Viabilidad de las carreras universitarias

He le¨ªdo en su peri¨®dico (11 de enero de 2007) que el 75% de nuestras titulaciones universitarias es inviable, ya que -seg¨²n los expertos- hacen falta al menos 125 alumnos nuevos cada a?o para garantizar la viabilidad de los correspondientes estudios. Tal parece ser el principal resultado de un exhaustivo estudio presentado recientemente por la ministra de Educaci¨®n.

No pretendo sintetizar el contenido del art¨ªculo, pero me atrever¨¦ a decir, aun a riesgo de simplificar en exceso, que lo que se pone encima de la mesa son nuevos argumentos en favor del desmantelamiento de las carreras universitarias actuales. Hasta ahora se nos hab¨ªa dicho que la extinci¨®n de nuestras titulaciones era una consecuencia de la convergencia europea, obligada por la Declaraci¨®n de Bolonia y necesaria para nuestra adaptaci¨®n al Espacio Europeo de Educaci¨®n Superior (EEES). Este planteamiento se refuerza ahora con datos de car¨¢cter contable.

Soy un europe¨ªsta convencido y suscribo en su totalidad la Declaraci¨®n de Bolonia. Lo que de ninguna forma suscribo es esa interpretaci¨®n irracional, que nada tiene que ver con Europa, cuya finalidad ¨²ltima es adelgazar la Universidad p¨²blica y reducir la inversi¨®n en educaci¨®n. Opino -como muchos otros- que adaptar no es sin¨®nimo ni de destruir ni de sustituir. Nuestro sistema no es perfecto, por supuesto. Podemos aprovechar la ocasi¨®n para corregir defectos conocidos y para ensayar -con prudencia- posibles mejoras. Adem¨¢s, nuestras universidades arrostran problemas muy serios, enraizados -algunos- en el desencuentro hist¨®rico de nuestro pueblo con el progreso cient¨ªfico, y provocados -otros- por el deliberado sabotaje que represent¨® la LOU. Urge darles soluci¨®n. Pero las autoridades no cejan en su empe?o de liquidar tanto lo que funciona como lo que no funciona, en lugar de adaptar, corregir, mejorar y solucionar lo que sea menester.

Es evidente que cuando el n¨²mero de estudiantes es muy bajo, el coste unitario puede resultar inaceptable. Y es cierto que recientemente se han multiplicado algunas titulaciones sin ninguna justificaci¨®n. Pero lo que cuesta formar a un estudiante no es el ¨²nico indicador que determina la viabilidad de una titulaci¨®n. Tambi¨¦n habr¨¢ que tener en cuenta para qu¨¦ sirven los estudios y qu¨¦ es lo que se espera que aporten en su momento los nuevos titulados. Es inaudito que a estas alturas se hable de 125 estudiantes nuevos por titulaci¨®n como un m¨ªnimo razonable, porque no se puede olvidar que masificaci¨®n y calidad son dos conceptos que evolucionan indefectiblemente en proporci¨®n inversa.