (ellos)", con lo que "estaba negando su propia identidad".

La ministra Sabuni, exiliada pol¨ªtica de la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, ha retirado la ayuda a un centro que combate el racismo

Cuesta creer que Sabuni pueda ser tildada de racista cuando ella misma, en sus primeros a?os en Suecia tuvo serias dificultades precisamente por el color de su piel: "En cierta ocasi¨®n, acud¨ª a una cita de trabajo concertada por tel¨¦fono. La primera reacci¨®n de mi entrevistadora fue exclamar: '?Pero qu¨¦ negra eres!' Por supuesto, no consegu¨ª el puesto".

Sin embargo, Rahimi insiste en su cr¨ªtica, y se basa para ello en las propuestas de la nueva ministra, que adem¨¢s de las ya citadas incluyen la exigencia a los inmigrantes de que conozcan el idioma sueco. Alude tambi¨¦n a una de las primeras y m¨¢s pol¨¦micas medidas adoptadas por Sabuni: la supresi¨®n de la financiaci¨®n estatal al Centro contra el Racismo, "una instituci¨®n que trabaja en contra de la discriminaci¨®n".

La diputada del Partido de los Verdes, Yvonne Ruwaida, que es adem¨¢s presidenta del Centro contra el Racismo, expresa su creencia de que las razones para la retirada de la subvenci¨®n, que hab¨ªa sido aprobada por el Gobierno anterior, socialdem¨®crata, son "puramente ideol¨®gicas", ya que se aplica la pol¨ªtica esbozada por el nuevo Ejecutivo (una coalici¨®n de partidos de la derecha) de dar el mayor protagonismo posible a las fuerzas del mercado. "Y el trabajo contra el racismo se apoya en el inter¨¦s de la sociedad y no es algo que deba ser dirigido por el mercado", agrega Ruwaida.

Con el nombramiento de Sabuni, el primer ministro sueco daba por finalizado el tropez¨®n inicial de su mandato: las ministras de Cultura y Comercio tuvieron que dimitir d¨ªas despu¨¦s de su designaci¨®n por no haber pagado puntualmente el canon de la radio y la televisi¨®n.

Oleada de problemas

No es exagerado afirmar que en esta oleada de problemas que debe afrontar el nuevo Gobierno, a Sabuni le ha tocado la peor parte. La integraci¨®n, el objetivo primordial de su gesti¨®n, est¨¢ directamente ligada a una mayor amplitud en la aceptaci¨®n del otro que viene a hacerse un peque?o hueco en nuestra casa.

Ni el Gobierno ni la ministra de Integraci¨®n tienen hoy respuesta al problema. Algunos incidentes protagonizados por j¨®venes radicales, que atacaron recientemente un local, han creado una inquietante tensi¨®n en algunos municipios.

Nacida en Burundi, Sabuni lleg¨® a Suecia el a?o 1981, procedente de la Rep¨²blica Democr¨¢tica de Congo, con sus padres y cinco hermanos, todos ellos en calidad de refugiados pol¨ªticos. Est¨¢ casada con un sueco con el que tiene mellizos de cinco a?os.

Estudi¨® Derecho en la universidad de Upsala y pol¨ªticas migratorias, informaci¨®n y medios de comunicaci¨®n en la Bergh School. Desde 1998 forma parte de la direcci¨®n de su partido, el liberal, y es parlamentaria desde 2002.

Fascinada por la ret¨®rica, admira a Martin Luther King. Y la gusta el reggae.