El CCCB exhibe las fotograf¨ªas ganadoras del World Press Photo
La peque?a mano de un ni?o cubre los labios de su madre, cuyos ojos abiertos sostienen una mirada perdida. La mujer y su hijo, de s¨®lo un a?o, fueron retratados por el fot¨®grafo Finbarr O'Reilly en el ambulatorio de un centro de acogida para los afectados por la hambruna en N¨ªger. La madre aguardaba a que al beb¨¦ le hiciera efecto el suero que acababan de suministrarle. Es una imagen hermosa y terrible a la vez, tocada con la inquietante belleza del horror. Con ella, O'Reilly gan¨® el World Press Photo de 2005. La fotograf¨ªa preside la exposici¨®n de los trabajos vencedores en el prestigioso concurso de fotoperiodismo que, bajo la organizaci¨®n de la entidad Photographic Social Vision, se muestra hasta el 17 de diciembre en el Centro de Cultura Contempor¨¢nea de Barcelona (CCCB).
El World Press Photo, promovido desde 1955 por la organizaci¨®n holandesa sin ¨¢nimo de lucro que le da nombre, est¨¢ considerado como una muestra del mejor fotoperiodismo a escala mundial, y su prestigio ha ido creciendo en los ¨²ltimos a?os al ritmo del n¨²mero de trabajos presentados. En la ¨²ltima edici¨®n concursaron 4.448 fot¨®grafos de 122 pa¨ªses, con un total de 83.044 im¨¢genes repartidas en las 10 categor¨ªas del premio. Un jurado internacional e independiente compuesto por 13 miembros escogi¨® las 190 premiadas, que se exhiben en el CCCB en una de las 80 escalas de la exposici¨®n por todo el mundo, que en Espa?a se ha visto ya en Jerez de la Frontera y A Coru?a.
"Nuestro objetivo es acercar a la gente el trabajo de los fotoperiodistas", se?ala Michiel Minneke, director de World Press Photo. El a?o pasado, la exposici¨®n fue visitada en Barcelona por m¨¢s de 20.000 personas. En opini¨®n de Minneke, el balance de los trabajos presentados en la ¨²ltima edici¨®n habla del inter¨¦s de los fot¨®grafos hacia las cat¨¢strofes naturales. El tsunami en Bangladesh, el hurac¨¢n Katrina y el terremoto en Cachemira son asuntos recogidos a trav¨¦s de la mirada de distintos autores, que fijan la atenci¨®n, alternativamente, en las consecuencias humanas y materiales causadas por estos fen¨®menos. A su lado, hay espacio para acontecimientos como los atentados en el metro de Londres y la experiencia clandestina de un camerun¨¦s que escogi¨® Canarias como puerta de entrada en Europa.
Las consecuencias de la guerra de Irak son tambi¨¦n objeto de atenci¨®n preferente, con trabajos tan personales como el del estadounidense Todd Heisler, que documenta la repatriaci¨®n de los cad¨¢veres de soldados norteamericanos fallecidos en el frente. Inicialmente, estas im¨¢genes fueron censuradas en el pa¨ªs de origen del fot¨®grafo, aunque con el tiempo se han publicado en varios medios locales. y la exposici¨®n se podr¨¢ ver ¨ªntegra en Nueva York y Los ?ngeles. "No aceptamos ninguna forma de censura", asegura Minneke. Esta m¨¢xima es la raz¨®n por la que el World Press Photo no se ver¨¢ en Marruecos. Las autoridades locales quer¨ªan vetar la exhibici¨®n del reportaje de Benito Pajares sobre el marat¨®n del S¨¢hara. La raz¨®n: la bandera saharaui que se ve en una de las im¨¢genes.
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