Madrid desaf¨ªa al Gobierno y permite fumar en los bares de centros de trabajo

Pese a contar con un informe desfavorable del Consejo de Estado, el Gobierno de la Comunidad de Madrid, que dirige Esperanza Aguirre (PP), aprob¨® ayer un reglamento que desarrolla de manera permisiva la Ley Antitabaco. El decreto dictado por Aguirre autoriza zonas de fumadores en los bares de los centros de trabajo si tienen m¨¢s de 100 metros y tambi¨¦n dejar¨¢ en manos de quienes alquilen un local para celebraciones la decisi¨®n de fumar en ¨¦l. La ministra de Sanidad, Elena Salgado, afirm¨® ayer que recurrir¨¢ el decreto porque "no se ajusta ni al esp¨ªritu ni a la letra" de la ley, seg¨²n Efe.

La Comunidad de Madrid entr¨® ayer en una batalla que ya han iniciado contra el Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero otras dos comunidades gobernadas por el PP, Castilla y Le¨®n y la Comunidad Valenciana, al aprobar decretos de desarrollo de la Ley Antitabaco m¨¢s permisivos que la regulaci¨®n estatal.

Aunque los textos no son id¨¦nticos, los tres decretos tienen un punto en com¨²n: en la pr¨¢ctica aumentan las zonas donde est¨¢ autorizado fumar. El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, justific¨® el reglamento aprobado ayer en que no se puede imponer a los fumadores que dejen su h¨¢bito, sino que hay que "convencer". Por eso, dijo, han optado por "conciliar los derechos del no fumador y del fumador". Es decir, aplicar el liberalismo hasta en la salud p¨²blica.

?stas son algunas de las novedades que introduce el reglamento madrile?o:

- Definici¨®n de los 100 metros. El decreto s¨®lo incluye los espacios de acceso a los clientes a la hora de computar si un establecimiento tiene una superficie mayor o menor de 100 metros, diferencia que es fundamental, pues cuando sobrepasan ese espacio sus due?os podr¨¢n habilitar zonas separadas para fumadores y no fumadores. En caso contrario, elegir¨¢n si se fuma o no, pero no podr¨¢n alternar ambas opciones.

- Cafeter¨ªas de los centros de trabajo. Siempre que los bares de los centros de trabajo tengan m¨¢s de 100 metros, podr¨¢n habilitarse zonas de fumadores. Si tienen menos espacio, estar¨¢ prohibido.

- Fiestas en centros de trabajo. Durante la "celebraci¨®n de actos conmemorativos, de representaci¨®n, institucionales o an¨¢logos" podr¨¢ fumarse en las dependencias "no productivas" de edificios donde haya centros de trabajo. Si el espacio es mayor de 100 metros, deber¨¢ haber separaci¨®n para fumadores y no fumadores.

- Espacios reservados. Los establecimientos de hosteler¨ªa podr¨¢n tener lugares en los que estar¨¢ permitido fumar, siempre que est¨¦n aislados, sean de acceso restringido y est¨¦n se?alizados. Esto, seg¨²n Lamela, permite que en espacios reservados a fiestas "la persona que arriende el local decida qu¨¦ se hace".

- Zonas habilitadas para fumar. En aquellos locales donde se habiliten zonas para fumar, "se instalar¨¢n los mecanismos de extracci¨®n o eliminaci¨®n adecuados para tal finalidad". El art¨ªculo 4 del reglamento de la Comunidad de Madrid suaviza la obligaci¨®n de separar f¨ªsicamente las zonas habilitadas para los fumadores, siempre que se garantice que no hay contaminaci¨®n.

El ministerio seguir¨¢ con el decreto de Madrid los mismos pasos tomados con los de la Comunidad Valenciana y Castilla y Le¨®n: "Primero, esperar a recibirlo por cauces oficiales y que lo estudien los servicios jur¨ªdicos"; segundo, si ¨¦stos encuentran que el desarrollo de la ley que ha hecho Madrid contraviene la norma oficial, "enviarles un requerimiento en el que se especifican los puntos que deben corregirse", explic¨® un portavoz. Si el Gobierno de Aguirre no hace caso, "el decreto se recurrir¨¢".

El problema es que los decretos recurridos est¨¢n operativos. Ello crea una situaci¨®n de desigualdad entre las comunidades.

El consejero de Sanidad Lamela afirm¨® que, si hay recurso del ministerio, la Comunidad de Madrid plantear¨¢ una cuesti¨®n de constitucionalidad al Tribunal Constitucional.