Sobrevivir al ocaso del videoclub
Juan Vila: "Nos han ofrecido montar una p¨¢gina para reservar y alquilar pel¨ªculas 'online', pero no hemos querido; no le damos importancia" - Daniel Rodr¨ªguez: "Con el sistema de identificaci¨®n por huella dactilar hemos reducido diez veces el nivel de morosidad"
Ning¨²n otro sector como el del ocio y entretenimiento se ha visto tan afectado por la ubicuidad de Internet y el auge de las redes P2P. Seg¨²n la Federaci¨®n para la Protecci¨®n de la Propiedad Intelectual (FAP), en el 2006 casi 5 millones de internautas en Espa?a se descargaron 135 millones de pel¨ªculas de forma ilegal. El sector tradicional de los videoclubes es el gran afectado. Desde el a?o 2002, cientos de peque?os negocios dedicados al alquiler de pel¨ªculas y videojuegos se han visto abocados al cierre. Ni el gigante americano Blockbuster se salv¨®. La lenta adopci¨®n tecnol¨®gica y el pobre uso de Internet como herramienta de negocio representan buena parte del problema. Dos videoclubes explican a CiberP@a¨ªs visiones opuestas sobre el papel de Internet y la modernizaci¨®n del sector y qu¨¦ hacen para subsistir en el nuevo mundo.
Vila: "Tal vez tengamos que adaptarnos a las circunstancias, pero no creo que el ¨¦xito pase por la tecnolog¨ªa"
Rodr¨ªguez: "Poder enviar un SMS avisando de que la pel¨ªcula que quer¨ªan est¨¢ libre es una ventaja enorme"
En sus estanter¨ªas se encuentran verdaderas joyas. Terciopelo azul, Acordes y Desacuerdos, R¨¦quiem por un sue?o... Es una peque?a isla del cine de autor. Y tambi¨¦n la salida que algunos empresarios del sector del videoclub han ideado para poder subsistir. Juan Vila, due?o de Cine Club Brothers, videoclub especializado en cine independiente, lo explica: "Cualquiera puede bajarse las ¨²ltimas novedades en Internet. Lo que la gente busca para alquilar y comprar es cine de calidad".
Es la nueva f¨®rmula de un sector que se resiste a desaparecer. ?Funcionar¨¢? Est¨¢ dif¨ªcil. Seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), el 50% de los espa?oles entre 16 y 24 a?os acude a las redes P2P para descargarse todo tipo de archivos: pel¨ªculas, series descatalogadas, m¨²sica, programas inform¨¢ticos... Adem¨¢s, el negocio de descargas legales de pel¨ªculas y alquiler por Internet avanza r¨¢pidamente. En Espa?a, Digitae, Mediaexpress o Pixbox ya se han hecho un hueco.
El pobre uso de Internet y de nuevas tecnolog¨ªas por parte de los empresarios del videoclub hace que el futuro no parezca muy halag¨¹e?o. "Han venido a ofrecernos montar un p¨¢gina para reservar y alquilar pel¨ªculas online, pero no hemos querido; de momento no le damos importancia", dice Vila. "Tal vez tengamos que adaptarnos a las circunstancias, pero no creo que el ¨¦xito pase por la tecnolog¨ªa".
Vila, junto a su hermana Gemma, invirti¨® 12.000 euros en el 2002 en la apertura del negocio. Empezaron con un cajero 24 horas y luego abrieron el local completo especializ¨¢ndose en cine de autor y rarezas descatalogadas. Hoy disponen de un inventario de 3.200 pel¨ªculas. Todo se gestiona de forma manual. La informatizaci¨®n del negocio se reduce a un ordenador sin conexi¨®n a Internet. Con ¨¦l registran los ingresos de caja y estad¨ªsticas b¨¢sicas, como los g¨¦neros m¨¢s alquilados o las pel¨ªculas no devueltas. El resto se deja en manos de un contable.
"Es un negocio muy fluctuante, va bien en invierno, cuando la gente se queda en casa, pero en verano ingresamos muy poco". La facturaci¨®n media ronda los 5.000 euros. Descontando los gastos, el negocio da lo justo.
Sin una p¨¢gina web ni canales adicionales de alquiler, venta y promoci¨®n, el futuro del negocio depende de su capacidad para atraer clientes. Tampoco disponen de herramientas para explotar su base de datos de 1.300 socios. El resultado es una clientela estancada entre los 30 y 50 a?os. Diversificarla a edades m¨¢s j¨®venes se ha convertido en un reto. "Hace un tiempo lo intentamos con el alquiler de videojuegos, pero tuvimos muchos problemas con las devoluciones y lo dejamos", dice Vila. "Adem¨¢s, no se puede hacer si s¨®lo tienes 20 juegos. Necesitas una inversi¨®n importante".
Para evitar las barreras propias del sector, otros videoclubes han acudido a la tecnolog¨ªa. "Ten¨ªamos problemas con las devoluciones. Decidimos instalar un sistema de identificaci¨®n por huella dactilar para aumentar la seguridad y ahora tenemos 10 veces menos morosidad", dice Daniel Rodr¨ªguez, due?o de V¨ªdeo Marcha.
En los ¨²ltimos 11 a?os, toda su competencia cercana ha cerrado: 15 videoclubs, incluido un Blockbuster. "Duran un a?o y medio, dos como mucho, luego cierran". La clave de la supervivencia apunta a una combinaci¨®n de tres factores: buen servicio al cliente, producto de calidad y ser el primero en adopci¨®n tecnol¨®gica. Esta tienda fue de las primeras en automatizar su sistema de reconocimiento de socios: dos lectores de huellas digitales y un software de gesti¨®n de clientes, con un coste de 5.000 euros. "El reconocimiento por huella nos ha permitido facilitar mucho el servicio al cliente y aumentar en un 10% las ventas de otros productos, como el alquiler de videojuegos. No necesitan llevar carnets de socio, ni DNI".
Su software de gesti¨®n les permite abrir una ficha por cliente en la que, adem¨¢s de la foto y la huella, es posible automatizar el env¨ªo de correos y SMS con ofertas publicitarias, avisos sobre devoluciones o reservas de pel¨ªculas. En total, una base de datos de 10.000 clientes. "Hemos aumentado mucho la fidelizaci¨®n. Poder enviarles al m¨®vil un SMS diciendo que la pel¨ªcula que quer¨ªan reservar ya est¨¢ libre es una ventaja enorme".
Para la integraci¨®n y automatizaci¨®n de los tres canales (tienda, web y m¨®vil), utilizan una aplicaci¨®n de la empresa espa?ola Engine Software. Basta el n¨²mero de socio y DNI para identificarse en la web. Desde all¨ª se pueden ver, en tiempo real, las pel¨ªculas y videojuegos disponibles y reservar online. "Si alguien reserva, recibo una alerta en mi ordenador, retiro la pel¨ªcula o el juego, y todo queda actualizado al momento". En la web, cada socio puede votar pel¨ªculas, dejar comentarios y marcar las que ya ha visto.
La ¨²ltima inversi¨®n tecnol¨®gica de V¨ªdeo Marcha es la automatizaci¨®n del inventario de DVD. A trav¨¦s de dos torres de almacenamiento han concentrado en menos de un metro cuadrado casi 8.000 pel¨ªculas. Cada vez que un DVD es escaneado para su alquiler, el sistema conecta con las torres de almacenamiento y ¨¦stas seleccionan y expulsan la pel¨ªcula como si fuera un lector de DVD. "Ganas en rapidez y mantenimiento; en las torres los DVD no se rayan", dice Rodr¨ªguez. "Pero sobre todo ahorras en costes. Antes gast¨¢bamos unos 150 euros al mes en comprar 200 estuches. Ahora apenas compramos 50".
Su facturaci¨®n mensual supera los 10.000 euros, pero las ventas descienden. "La pirater¨ªa en Internet est¨¢ haciendo mucho da?o. Est¨¢ muy bien bajarse pel¨ªculas de Internet, pero pagando. Deber¨ªa ser una competencia m¨¢s. En tres a?os desaparecer¨¢n los videoclubs, nos convertiremos en centros de ocio. Internet y la tecnolog¨ªa ser¨¢n la clave".
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