Aguirre permitir¨¢ fumar en fiestas privadas y cafeter¨ªas de empresa

Pese a contar con un informe desfavorable del Consejo de Estado, el Gobierno de Esperanza Aguirre aprob¨® ayer un reglamento que desarrolla la Ley Antitabaco de manera permisiva. El decreto autoriza zonas de fumadores en los bares de los centros de trabajo que tengan m¨¢s de 100 metros de superficie, y tambi¨¦n dejar¨¢ en manos de quienes alquilen un local para celebraciones privadas la decisi¨®n de si se fuma en ¨¦l. La ministra de Sanidad, Elena Salgado, afirm¨® ayer que recurrir¨¢ el decreto porque "no se ajusta ni al esp¨ªritu ni a la letra de la ley".

El Ejecutivo de Aguirre emprendi¨® ayer una nueva batalla contra el Gobierno central, si bien ya la hab¨ªan iniciado otras dos comunidades, Castilla y Le¨®n y la Comunidad Valenciana, tambi¨¦n del PP, al aprobar decretos de desarrollo de la Ley Antitabaco muy permisivos.

Aunque los textos no son id¨¦nticos, los tres decretos tienen un punto en com¨²n: en la pr¨¢ctica aumentan las zonas donde est¨¢ autorizado fumar.

El consejero de Sanidad, Manuel Lamela, justific¨® el reglamento en que no se puede imponer a los fumadores que dejen su h¨¢bito, sino que hay que "convencer". Por eso, dijo, la Comunidad ha optado por "conciliar los derechos del no fumador y del fumador". Es decir, aplicar el liberalismo hasta en la salud p¨²blica.

Antes de que la ministra anunciara que recurrir¨¢ el decreto, Lamela afirm¨® que, si hay recurso, la Comunidad plantear¨¢ una cuesti¨®n de constitucionalidad ante el Tribunal Constitucional. Tambi¨¦n se desmarc¨® al anunciar que Madrid es la primera Administraci¨®n que va a ayudar a los fumadores con programas de deshabituaci¨®n y con financiaci¨®n espec¨ªfica para ellos. Cuando el PP vot¨® a favor de la Ley Antitabaco en el Congreso, la falta de programas era una de sus quejas.

Lamela precis¨® luego que la intenci¨®n del Gobierno regional es alcanzar acuerdos para cofinanciar f¨¢rmacos que ayudan a dejar el tabaco, aunque aclar¨® que la consejer¨ªa a¨²n no ha previsto el porcentaje. La partida destinada en los presupuestos de 2007 es de 100.000 euros.

?stas son algunas de las novedades que introduce el reglamento madrile?o:

- Definici¨®n de los 100 metros. El decreto s¨®lo incluye los espacios de acceso a los "clientes o visitantes" a la hora de computar si un establecimiento tiene una superficie mayor o menor de 100 metros. Diferencia que es fundamental, pues cuando sobrepasan ese espacio sus due?os podr¨¢n habilitar zonas separadas para fumadores y no fumadores. En caso contrario, elegir¨¢n si se fuma o no, sin poder alternar ambas opciones.

- Cafeter¨ªas de los centros de trabajo. Siempre que los bares de los centros de trabajo tengan m¨¢s de 100 metros, podr¨¢n habilitarse zonas de fumadores. Si tienen menos, estar¨¢ prohibido.

- Fiestas en centros de trabajo. Durante la "celebraci¨®n de actos conmemorativos, de representaci¨®n, institucionales o an¨¢logos" podr¨¢ fumarse en las dependencias "no productivas" de edificios donde haya centros de trabajo. Si el espacio es mayor de 100 metros, deber¨¢ haber separaci¨®n.

- Espacios reservados. Los establecimientos de hosteler¨ªa podr¨¢n tener lugares donde est¨¦ permitido fumar, siempre que est¨¦n aislados, sean de acceso restringido y est¨¦n se?alizados. El art¨ªculo 5 del reglamento cumple una promesa recurrente de Aguirre: "Los novios decidir¨¢n si se fuma en su boda".

Desde diversos sectores llegaron ayer cr¨ªticas al decreto aprobado por Aguirre. El presidente del Comit¨¦ Nacional de Prevenci¨®n del Tabaquismo, Rodrigo C¨®rdoba,

coment¨® que el reglamento contradice la ley estatal, "en contra de los intereses de los madrile?os". Y agreg¨®: "Eso rema a favor de los intereses de la industria tabacalera".

Tambi¨¦n se quej¨® de que en el Congreso hubiera un amplio consenso, que ahora se ha roto. "Esto es utilizar un tema de salud p¨²blica para la confrontaci¨®n", sentenci¨®.

En la misma l¨ªnea, el portavoz socialista de Sanidad en la Asamblea, Lucas Fern¨¢ndez, calific¨® de "absolutamente irresponsable que la Consejer¨ªa de Sanidad apruebe un decreto que va en contra de la ley nacional, de las recomendaciones efectuadas por el Consejo de Estado y de la propia salud de los madrile?os". Y agreg¨®: "El Gobierno regional, una vez m¨¢s, ha demostrado que prefiere pelear antes que negociar".