El peligro de comer a lo grande
El men¨² gigante de Burger King tiene 1.800 calor¨ªas, el 90% de las que necesita un adolescente al d¨ªa
Vista encima de la mesa, junto a un bote de cola de tres cuartos de litro y un cart¨®n de patatas extra grandes, la hamburguesa Big King tama?o XXL, la gigante de Burger King, no parece tan enorme. Pero con sus dos jugosas porciones de carne hechas a fuego, acompa?adas por dos lonchas de queso, lechuga y cebolla, pepinillos al eneldo y la exclusiva salsa King, el cliente se est¨¢ metiendo entre pecho y espalda 971 calor¨ªas, seg¨²n el Ministerio de Sanidad. Si a eso se le suma el men¨² completo con patatas (472 calor¨ªas) y refresco (210) el almuerzo se pone en 1.793 calor¨ªas. O sea, como zamparse de una tacada el surrealista fest¨ªn de tres platos de menestra de verdura, dos de macarrones con tomate, medio kilo de pechuga de pollo asada, dos huevos fritos y tres donuts.
Burger King anuncia este tipo de macrohamburguesas con lemas como el de Terrible ser vegetariano ?verdad? y su publicidad se basa en destacar el tama?o exagerado del producto. ?sa es la campa?a que el Ministerio de Sanidad quiere que la empresa estadounidense retire por considerar que choca contra los planes acordados por los hosteleros y restauradores espa?oles contra la obesidad, una enfermedad que afecta ya al 14,5% de la poblaci¨®n espa?ola adulta y al 16% de los ni?os de 6 a 12 a?os, uno de los porcentajes m¨¢s altos de Europa.
Las hamburguesas XXL contienen un 19,7% de grasas, de las cuales un 38,7% son saturadas, lo que equivale a 25 gramos, cuando la cantidad recomendada no debe superar el 10%, y en personas obesas no debe llegar al 7%.
La compa?¨ªa estadounidense de comida r¨¢pida ha reaccionado diciendo que "los gustos de sus clientes priman por encima de todo" y que siempre se han preocupado por "reducir los riesgos de las enfermedades generadas por una dieta inadecuada". Empujados por esa preocupaci¨®n los responsables de Burger King han ideado una campa?a saludable que promueve el consumo de ensaladas. En cada uno de los tablones que las anuncian se publica el contenido calor¨ªfico de cada una de ellas, que nunca exceden las 400 calor¨ªas. Esta informaci¨®n, sin embargo, no se da en los anuncios de las hamburguesas.
Un d¨ªa despu¨¦s de la petici¨®n de la ministra Salgado los clientes siguieron consumiendo las populares tortas de carne picada sin inmutarse. La mayor¨ªa de los consultados ayer en un Burger King del Centro Comercial Gran V¨ªa de Hortaleza (Madrid) desconoc¨ªan la cantidad de calor¨ªas que estaban ingiriendo. Un grupo de clientes que esperaban en el mostrador a ser atendidos estaba de acuerdo en que los problemas s¨®lo vienen con el exceso. "No suelo venir por aqu¨ª, as¨ª que no me preocupa excesivamente. Mientras no comas esto todos los d¨ªas no hay problema", dijo uno de ellos. "A m¨ª me gusta comer bien, pero a veces no tengo tiempo y acabo en el Burger. S¨¦ que no es nada demasiado bueno, pero mira, casi todo lo que comemos es malo ?no?", asegur¨® otro de los clientes. Este fue el tono de las opiniones expresadas hasta que la encargada del restaurante llam¨® al jefe de seguridad del centro comercial y ¨¦ste a la polic¨ªa. "No quiero que moleste usted a mis clientes", dijo la encargada.
Reacciones a las XXL
La hamburguesa gigante caus¨® ayer un torrente de reacciones a favor y en contra.
Un portavoz de la Comunidad de Madrid critic¨® la "tendencia de algunos ministros a teledirigirnos dici¨¦ndonos lo que tenemos que comer, beber o fumar".
Entre los aplausos a la petici¨®n del ministerio para que Burger King retire la publicidad de sus hamburguesas XXL se contaron los de las asociaciones de consumidores y las sociedades de nutrici¨®n, que apoyaron al Ministerio y le pidieron que las normas acordadas para combatir la obesidad sean de obligado cumplimiento.
La Federaci¨®n de Consumidores en Acci¨®n pidi¨® adem¨¢s que las hamburguesas XXL fueran retiradas del mercado, no s¨®lo las de Burger King, sino tambi¨¦n las equivalentes de McDonald's. No todo fueron elogios.
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