La fama que sali¨® de la c¨¢rcel
La gallega que fue detenida en Canc¨²n por supuesto tr¨¢fico de armas crea pol¨¦mica en su pueblo tras fotografiarse para 'Intervi¨²'
Ana Mar¨ªa R¨ªos ha vuelto a la cresta de la ola. Aquella peluquera de 26 a?os retenida en M¨¦xico cuando regresaba de su viaje de novios en Canc¨²n por encontrarse en su maleta un detonador y un pu?ado de balas, ha sido esta semana chica de portada en Intervi¨² y empieza a salir en los programas del coraz¨®n. Del drama a la vie en rose. En Arcade (Pontevedra), donde tiene su peluquer¨ªa, algunos trinan (algunas, para ser m¨¢s preciso). No por el desnudo, sino porque su marido llam¨® "tontos" a los que censuran que R¨ªos ense?ara su cuerpo desnudo a todo el mundo. Los vecinos que en su d¨ªa se manifestaron para pedir que liberaran a la peluquera retenida en M¨¦xico se han sentido insultados por ese "tontos".
Los hombres pasan de la historia, aseguran. El debate se repite en las tertulias femeninas
"Ah, esa chica no es de aqu¨ª", recuerdan unas, "vino de una aldea". Desde la peluquer¨ªa D?Arcade responden con orgullo: "Claro que no somos de Arcade, ni lo pretendemos". R¨ªos est¨¢ a punto de publicar el libro que prometi¨® al poco de volver de M¨¦xico: Ana Mar¨ªa R¨ªos. Voda, c¨¢rcere e fama, quiz¨¢ lo traduzcan al espa?ol.
Que la mujer iba a salir en Intervi¨² lo sab¨ªan en Arcade 15 d¨ªas antes. "No s¨¦ qui¨¦n extendi¨® el rumor", dice Francisco Jos¨¦ Prada, que regenta una tienda con quiosco a unos pasos de la peluquer¨ªa. Es uno de los tres quiosqueros de la localidad. Habitualmente vende 10 ejemplares de la revista. Esta semana le mandaron m¨¢s. "Llegu¨¦ a tener una lista de espera de 30. Por cumplir con los clientes, mi mujer trajo seis de Pontevedra, compradas en kiosco, no le ganamos nada". Estima vender al cabo de la semana 110, el jueves iba por las 90.
Por el pueblo andan periodistas y c¨¢maras de televisi¨®n. Como cuando lo de M¨¦xico. Entonces se ped¨ªa la excarcelaci¨®n de la reci¨¦n casada y el pueblo le expres¨® su solidaridad con la manifestaci¨®n m¨¢s numerosa que se recuerda. "Ni cuando lo de Pontesa, y eso que en todas las casas hab¨ªa alguien con familiares trabajando en la f¨¢brica", responde airada una mujer a la que entrevista la televisi¨®n. Pontesa era una f¨¢brica de cer¨¢mica que cerr¨® hace unos a?os. "No pueden llamar tontos a quienes se volcaron con ellos. Ellos son los listos, no te fastidia".
En ese mismo momento y en el mismo lugar, en una taberna que tambi¨¦n sirve comidas, la madre de Ana Mar¨ªa protagoniza el programa de Ana Rosa Quintana. Est¨¢ defendiendo la actuaci¨®n de su hija y restando m¨¦ritos al pueblo de Arcade. Ya lo hab¨ªa hecho su yerno, el marmolista Marcos Dasilva, la v¨ªspera: "Dicen que el pueblo hizo mucho por ella, pero lo ¨²nico fue ir de manifestaci¨®n". Y se lo reitera Pamela, la hermana menor de la nueva estrella, a este peri¨®dico en la peluquer¨ªa que ambas comparten: "Ana no le debe nada a nadie, ni tiene que dar explicaciones. A la manifestaci¨®n fue quien quiso, no hubo ninguna colecta. No nos importa lo que digan. Somos de A Canicouva, claro que s¨ª, mejor que ser de Arcade", afirma contundente.
La clientela de la peluquer¨ªa est¨¢ contenta, seg¨²n Pamela. Pero cuando ella entra en cualquier tienda con gente, las conversaciones se interrumpen. Su hermana es la comidilla, lo sabe. "No dicen nada a la cara, y eso da mal rollo. Pero que digan lo que quieran".
Las fotos de Intervi¨² tienen truco, aseguran casi todos. "?Y qui¨¦n lo sabe?", desaf¨ªa Jos¨¦ Domingo, que dice haber estado en la boda de la pareja. "Lo sabr¨¢ su marido, yo no la he visto nunca desnuda al natural". "Aqu¨ª eso no le importa a nadie, hombre", desde?a Fidel Jorge, un anciano en cuya tertulia con Jos¨¦ Domingo ha interrumpido el periodista. "Cada cual puede hacer con su cuerpo lo que quiera, y todos estamos hartos de ver las tetas a todas en la playa, ?no es as¨ª?".
Los hombres pasan de la historia, aseguran los dos amigos, al menos en el bar que frecuentan. Da esa impresi¨®n. El debate se repite en las tertulias femeninas. Todas aplauden la decisi¨®n de Ana Mar¨ªa R¨ªos de posar desnuda para pagar deudas. "Yo tambi¨¦n lo har¨ªa", repiten aqu¨ª y all¨¢. Aunque ninguna desear¨ªa pasar la peripecia de la peluquera en M¨¦xico.
A la vuelta de ese traum¨¢tico viaje de novios, Ana Mar¨ªa R¨ªos mostr¨® un aplomo y solvencia medi¨¢ticas sorprendentes. En octubre pas¨® un d¨ªa en un calabozo y otros nueve en la enfermer¨ªa de una c¨¢rcel.
Al poco de llegar ya anunci¨® su intenci¨®n de escribir un libro sobre su aventura, incluyendo el flem¨®n del d¨ªa de su boda que le retras¨® el viaje de novios. El libro est¨¢ ah¨ª, a la vuelta de la esquina. Y ya tiene representante para acudir a los programas del coraz¨®n, Edith Gar¨®. Ya estuvo en El programa de Ana Rosa y hoy actuar¨¢ en Dolce Vita.
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