Adi¨®s al primer anti-Rossi
Sete Gibernau, dos veces subcampe¨®n del mundo, por detr¨¢s del italiano, se retira a los 33 a?os tras un a?o plagado de lesiones
Conscientes de que subirse a un avi¨®n de combate es algo muy serio, los aviadores brit¨¢nicos que participaron en la II Guerra Mundial ped¨ªan, antes de iniciar el ascenso, una ¨²ltima aprobaci¨®n a sus ingenieros. El gesto, que consist¨ªa en mantener el pu?o cerrado con el dedo pulgar en alto, tranquilizaba a los pilotos antes de iniciar sus maniobras. Lo mismo le ha ocurrido siempre a Sete Gibernau, piloto espa?ol de MotoGP que ayer, en un hotel de Barcelona, con la voz rota y llorando, anunci¨® su retirada de la competici¨®n tras la temporada m¨¢s calamitosa de las once que ha disputado. Un ejercicio ¨¦ste que ni siquiera pudo terminar subido a su moto. Su clav¨ªcula izquierda, apuntalada con varias placas tras sufrir una fractura tras otra, se lo ha impedido.
"Sigo teniendo un sue?o: ser feliz. El mismo que me ha permitido ser quien soy", anunci¨® visiblemente emocionado el corredor, de 33 a?os. "Cada etapa de mi vida me ha hecho m¨¢s feliz. Todo lo he hecho desde el respeto, virtud que en mi d¨ªa me inculcaron y que hoy, parece, se ha convertido en un defecto para triunfar", desliz¨® Gibernau que, seg¨²n asegur¨®, tom¨® la decisi¨®n de colgar el casco la semana pasada. "En Valencia [29 de octubre] estuve muy cerca de firmar con Kawasaki. Pero si hubiera aceptado alguna de las ofertas, me hubiera traicionado a m¨ª mismo". As¨ª, sollozando, se despidi¨® el ¨²nico piloto capaz de inquietar, y tambi¨¦n vencer en un mano a mano cerrado, a Valentino Rossi.
Sete es, tras Max Biaggi, quien m¨¢s carreras le ha ganado [9] al heptacampe¨®n. Por m¨¢s que il dottore se?alara a su compatriota como su peor enemigo, nunca se sinti¨® realmente amenazado por ¨¦l. En cambio, Gibernau le super¨® repetidas veces durante 2003 y 2004, cuando fue subcampe¨®n. Vale le consideraba un amigo, hasta que pas¨® a ser su rival m¨¢s serio. Intensific¨® su animadversi¨®n hacia el catal¨¢n durante el Gran Premio de Qatar de 2004. Honda reclam¨® que alguien -evidentemente Rossi, que acababa de fichar por Yamaha- hab¨ªa aumentado la adherencia de la posici¨®n de la parrilla desde donde deb¨ªa arrancar. Encolerizado por ser acusado de tramposo, el italiano le puso la cruz a Gibernau y jur¨® que no volver¨ªa a ganar una carrera.
As¨ª fue, por m¨¢s cerca que lo tuviera el barcelon¨¦s, especialmente en 2005, cuando fue el m¨¢s regular durante los ensayos y quien m¨¢s vueltas gir¨® en cabeza. Desquiciado por una temporada de pesadilla, en la ¨²ltima carrera de es a?o anunci¨® su fichaje por Ducati, una f¨¢brica cuyos latidos se asemejaban a los que ¨¦l recordaba de Bultaco, la firma de motocicletas que su abuelo, Paco Bult¨®, fund¨® en 1958. De los genes de su abuelo hered¨® el entusiasmo por el motociclismo aunque, en un primer momento, fuera por la monta?a. No fue hasta que asumi¨® la mayor¨ªa de edad que Manuel, como as¨ª se llamaba antes de cambiarse el nombre por el de Sete, tom¨® parte en su primera carrera de velocidad. Hasta entonces sus participaciones se limitaban a triales y alguna prueba en motocross.
A pesar de comenzar tarde -no lleg¨® a competir en minimotos-, su talento llam¨® la atenci¨®n de Kenny Roberts, que lo arrop¨® y de quien se instruy¨® en el arte de las derrapadas. M¨¢s tarde fue Wayne Rainey quien le permiti¨® dar el salto a 500cc de la mano de Yamaha antes de fichar por Honda, con quien se fogu¨¦o durante tres temporadas. Acto seguido firm¨® por Suzuki, con quien disput¨® dos Mundiales y gan¨® su primera carrera -en Valencia el a?o 2001- antes de recalar en el equipo Honda Racing Corporation, la formaci¨®n oficial de Honda. All¨ª coincidi¨® con ?lex Crivill¨¦, el ¨²nico campe¨®n espa?ol de 500cc y que tambi¨¦n estuvo presente el d¨ªa de su adi¨®s. "Mis a?os al lado de Sete fueron los mejores que nunca he vivido. ?l es el ¨²nico que, por experiencia y calidad, a¨²n podr¨ªa vencer a alguien como Rossi", pirope¨® el ex piloto. Acto seguido Gibernau le gui?¨® el ojo, cerr¨® el pu?o y levant¨® el dedo pulgar. El s¨ªmbolo que en su d¨ªa eligi¨® Paco Bult¨® como identificativo de Bultaco. El mismo que su nieto ha llevado durante toda su carrera en el cogote de su casco.
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