El Deportivo vive de las rentas

El Deportivo volvi¨® anoche a las andadas. Ni rastro de la agresividad mostrada contra el Madrid y el Recre en la Liga o contra el mismo Mallorca en la ida. Y, as¨ª, un equipo que no anda sobrado precisamente de calidad, sufri¨® contra un Mallorca con m¨¢s tacto con la pelota en el pie.

El Depor, con el viento a favor, se limit¨® a esperar a que corriesen los minutos para solventar un encuentro que se interpret¨® como un tr¨¢mite. El Mallorca aliment¨® pronto la esperanza de la remontada con un excelente gol de falta de Jankovic. El centrocampista enganch¨® un derechazo desde unos 35 metros. La pelota se col¨® en las redes de Aouate despu¨¦s de hacer un extra?o. No es la primera ocasi¨®n que el israel¨ª se traga un lanzamiento de factura similar.

Era el minuto 23, pero al Mallorca se le acab¨® la prisa, como si le valiese la victoria por la m¨ªnima aunque el billete para los cuartos se quedase en A Coru?a. El equipo de Gregorio Manzano est¨¢ dando s¨ªntomas de mejor¨ªa. Si el domingo le gan¨® al Sevilla, anoche fue un pel¨ªn mejor que el Depor. S¨®lo querer la pelota y tocarla con el m¨ªnimo criterio le bast¨®. Salvo un par de aproximaciones de Arango y algo de Taborda, el primer tiempo se resume en un bostezo.

Ante tal panorama, la grada la tom¨® con Diego Trist¨¢n. La memoria es flaca. El tercer m¨¢ximo goleador de la historia deportivista, con 77 dianas, fue la v¨ªctima de la afici¨®n: "Diego, bota de vino, bota de vino", le cantaron en su regreso a Riazor tras abandonar el club el pasado mes de septiembre. Trist¨¢n da razones para justificar los c¨¢nticos. Ya no hay pistas del gran delantero que fue antes del Mundial de Corea y Jap¨®n de 2002.

A Joaqu¨ªn Caparr¨®s no le estaba gustando el rumbo del partido. En el descanso prescindi¨® del defensa Rodri para poner a Riki en la banda izquierda y retrasar a Filipe al lateral. El Depor se arregl¨® un poco. Sergio y Verd¨², encargados de llevar la manija, consiguieron enhebrar algo de f¨²tbol. Manzano se apiad¨® de Trist¨¢n y lo sustituy¨® por Varela. Al delantero sevillano, que todav¨ªa no se ha estrenado con su nuevo equipo, lo despidieron con una pitada. Parec¨ªa que iba a ser lo m¨¢s rese?able de una pachanga que se estaba convirtiendo en un partido de tenis. Pero Taborda toc¨® un bal¨®n que le cay¨® llovido a Riki. Cuando el madrile?o iba a enca?onar a Moy¨¢, en su camino se cruz¨® Ballesteros. El ¨¢rbitro se?al¨® penalti y expuls¨® al defensa. Sergio puso el empate. Y se acab¨® el sufrimiento de la grada.