La polic¨ªa cree que los condenados de Jarrai no han huido a Francia
Uno de los 19 buscados compareci¨® el s¨¢bado en una rueda de prensa
La Ertzaintza, la Guardia Civil y la polic¨ªa creen que la mayor¨ªa de los 19 j¨®venes condenados por integraci¨®n en la organizaci¨®n terrorista Jarrai-Haika-Segi no ha pasado a Francia para eludir la condena de seis a?os impuesta por el Supremo. Una de las huidas, Olatz Da?obeitia, particip¨® el s¨¢bado en un acto de apoyo a los juzgados en el sumario 18/98. Responsables de los tres cuerpos se reunieron la semana pasada para coordinar actuaciones.
Ertzaintza, Guardia Civil y polic¨ªa nacional se han reunido para cruzar informaci¨®n
En dicho encuentro, los responsables policiales cruzaron la informaci¨®n de que disponen los tres cuerpos y acordaron actuaciones sobre el caso de los 23 condenados por el Tribunal Supremo. Las Fuerzas de Seguridad del Estado mantienen como primera hip¨®tesis que el grueso de los 19 condenados que evitaron la orden de detenci¨®n no ha cruzado todav¨ªa la frontera.
Hay varios datos que refuerzan, seg¨²n las fuentes policiales consultadas, esta hip¨®tesis de trabajo, aunque se mantengan todas las cautelas sobre el paradero final de los huidos. Al menos 10 de ellos, entre los que se encuentra Ib¨®n Me?ika -detenido durante la primera parte del alto el fuego permanente de ETA por la Guardia Civil en posesi¨®n de 90 bonos presuntamente para financiar a la banda- ofrecieron una rueda de prensa en Vitoria el jueves, un d¨ªa antes de que el alto tribunal hiciera p¨²blico el fallo.
Pero la aparici¨®n el s¨¢bado pasado una de las huidas Olatz Da?obeitia en una rueda de prensa de apoyo a los juzgados en el macrosumario 18/98 celebrada en San Sebasti¨¢n es el ¨²ltimo dato objetivo que corrobora la hip¨®tesis policial. Da?obeitia estaba sentada en ese acto en la tercera fila tras el l¨ªder de Askatasuna, Juan Mar¨ªa Olano.
Aunque tres d¨ªas antes del fallo el Supremo hab¨ªa prorrogado sus deliberaciones con el argumento de la "complejidad" de la causa, y cab¨ªa pensar que se demorar¨ªa m¨¢s, lo cierto es que esa semana buena parte de los condenados dio la cara ante los medios y estaban localizados.
Otro dato es que algunos de ellos barajaron, seg¨²n la polic¨ªa, hacer una comparecencia ante los medios al d¨ªa siguiente de conocer el fallo, algo que finalmente no se produjo. El objetivo hubiera sido denunciar la sentencia y, en su caso, forzar algunas detenciones. Pero, por causas que se desconocen, este golpe de efecto se descart¨® finalmente.
Las polic¨ªas, adem¨¢s, coinciden en resaltar que la huida a Francia, bien para eludir el cumplimiento del resto de la pena o para integrarse en la organizaci¨®n terrorista ETA, "no se improvisa". Primero por las cautelas que a buen seguro ha puesto una organizaci¨®n cuyo principal activo, adem¨¢s del rearme y reorganizaci¨®n de su entramado, es el blindaje que ha conseguido en su aparato militar en estos meses de negociaci¨®n. Un blindaje que dificulta los esfuerzos de los expertos antiterroristas espa?oles y franceses para identificar con certeza a los nuevos activistas.
La posibilidad de que elementos quemados, como los ahora condenados, sirvan de pista a la polic¨ªa para ulteriores detenciones a buen seguro que ha sido sopesada por la propia ETA para evitar errores.
Otro dato que abonar¨ªa la hip¨®tesis de que el grueso de los condenados y a¨²n no detenidos permanece escondido fuera de sus domicilios es el hecho de que casi todos han cumplido la mitad de la nueva condena, seis a?os como "integrantes" en una "organizaci¨®n terrorista". En concreto, cinco de ellos cumplieron cuatro a?os en prisi¨®n preventiva, otros nueve permanecieron tambi¨¦n en prisi¨®n tres a?os y unos meses, y uno de los condenados estuvo en prisi¨®n preventiva tres a?os. ?nicamente Igor Chill¨®n Barbadillo permaneci¨® 14 meses e Ion Markel Ormazabal Gazta?aga estuvo en la c¨¢rcel 15 d¨ªas. Por lo tanto, la mayor¨ªa de los 19 huidos s¨®lo tiene que permanecer en prisi¨®n dos a?os, pudiendo conseguir la libertad condicional en menos de un a?o.
Otro caso diferente es el de Aiora Epelde Agirre, dirigente de Haika cuando fue detenida por la polic¨ªa en febrero de 2003, en una operaci¨®n relacionada con los papeles de Ib¨®n Fern¨¢ndez Iradi, Susper. En esa operaci¨®n fueron arrestadas 14 personas acusadas por la polic¨ªa de ser la cantera de ETA. El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garz¨®n envi¨® a prisi¨®n el 23 de febrero de ese a?o a Epelde por haber sido supuestamente captada por ETA.
Fuentes de la polic¨ªa vasca creen que los que ten¨ªan decidido dar el salto a ETA, hace tiempo que optaron por desaparecer y, seguramente, no estaban a la espera de conocer el fallo del Supremo. Una de las personas detenidas por la Ertzaintza, la joven Olatz Carro Boada, fue arrestada en un hotel de Murgia (?lava) en donde se hab¨ªa refugiado para evitar su detenci¨®n la v¨ªspera. La Ertzaintza cree que buena parte de los huidos ha seguido la misma consigna de desaparecer de sus domicilios habituales. Y no descarta que se pueda producir un "goteo" de detenciones forzadas por los propios huidos, en funci¨®n de su inter¨¦s para explotarlas medi¨¢ticamente. Se da la circunstancia de que Carro Boada fue puesta en libertad el 4 de marzo de 2005, despu¨¦s de haber agotado el tope de cuatro a?os de prisi¨®n preventiva.
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