Una tasa disuasoria

Pretend¨ªa ser una tasa disuasoria para convencer a los propietarios de los bosques de que deben mantener sus tierras limpias y cuidadas y ordenar de una vez la situaci¨®n de los montes gallegos. Aunque antes del verano, Alfredo Su¨¢rez Canal hab¨ªa amenazado con trasladar en la nueva ley el coste de la extinci¨®n a los propietarios que mantengan sus fincas abandonadas, fuentes de Medio Rural explican que las facturas que se iban a enviar s¨®lo repercutir¨ªan a los due?os de los bosques un m¨ªnimo porcentaje de lo que cuesta apagar un fuego.

Aunque las cantidades no estaban del todo definidas, se tratar¨ªa de un canon que oscilar¨ªa entre 200 y 300 euros dependiendo de la magnitud del siniestro forestal y de la cantidad de medios que la Xunta de Galicia hubiese tenido que emplear para sofocarlo.