Italia controlar¨¢ las donaciones de musulmanes desde el extranjero
Italia quiere reforzar los controles sobre los fondos que llegan desde el extranjero para la construcci¨®n de mezquitas, y estudia con inter¨¦s el modelo adoptado en Francia, donde existe una fundaci¨®n con participaci¨®n estatal que filtra los capitales musulmanes para las obras religiosas, seg¨²n dijo ayer el ministro del Interior, Giuliano Amato.
"No es aceptable la difusi¨®n de mezquitas construidas con dinero procedente desde el exterior, hay algo que no me gusta, quiero saber qui¨¦n financia qu¨¦ en nuestro pa¨ªs", dijo Amato en un encuentro con periodistas italianos. "Estoy estudiando el modelo franc¨¦s, es decir, la creaci¨®n de una fundaci¨®n con un componente nacional donde hacer confluir los recursos que financian las obras religiosas y civiles". Amato no mencion¨® ning¨²n pa¨ªs de origen de los fondos, aunque tradicionalmente Arabia Saud¨ª, donde rige una r¨ªgida interpretaci¨®n del islam, el wahabismo, est¨¢ financiando mezquitas en Europa.
Francia anunci¨® en 2005 la creaci¨®n de un ¨®rgano para controlar y canalizar las donaciones que llegaban desde el exterior a las mezquitas y a otras organizaciones musulmanas de la manera m¨¢s correcta y transparente posible. La medida fue aceptada con entusiasmo por la comunidad musulmana francesa, pero no est¨¢ operativa a¨²n.
Hacer donaciones es una obligaci¨®n religiosa para los isl¨¢micos. Esto justifica la existencia de numerosas organizaciones ben¨¦ficas que recogen ofrendas. Sin embargo, algunas de estas organizaciones han sido acusadas de financiar a grupos extremistas en el exterior.
Escuela isl¨¢mica
El ministro del Interior italiano dijo tambi¨¦n estar preocupado por las escuelas musulmanas, y anunci¨® mayores controles para verificar el respeto de los est¨¢ndares, sobre todo en lo que tiene que ver con la preparaci¨®n de los profesores. En septiembre, el Gobierno de centro-izquierda de Romano Prodi obstaculiz¨® la apertura de una escuela isl¨¢mica en la ciudad de Mil¨¢n, tras haberla juzgado "inadecuada" conforme a los modelos establecidos por el Estado.
Las declaraciones de Amato (primer ministro en dos periodos, 1992-1993 y 2000-2001) suscitaron una ola de reacciones de signos contrarios. Se mostraron de acuerdo con ¨¦l la mayor¨ªa de los exponentes de la derecha: Roberto Calderoli, del partido ultraderechista Liga Norte, dijo que estar¨ªan bien adem¨¢s algunas otras medidas para limitar "las actividades raras" de los musulmanes en el territorio.
La reacci¨®n de la comunidad musulmana fue inmediata. Omar Camilletti, portavoz de la mezquita de Roma, una de las m¨¢s grandes de Europa, dijo a Reuters que Italia se tendr¨ªa que ocupar primero de la integraci¨®n de los musulmanes. "No puedes dificultar las donaciones ben¨¦ficas ni por parte de las organizaciones ni por parte de privados, es un principio de nuestra sociedad abierta", dijo.
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