"Compr¨¦ el ¨²ltimo billete que quedaba"

Rompiendo la costumbre que ha hecho c¨¦lebre a la compa?¨ªa a¨¦rea en Argentina, el ¨²ltimo vuelo de Air Madrid de Buenos Aires a Madrid sali¨® puntual. Concretamente a las 14.00, hora local, del viernes. Apenas una hora m¨¢s tarde la empresa anunciaba la suspensi¨®n de sus vuelos y cientos de personas comenzaban a movilizarse, algunas en el aeropuerto bonaerense de Ezeiza, y la mayor¨ªa en la oficina de Air Madrid en la capital con emociones que iban desde la incredulidad a la desesperaci¨®n pasando por el enojo y la impotencia.

"Tengo que estar el martes en Mallorca, queremos irnos pero para hacerlo en otra compa?¨ªa tendr¨ªamos que pagar 1.200 d¨®lares", explicaba Victoria, quien junto a Diego se hab¨ªa acercado al principal aeropuerto argentino casi inmediatamente. Tienen billetes para hoy, pero en Ezeiza nadie pod¨ªa asegurarles lo que va a ocurrir.

La noticia corri¨® como la p¨®lvora en Buenos Aires. Quienes viven en Argentina se enteraron a trav¨¦s de las noticias y muchos turistas espa?oles por Internet. Casi de inmediato decenas de personas se congregaron en las oficinas de Air Madrid situadas en un c¨¦ntrico edificio de la capital. Unas 50 pudieron acceder al interior. Luego, varios polic¨ªas impidieron a otros clientes que pasaran de la entrada del inmueble. "Estamos indignados y muy tristes, por la desilusi¨®n de haber confiado en esta empresa, y ahora que pase esto", se?alaba Josefina Sinclair, argentina, quien junto a su marido vive en Canarias y quiere llegar a Madrid a pasar las fiestas con una hija que tambi¨¦n reside en Espa?a. "Yo ma?ana me voy a Ezeiza. A alg¨²n avi¨®n me van a tener que subir", subrayaba su marido.

Escaleras arriba medio centenar de personas trataban de obtener explicaciones de varios empleados que con semblante serio empaquetaban documentaci¨®n. "Tengo a cinco clientes varados en Fortaleza, nadie dice nada", indicaba Marcela Montoni, trabajadora de una agencia de viajes. Los tel¨¦fonos sonaban insistentemente sin ser atendidos. Varios clientes los utilizaron para avisar a sus familiares de que no podr¨ªan viajar.

A pesar de las continuas demoras -alguna ha llegado a 120 horas-, muchos pasajeros argentinos eleg¨ªan Air Madrid porque sus billetes costaban entre un 20% y un 30% menos. En un pa¨ªs donde el sueldo m¨ªnimo es de unos 200 euros, una parte importante pagaba a plazos los boletos. Es el caso de Gladys Esperanza, una docente que en julio hab¨ªa comprado un billete -"el ¨²ltimo que quedaba"- por unos 890 euros. Este mes acababa de pagar la ¨²ltima mensualidad. "Yo sab¨ªa que hab¨ªa problemas y quejas, pero en la compa?¨ªa me dijeron que no me preocupara", comentaba desolada ante la perspectiva de no viajar a Espa?a este fin de a?o. Su vuelo estaba programado para el 30 de diciembre.

En la madrugada de hoy (hora espa?ola) lleg¨® a la capital argentina un avi¨®n fletado por el Ministerio de Fomento para embarcar a los pasajeros con billete de vuelta que han quedado atrapados.

La suspensi¨®n de Air Madrid ha tenido gran repercusi¨®n en Argentina. El Ministerio de Exteriores convoc¨® al embajador de Espa?a en Buenos Aires a quien expres¨® la "preocupaci¨®n" por los graves perjuicios a los viajeros. Horas antes se hab¨ªa formado un gabinete de crisis en la Embajada espa?ola, que adopt¨® poner en marcha la asistencia consular para los ciudadanos espa?oles.

"Es incre¨ªble la desinformaci¨®n que hay", se quejaban Jes¨²s, Albert, Alberto y Silvia, espa?oles residentes en Argentina que supieron de la crisis de Air Madrid por la p¨¢gina web de EL PA?S. Antes de acercarse a la sede de la compa?¨ªa en Buenos Aires llamaron al tel¨¦fono habilitado por Fomento, pero no obtuvieron respuesta. En la oficina de Air Madrid, un guardia de seguridad reparte hojas de reclamaciones por las que todo el mundo pugna. Cuando las est¨¢n rellenando alguien da la voz de alarma. No hay donde entregarlas.