Llegan los coches de color 'verde fiscal'
La industria automovil¨ªstica, alarmada ante las amenazas de impuestos medioambientales
Las reacciones a las recientes declaraciones del secretario de Estado de Econom¨ªa y del propio ministro sobre la incorporaci¨®n de nuevos criterios en la fiscalidad del autom¨®vil no se han hecho esperar. Fabricantes, importadores y concesionarios han saltado a la palestra para tratar de evitar un aumento de la presi¨®n o salir perjudicados con los cambios en un marco recaudatorio que este a?o alcanza los 22.180 millones de euros.
Una tarta impositiva de m¨¢s de 22.000 millones en torno al autom¨®vil se reparten las Administraciones central y auton¨®micas y municipales
El equipo de Solbes ha decidido promover un nuevo impuesto verde a los coches que entrar¨ªa en vigor a partir de 2008
El pr¨®ximo d¨ªa 31 acaba el periodo de vigencia del Plan Prever actual con el que se trata de incentivar la renovaci¨®n del parque automovil¨ªstico con ayudas fiscales en la compra de un veh¨ªculo nuevo si se da de baja otro con m¨¢s de 10 a?os de vida. La incidencia es importante ya que durante los nueve a?os de vigencia (antes Renove) se han acogido cerca de cuatro millones de autom¨®viles.
Mientras que en la Administraci¨®n (Solbes) se muestran extra?ados de que en un momento de euforia del mercado, como el actual, con niveles m¨¢ximos de ventas, se mantengan ayudas como las del Prever, las patronales del sector denuncian por un lado que la raz¨®n de ser del mismo no es la defensa de las ventas, sino la renovaci¨®n de uno de los parques m¨¢s viejos de la Uni¨®n Europea (el 35% del mismo tiene m¨¢s de 10 a?os).
El ex ministro de Industria Jos¨¦ Montilla y su secretario Joan Trull¨¦n hab¨ªan negociado con algunas asociaciones una renovaci¨®n del Prever de la que se mostraron todos satisfechos. Pero no contaron con las circunstancias pol¨ªticas ni con lo m¨¢s importante, que la ¨²ltima palabra la tiene el Ministerio de Hacienda.
El equipo de Solbes ha decidido cambiar la situaci¨®n con un nuevo impuesto verde que entrar¨ªa en vigor a partir de 2008. Hasta entonces se podr¨ªa introducir una modificaci¨®n para 2007 por la que aumente el peso fiscal en los "m¨¢s contaminantes". Algo que en el sector se ha traducido inmediatamente en todoterrenos y grandes cilindradas.
Se abre por tanto un debate que en ning¨²n caso debe contemplar, seg¨²n las principales asociaciones, un aumento de la presi¨®n fiscal sobre un sector "excesivamente castigado". La Uni¨®n Europea, con una asignatura pendiente que probablemente nunca aprobar¨¢, como es la armonizaci¨®n fiscal, apunta a una reducci¨®n paulatina del impuesto de matriculaci¨®n, algo importante para un pa¨ªs como Espa?a con una fiscalidad alta a la hora de la compra del autom¨®vil, pero baja comparada con la media europea, durante el uso del mismo. Y con una dificultad a?adida como es la del reparto de los distintos impuestos.
De los tres cap¨ªtulos m¨¢s importantes, los ayuntamientos se encargan de recaudar el de circulaci¨®n, las Comunidades Auton¨®micas ingresan el de matriculaci¨®n y la Administraci¨®n Central se reserva la parte del le¨®n con los combustibles. Una tarta de m¨¢s de 22.000 millones de pesetas que nadie est¨¢ dispuesto a ceder.
La situaci¨®n ha servido tambi¨¦n para poner de manifiesto, una vez m¨¢s, las importantes diferencias que se registran a la hora de defender sus intereses cada una de las asociaciones implicadas. Pues aunque unen sus esfuerzos frente a la Administraci¨®n ante una posible vuelta de tuerca fiscal, sus planteamientos son claramente distintos a la hora de concretar y proponer soluciones. Todos coinciden en aclarar que no son los coches nuevos los que m¨¢s contaminan, por mucha potencia que tengan, (hay pocos sectores en los que se haya hecho un esfuerzo en ese sentido tan importante como en el autom¨®vil), pero difieren en las medidas a aplicar seg¨²n sus intereses, lo que en resumidas cuentas se traduce en que en Espa?a se fabrican coches de peque?a cilindrada y se importan los de mayor potencia.
As¨ª, para Juan Antonio Fern¨¢ndez de Sevilla el impuesto verde debe ser lineal y al menos de momento estar referenciado al n¨²mero de gramos de CO2 que se emitan. Y afirma que de ninguna manera aceptar¨ªan una fiscalidad que favorezca o perjudique a unos determinados tipos de tecnolog¨ªas frente a otras.
Un sector a la gre?a
En la ya tradicional reuni¨®n con los medios de comunicaci¨®n a finales de a?o, el presidente de Anfac, Juan Antonio Fern¨¢ndez de Sevilla, se esforzaba en transmitir una sensaci¨®n de tranquilidad y serenidad. Algo de lo que se quejan en la orilla importadora.
A Germ¨¢n L¨®pez Madrid, presidente de Aniacam, no le extra?a que Solbes hable de "s¨ªntomas de agotamiento" del Prever, para a?adir a continuaci¨®n que lo que el ministro de Econom¨ªa no tiene en cuenta es que el mercado "est¨¢ falseado", ya que, a pesar de la ca¨ªda del 6% de las ventas a particulares en los ¨²ltimos once meses, la demanda se mantiene gracias a las compras de las empresas y a las automatriculaciones de los concesionarios que "se montan durante los dos ¨²ltimos d¨ªas por la presi¨®n de las marcas".
Frente a los argumentos de los fabricantes, el presidente de Aniacam defiende los de los consumidores y los distribuidores. "No hay que pensar s¨®lo en las f¨¢bricas, hay tambi¨¦n miles y miles de pymes con una rentabilidad que se les va entre los dedos".
El ¨²ltimo desencuentro en el sector se ha producido con el divorcio de Anfac y Faconauto que a partir de ahora presentar¨¢n de nuevo por separado las matriculaciones mensuales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.