Carod pide al l¨ªder de CiU que no cuestione la legitimidad de las urnas "como en M¨¦xico"

Veinticuatro horas despu¨¦s de echar a andar la octava legislatura del Parlament y con el republicano Ernest Benach reelegido presidente del modernizado hemiciclo catal¨¢n, el l¨ªder de Esquerra Republicana (ERC), Josep Llu¨ªs Carod Rovira, quiso zanjar ayer la pol¨¦mica en torno a la legitimidad de este nombramiento, avalado por 70 votos, contra los 48 que obtuvo la candidata de Converg¨¨ncia i Uni¨®, N¨²ria de Gispert, y la m¨¢s que probable investidura de Jos¨¦ Montilla como presidente de la Generalitat.

El l¨ªder de Esquerra reclam¨® a los nacionalistas que "acaten los resultados electorales" y les record¨®: "Estamos en Catalu?a, no en M¨¦xico", donde el dirigente izquierdista, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, fue elegido hace unos meses como "el presidente leg¨ªtimo" del pa¨ªs por cientos de miles de sus seguidores, que se niegan a reconocer al candidato oficialista, Felipe Calder¨®n, como m¨¢ximo mandatario de la Rep¨²blica. "No sirve el discurso de que en Catalu?a hay otro presidente", replic¨® Carod al l¨ªder de CiU, y espet¨®: "El primer partido de la oposici¨®n de Catalu?a no puede tener vocaci¨®n de partido revolucionario mexicano".

El presidente de Esquerra exigi¨® a CiU que demuestre "el m¨¢ximo respeto hacia las instituciones y el reconocimiento expl¨ªcito de los cargos que se voten por mayor¨ªa, democr¨¢ticamente, mientras se tenga un sistema que no es presidencialista". Y volvi¨® a la carga para instar a la federaci¨®n catalanista a asumir el papel de "primer partido de la oposici¨®n", con "el m¨¢s elemental respeto al sentido de la cortes¨ªa y de la educaci¨®n".

En un gesto simb¨®lico y en medio de los aplausos de los presentes, Carod baj¨® del estrado desde el que realizaba su discurso para estrechar la mano a Ernest Benach, que escuchaba a su l¨ªder sentado en la primera fila. "Soy yo el que va a saludarlo y no espero a que sea ¨¦l quien se acerque a m¨ª", ironiz¨® el dirigente republicano.

Carod Rovira, que ayer inaugur¨® la escuela de oto?o que su partido celebra este fin de semana en Tarragona para preparar la campa?a electoral con vistas a los pr¨®ximos comicios municipales, tendi¨® la mano a "las fuerzas de la oposici¨®n que se quieran sumar a trabajar en clave positiva a favor de Catalu?a". Aunque las distancias entre los partidos que conforman el gobierno de Entesa (el PSC, ERC e ICV) y los nacionalistas catalanes parecen, hoy por hoy, insalvables, asegur¨® que la oferta "no excluye" a nadie. "En ERC contamos con todos ellos", reiter¨® Carod, quien a?adi¨® a rengl¨®n seguido: "No queremos una legislatura de resentimiento y de venganza, porque sobre estos sentimientos no se construye nada". Y lo que parec¨ªa una declaraci¨®n de buenas intenciones acab¨® siendo una reprimenda para la formaci¨®n que preside Artur Mas, a la que lanz¨® el dardo m¨¢s doloroso para un partido que, por encima de todo, se define como nacionalista catal¨¢n: "Aquel que no quiere y no respeta la libertad, no quiere a su pa¨ªs", afirm¨®.

Mejores resultados

Ante unas 500 personas que se congregaban en el auditorio de la Ciudad de Reposo y Vacaciones de Tarragona, el presidente de ERC tambi¨¦n tuvo tiempo de repasar el desenlace de la ¨²ltima contienda electoral. Pese a perder dos esca?os en el Parlament, asegur¨® que los resultados "son mejores que hace tres a?os, porque las circunstancias han sido m¨¢s complicadas", y en su opini¨®n ponen de manifiesto que el pueblo de Catalu?a les devuelve la confianza y los quiere en el Gobierno.

No obstante, reconoci¨® que, despu¨¦s de lo ocurrido en la anterior legislatura con el tripartito, el partido expresa su "satisfacci¨®n con serenidad, sin la exteriorizaci¨®n apasionada de hace tres a?os".