Entre la humillaci¨®n y la hoguera
Cuando uno le pregunta a un ¨¢rbitro espa?ol qui¨¦nes son los mejores en su profesi¨®n suele contestar que los ingleses. Quiz¨¢ haya llegado la hora de revisar esta percepci¨®n.
Se trata del caso de Graham Poll, que, seg¨²n la asociaci¨®n de f¨²tbol inglesa (FA), es el mejor de los mejores, el de la Premier League que recibe las puntuaciones oficiales m¨¢s altas cada temporada. Esta semana, la FA ha abierto una investigaci¨®n contra Poll tras las quejas de Jos¨¦ Mourinho por su arbitraje en un partido que el Chelsea perdi¨® contra el Tottenham (2-1) el domingo pasado.
"Poll declar¨® sentirse satisfecho con su actuaci¨®n", dijo Mourinho en una de las muchas muestras de indignaci¨®n que ha dado al respecto, "pero, tras anular un gol nuestro sin motivo, expulsar al capit¨¢n de la selecci¨®n inglesa sin que nadie supiera por qu¨¦ y ser el protagonista indiscutible, no entiendo c¨®mo dice semejante cosa".
Mourinho es el hombre m¨¢s despreciado del f¨²tbol ingl¨¦s, pero cuando propuso una reuni¨®n con Keith Hackett, el jefe de la comisi¨®n inglesa de ¨¢rbitros para hablar de Poll, Hackett, curiosamente, asinti¨®. Lo cual provoc¨® una reacci¨®n incendiaria del segundo hombre menos querido, Alex Ferguson, el entrenador del Manchester United.
Quien crea que el f¨²tbol es un espect¨¢culo que se lleva a cabo sobre el c¨¦sped y dura 90 minutos no entiende nada. El f¨²tbol es una telenovela permanente, interrumpida de vez en cuando por un partido.
Ferguson, descrito una vez como "un hombre capaz de empezar una pelea en una casa vac¨ªa", acus¨® a Hackett de un flagrante favoritismo. "?Pero qu¨¦ co?o pasa!", exclam¨® el escoc¨¦s tras se?alar que la m¨¢xima autoridad arbitral nunca se hab¨ªa reunido con ¨¦l o sus hom¨®logos en el Arsenal y el Liverpool; "resulta ahora que, porque un ¨¢rbitro se equivoc¨® en una decisi¨®n, ?van a dar un trato preferencial al Chelsea? ?Es absolutamente rid¨ªculo!".
Como para asegurar que el duelo Ferguson-Mourinho rinde material telenovelesco para toda la temporada, el escoc¨¦s agreg¨® que disent¨ªa del portugu¨¦s sobre Poll. "No hay duda de que Graham Poll es nuestro ¨¢rbitro n¨²mero uno", afirm¨®. Si eso es verdad, uno tiembla al pensar c¨®mo deben de ser los dem¨¢s.
Poll, otro personaje de cine, un hombre que comparte con Mourinho una confianza en s¨ª mismo que roza la demencia, aliment¨® las llamas de la pol¨¦mica en un partido apenas tres d¨ªas despu¨¦s del Tottenham-Chelsea. Expuls¨® a un delantero del Everton en el minuto 19 porque le grit¨®: "?Eres un jodido tramposo!" -para los que desean mejorar su ingl¨¦s, la versi¨®n original ser¨ªa: "You are a fucking cheat"-. Pero, seg¨²n el jugador, Poll oy¨® mal. Lo que dijo -aunque tambi¨¦n dirigi¨¦ndose al ¨¢rbitro- fue: "Eso es una jodida mierda" -v. o.: "That is fucking shit"-. Lo cual, seg¨²n deja entender el futbolista, es algo que en la Premier se puede decir al ¨¢rbitro con perfecta correcci¨®n e impunidad.
Uno quisiera seguir d¨¢ndole al intr¨¦pido Poll, cuya profesi¨®n es -hay que reconocerlo, pobre gente- la m¨¢s complicada del mundo, el beneficio de la duda. Pero se vuelve m¨¢s dif¨ªcil cuando uno recuerda el monumental fiasco que protagoniz¨® durante el ¨²ltimo Mundial en el partido Croacia-Australia. Expuls¨® a un croata, pero algo tarde -tras mostrarle no dos, sino tres tarjetas amarillas-. Y en el de 2002 hubo otro desastre, esta vez en un Croacia-Italia. Croacia gan¨® (2-1), pero Poll err¨® al anular dos leg¨ªtimos goles italianos. Al final, el capit¨¢n de Italia, Maldini, dijo: "A ¨¢rbitros como ¨¦stos los quemamos en la hoguera".
El Manchester United y el Chelsea se miden en Old Trafford en dos semanas. Si la inquisici¨®n ordenada por la FA no lo condena, el ¨¢rbitro elegido para el partido ser¨¢... S¨ª, s¨ª... Graham Poll.
No se lo pierdan.
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