El enemigo p¨²blico n¨²mero 1 sigue sin nombre
Un hombre sin nombre es el enemigo p¨²blico n¨²mero 1. Lleva m¨¢s de 13 a?os atracando bancos en solitario. Va armado hasta los dientes: con una metralleta Ingram Marietta, una pistola del calibre 45 y un rev¨®lver Magnum 357 (como el de Clint Eastwood en Harry el Sucio). Le llaman El Solitario. Est¨¢ comprobada su participaci¨®n en 31 golpes, aunque es probable que haya perpetrado otros cuantos m¨¢s. En total ha logrado un bot¨ªn de 600.000 euros. Pero, adem¨¢s, es el autor del asesinato de dos guardias civiles de Tr¨¢fico, el 9 de junio de 2004, a los que ametrall¨® cerca de Castej¨®n (Navarra). La polic¨ªa y la Guardia Civil han creado sendos grupos especiales para darle caza.
Aparenta entre 50 y 55 a?os. Se cree que es calvo. Deforma su rostro con una peluca postiza, barba y grandes gafas de sol. Lleva chaleco antibalas y posiblemente alg¨²n tipo de relleno para aparentar que es m¨¢s gordo de lo que es. Durante parte de su carrera criminal utiliz¨® un veh¨ªculo Suzuki Vitara para escapar. En los ¨²ltimos asaltos emplea una muleta met¨¢lica ortop¨¦dica para amortiguar una supuesta cojera y as¨ª atravesar los arcos detectores de metales de los bancos sin que nadie repare en las mort¨ªferas armas que oculta bajo sus ropas.
El atracador conocido como El Solitario es el delincuente m¨¢s buscado desde que hace cuatro a?os asesin¨® a dos guardias civiles en Navarra
La polic¨ªa y la Guardia Civil han creado sendos grupos de investigaci¨®n para cazar al autor de 31 asaltos, los ¨²ltimos de ellos en ?vila y Madrid
El delincuente va armado con una metralleta Ingram Marietta, una pistola y un rev¨®lver Magnum como el de Harry el Sucio
Emplea una muleta ortop¨¦dica para simular una cojera y atravesar el arco detector de metales
Hace dos a?os cosi¨® a tiros de metralleta a dos agentes de Tr¨¢fico en Navarra
"Quien detenga a este asesino se va a poner la medalla m¨¢s cotizada", comenta un polic¨ªa
Los atracos que se le atribuyen han tenido como escenario bancos de Galicia, Arag¨®n, Castilla y Le¨®n, Andaluc¨ªa, La Rioja y, durante los ¨²ltimos meses, ?vila y Madrid. Nunca ha dejado una huella. ?C¨®mo es posible? Porque lleva tiras de celo pegadas en las yemas de sus dedos para no dejar marcas. Un tipo astuto.
Durante m¨¢s de 10 a?os, sus reiterados golpes no hab¨ªan atra¨ªdo la atenci¨®n de las fuerzas de seguridad. Porque a fin de cuentas en ninguno de ellos hab¨ªa empleado la violencia contra nadie. Pero el 9 de junio de 2004 todo cambi¨® para El Solitario. Ese d¨ªa, acribill¨® a balazos a los guardias civiles Juan Antonio Palmero Ben¨ªtez, de 29 a?os, y Jos¨¦ Antonio Vidal Fern¨¢ndez, de 31, cuando estaban esperando la llegada de un convoy con palas de aerogeneradores al que ten¨ªan que escoltar. Un Suzuki Vitara despert¨® las sospechas de ambos. Pero jam¨¢s lograron identificar al conductor: ¨¦ste les seg¨® la vida con 23 disparos. Desde ese momento, El Solitario se convirti¨® en el enemigo p¨²blico n¨²mero 1. Tanto como el etarra m¨¢s peligroso o el m¨¢s sanguinario activista de Al Qaeda.
Ya antes del doble asesinato de Navarra, el misterioso atracador hab¨ªa abierto fuego contra una patrulla de la Polic¨ªa Local de La Val d'Uix¨® (Castell¨®n), tras desvalijar una sucursal de la Caja Rural San Isidro, en la avenida del Coraz¨®n de Jes¨²s. Ocurri¨® el 10 de mayo de 2000. Durante el tiroteo, el cabo Manuel Ferrandis muri¨® de un tiro en la nuca disparado por uno de sus compa?eros.
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil tiene un grupo de media docena de agentes dedicado en exclusiva a seguir el rastro del atracador/asesino. La secci¨®n Antiatracos de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa ha hecho lo mismo. Ambos cuerpos han acordado unir sus esfuerzos para desenmascarar y detener al criminal que lleva 13 a?os burl¨¢ndose de la justicia. Hasta ahora s¨®lo persiguen a una sombra.
Quienes le siguen el rastro saben ya muchas cosas de ¨¦l, recogidas en un voluminoso cartapacio rotulado con la inscripci¨®n Operaci¨®n Marietta. Saben, por ejemplo, que es un tipo de unos 50 a 55 a?os; que mide alrededor de 1,80; que aparentemente es calvo; que es espa?ol, que tiempo atr¨¢s se mov¨ªa en un Suzuki Vitara que recientemente ha sustituido por una especie de furgoneta; que simula una cojera; que aparenta un buen manejo de las armas de fuego... Y, probablemente, muchas m¨¢s cosas que ni la polic¨ªa ni la Guardia Civil quieren revelar "para no dar pistas al enemigo".
Los investigadores no han conseguido poner nombre a ese delincuente fantasmag¨®rico que entra en los bancos, coge el dinero y, en la mayor¨ªa de sus golpes, ha logrado huir sin el menor tropiezo. Y eso que la UDEV del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa ha seguido el rastro a 57 individuos ante la sospecha de que alguno de ellos pudiera ser El Solitario. Y eso que la UCO de la Guardia Civil, por su parte, ha vigilado y controlado a varias docenas de hombres, llegando incluso a seguir a uno de ellos hasta M¨¦xico. Todo en balde. Sin el menor resultado.
Los analistas policiales han escudri?ado hasta la saciedad las andanzas del escurridizo asesino en busca de un hilo que pudiera conducir hasta ¨¦l. Han desmenuzado qu¨¦ d¨ªas ha atracado, a qu¨¦ horas, en qu¨¦ regiones, si tiene predilecci¨®n por una entidad bancaria concreta, si pudiera ser un preso que aprovechase los permisos penitenciarios para actuar... Pero lo ¨²nico que han sacado en claro es que este individuo necesita alrededor de 36.000 euros al a?o para cubrir sus gastos. Si pega un atraco y obtiene un bot¨ªn ajustado a sus presupuestos, no vuelve a robar hasta que se queda sin saldo. En cambio, tarda poco en volver a desvalijar un banco si lo robado es exiguo.
Hasta ahora, El Solitario ha tenido la suerte de cara. Las c¨¢maras de seguridad de los bancos le han grabado a ¨¦l y al Suzuki Vitara en el que escapaba, pero jam¨¢s han logrado grabar la matr¨ªcula del veh¨ªculo. Por eso, la Guardia Civil ha tenido que rastrear uno a uno los 50.000 coches de este tipo que hay o ha habido en Espa?a. Miles de horas siguiendo un rastro que conduc¨ªa a la nada. ?Tal vez porque el veh¨ªculo del atracador figura en las bases de datos como fuera de la circulaci¨®n o desguazado? Muy posiblemente.
Los encargados del caso han rastreado tambi¨¦n a polic¨ªas y guardias civiles expulsados del cuerpo, as¨ª como entre militares y ex militares, ante la eventualidad de que alguno de ellos pudiera ser El Solitario. Todo para nada. Otro palo de ciego frustrante.
Sin embargo, quienes conocen mejor las andanzas de este salteador de bancos tienen la convicci¨®n de que ¨¦ste es bastante diestro en el manejo de las armas. Basta s¨®lo observar c¨®mo acribill¨® a tiros a los dos guardias civiles de Castej¨®n (Navarra). "Parece muy f¨¢cil disparar una r¨¢faga de metralleta. Pero hay que tener ciertos conocimientos para controlar el arma y concentrar los proyectiles de la forma en que lo hizo este asesino", explica un oficial de la Guardia Civil. "Y, adem¨¢s, parece que es un fetichista de las armas, sobre todo por usar un Magnum, un rev¨®lver legendario que en su d¨ªa tuvieron personajes como J. Edgar Hoover, fundador del FBI, o el m¨ªtico general George Patton", remacha un polic¨ªa.
Quienes est¨¢n dedicados a la caza y captura del escurridizo atracador est¨¢n cada vez m¨¢s preocupados. Saben que es un tipo meticuloso que planifica muy bien sus golpes y, sobre todo, c¨®mo huir despu¨¦s. Pero temen que pierda los nervios y se l¨ªe a tiros con los clientes y empleados de cualquier sucursal bancaria si las cosas no le salen como ¨¦l quiere.
Eso fue lo que ocurri¨® en una sucursal de Caixa Galicia en la calle de la Marquesa Casa L¨®pez de Sarria (Lugo), donde el 20 de abril pasado hiri¨® de un tiro en un muslo a un empleado de la entidad. Estuvo un minuto y cincuenta segundos dentro de la oficina, en la que ¨²nicamente hab¨ªa 835 euros "?S¨®lo tienes esta puta mierda de dinero?", grit¨® antes de herir a Jes¨²s L¨®pez, de 50 a?os. Dos minutos despu¨¦s, lleg¨® un enjambre de polic¨ªas y guardias civiles. Pero el salteador ya hab¨ªa puesto tierra de por medio.
Este atraco de Sarria signific¨® para El Solitario la vuelta a las andadas despu¨¦s de casi dos a?os de inactividad tras el asesinato de los dos guardias civiles de Castej¨®n. "Aparenta ser un tipo fr¨ªo, pero tampoco hay que mitificarle", advierte un jefe del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa. A partir de ese robo ha introducido algunos cambios en sus m¨¦todos: se ha colocado unas grandes gafas de sol, se ha quitado la barba y ha incorporado entre sus herramientas una muleta ortop¨¦dica con el fin de simular una cojera y burlar as¨ª los arcos detectores de metales.
La polic¨ªa cree que este delincuente conoce bien los rudimentos del engranaje bancario: el funcionamiento del sistema de apertura retardada de las cajas fuertes y los lugares donde los empleados suelen guardar el dinero.
El que hoy est¨¢ considerado el enemigo p¨²blico n¨²mero 1 golpe¨® por ¨²ltima vez el pasado 14 de diciembre. Fue en el Banco Santander de la plaza de Luis Carre?o de San Agust¨ªn de Guadalix (Madrid). Se llev¨® 10.500 euros en apenas un minuto y medio. Los polic¨ªas y guardias civiles que participan en su caza intentan poner fin a su carrera delictiva. "Quien lo detenga se va a poner la medalla m¨¢s cotizada", confiesa uno de los agentes. "Yo sue?o con este t¨ªo", concluye.
"Voy a contar hasta tres... ?y ya llevo dos!"
El Solitario es un tipo de pocas palabras. Va a lo que va y apenas gasta saliva en convencer a sus v¨ªctimas de que habla en serio cuando les anuncia que "esto es un atraco". He aqu¨ª algunas de las frases que m¨¢s ha repetido en los 31 asaltos en que est¨¢ constatada su participaci¨®n."Tiraos al suelo... y no toqu¨¦is nada. Usted, deme todo el dinero que haya, y como encuentre algo m¨¢s escondido en alg¨²n caj¨®n, os vais a enterar".Cuando el bot¨ªn es exiguo, El Solitario se enfada visiblemente: "?Qu¨¦ poco dinero ten¨¦is, cabrones!". Tambi¨¦n se enoja sobremanera si descubre que los oficinistas tienen colocado un cebo entre los billetes. "Ten¨¦is cebo, cabrones. ?Quitadlo inmediatamente!".No se anda por las ramas a la hora de convencer a los empleados bancarios: "Vamos para la caja... o te dejo seco. Vamos, deprisa. Deprisa. Voy a contar hasta tres ?y ya llevo dos!", les advierte mientras blande un pistol¨®n.En los ¨²ltimos asaltos ha dado muestra de que ser delincuente no conlleva ser descort¨¦s. As¨ª que, dada la cercan¨ªa de las Navidades, se ha despedido de sus v¨ªctimas dese¨¢ndoles "felices Pascuas". Los testigos interrogados por la polic¨ªa y la Guardia Civil aseguran que El Solitario habla castellano sin acento especial, aunque algunos creen que tiene un deje parecido a los aragoneses, mientras que a otros les suena a manchego.Los agentes creen que es un hombre del que nadie sospecha que se dedica a atracar bancos, aunque posiblemente vive de forma desahogada teniendo en cuenta que gasta entre 6.000 y 9.000 euros al mes.
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