Del Olmo env¨ªa a la c¨¢rcel a los polic¨ªas que urdieron el montaje sobre el 11-M
Encarcelados seis implicados en tr¨¢fico de explosivos, detenci¨®n ilegal y revelaci¨®n de secretos
El juez Juan del Olmo envi¨® anoche a prisi¨®n a seis de los siete implicados en una trama delictiva, con robo de explosivos Goma 2 ECO, que deriv¨® en un montaje para relacionar los delitos con el atentado del 11-M y difundir la informaci¨®n falsa a trav¨¦s del diario El Mundo. Entre los encarcelados figuran tres polic¨ªas, uno de ellos por detenci¨®n ilegal, tr¨¢fico de drogas y tr¨¢fico de explosivos, y los otros dos agentes, por revelaci¨®n de secretos con perjuicio para la causa p¨²blica. Estos dos polic¨ªas fueron los que facilitaron a El Mundo la informaci¨®n falsa. Uno de los agentes intent¨® suicidarse.
Del Olmo orden¨® la prisi¨®n para los polic¨ªas Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez Clares, Jos¨¦ el Moro, Celestino Rivera, El Funci, y Antonio Jes¨²s Parrilla y para el supuesto narcotraficante Manuel Romero, su esposa Isabel Garc¨ªa y el abogado Gerardo Hermoso en relaci¨®n con los delitos de detenci¨®n ilegal, tr¨¢fico de drogas y de explosivos, y revelaci¨®n de secretos. Para un cuarto polic¨ªa, Luis L¨®pez Hidalgo, el juez fij¨® una fianza de 10.000 euros al considerar que aunque particip¨® en la detenci¨®n ilegal de la ciudadana rusa Svetlana Murinova, los indicios contra ¨¦l no tienen la "consistencia y pluralidad, am¨¦n de contundencia", que para Jos¨¦ El Moro.
Los polic¨ªas ingresaron en la prisi¨®n de Meco, mientras que el matrimonio y el abogado fueron internados en la c¨¢rcel de Soto del Real, ambas de Madrid.
Los siete imputados negaron su participaci¨®n en todos los hechos delictivos que se les imputan, pero el magistrado ha puesto de manifiesto las contradicciones en las que han incurrido y ha ordenado la prisi¨®n incondicional de todos, excepto L¨®pez Hidalgo, ante el riesgo de fuga y sobre todo por la posibilidad de destrucci¨®n de los medios de prueba, habida su condici¨®n de polic¨ªas.
La investigaci¨®n judicial ha acreditado la existencia de una trama delictiva compuesta por el polic¨ªa Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez Clares y el supuesto narcotraficante Manuel Romero que, junto a su esposa y el abogado, colaboraron para implicar a Murinova en un delito de tr¨¢fico de drogas, imput¨¢ndole la compra de 950 gramos de coca¨ªna, de manera que perdiera la custodia de sus dos hijos. La mujer hab¨ªa estado casada con el hijo del abogado, que con este ardid de la trama delictiva consegu¨ªa recuperar la custodia de los menores.
Esa trama delictiva sigui¨® actuando y plane¨® una supuesta confidencia de tr¨¢fico de explosivos Goma 2 ECO con la que lograr el acercamiento a una c¨¢rcel de Madrid del padre de Manuel Romero, preso en Galicia. A partir de este momento, entran en acci¨®n los polic¨ªas Celestino Rivera y Jes¨²s Parrilla, quienes entran en contacto con el diario El Mundo para convertir el falso tr¨¢fico de explosivos Goma 2 ECO, robado en una cantera de Colmenar Viejo (Madrid) en una supuesta noticia que vinculaba los hechos con el atentado del 11-M.
El diario El Mundo difundi¨® en su primera p¨¢gina la supuesta revelaci¨®n del tr¨¢fico de explosivos Goma 2 y lo vincul¨® al 11-M con datos falsos facilitados por los agentes, a los que el juez Del Olmo atribuye un delito de revelaci¨®n de secretos con perjuicio para la causa p¨²blica. La investigaci¨®n judicial acredit¨® estos hechos con grabaciones telef¨®nicas de los polic¨ªas con redactores del diario madrile?o, grabaciones que figuran en el auto.
El 2 y 3 de noviembre de 2006, un polic¨ªa de la Brigada Provincial de Informaci¨®n de Madrid, que estaba investigando la incautaci¨®n en agosto de este a?o de algo m¨¢s de cinco kilos de Goma 2, se reuni¨® con Celestino Rivera. El 3 de noviembre, Gonz¨¢lez Clares recibi¨® varios mensajes en su m¨®vil de una persona relacionada con Celestino Rivera, en la que le pregunta si conoce a varios de los investigados.
En un mensaje posterior se menciona a Funci (Rivera) y Gonz¨¢lez Clares llega a saber que le est¨¢n investigando y que tiene el tel¨¦fono pinchado. Del Olmo ampli¨® las escuchas telef¨®nicas al tel¨¦fono de Celestino Rivera, en las que se descubren las conversaciones que est¨¢ teniendo con un periodista de El Mundo y est¨¢n preparando un reportaje sobre el supuesto tr¨¢fico de explosivos. A las citas con el periodista acude tambi¨¦n Antonio Jes¨²s Parrilla, destinado en la Comisar¨ªa Villa de Vallecas y jefe de grupo de polic¨ªa judicial al que pertenec¨ªa Celestino Rivera.
El Mundo public¨® el 30 de noviembre un reportaje sobre la investigaci¨®n de los explosivos incautados el 15 de agosto en Legan¨¦s, en el que figuran datos de un documento intervenido en el domicilio del Rivera.
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