A palos antes del Galicia-Ecuador

Se present¨® como una fiesta, pero el Galicia-Ecuador se inici¨® con una batalla campal. A Coru?a pasa por ser una ciudad que recela de los nacionalismos. Como ejemplo estaba la gran bandera de Espa?a que el anterior alcalde y ahora embajador en el Vaticano, Francisco V¨¢zquez, coloc¨® en la playa del Orz¨¢n. El pa?o lo tumb¨® el viento, pero hace unos d¨ªas Javier Losada, actual regidor, lo devolvi¨® a su lugar, junto a una ense?a gallega. Lo hizo sin ruido, sin avisar a la prensa. Pero la bandera de Espa?a, como le cantaron a V¨¢zquez en su d¨ªa, fue la diana del nacionalismo radical ayer, antes del partido. "Los aficionados se estaban comportando correctamente, pero al llegar a la bandera no s¨¦ qu¨¦ les pas¨®", dijo un antidisturbios.

La manifestaci¨®n convocada por Siareiros galegos (aficionados gallegos), de un marcado tinte nacionalista, comenz¨® en la c¨¦ntrica Plaza de Espa?a. Unas 2.000 personas recorrieron las arterias principales de la ciudad con sus c¨¢nticos independistas: "Independencia"; "gallegos somos, gallegos seremos, pero por espa?oles no pasaremos". Cuando la manifestaci¨®n lleg¨® a la altura de la playa del Orz¨¢n, camino de estadio de Riazor, y vir¨® hacia la bandera, dos personas intentaron cortar su cuerda en distintos turnos. Entonces apareci¨® la polic¨ªa antidisturbios, que actu¨® sin contemplaciones, y los cachorros del nacionalismo radical gallego reaccionaron montando barricadas en la carretera con contenedores de basura y arrojando botellas a las fuerzas del orden.