La entrada en la UE de Rumania y Bulgaria no se nota en La Jonquera
El nuevo estatus de los pa¨ªses no genera un aumento de entradas
Los ciudadanos b¨²lgaros y rumanos, que hasta finales de 2006 engrosaban las cifras de extranjeros a los que se imped¨ªa la entrada a Espa?a por la frontera de La Jonquera, cruzan ahora sin problemas. La condici¨®n de ciudadanos de la Uni¨®n Europea, efectiva desde el 1 de enero, no ha generado, seg¨²n fuentes de la Subdelegaci¨®n del Gobierno en Girona, un incremento masivo de las entradas ni un efecto llamada.
"Las polic¨ªas han tomado buena nota de que existe una mayor facilidad para entrar en el pa¨ªs, pero eso no traer¨¢ m¨¢s delincuencia ni m¨¢s prostituci¨®n. No se puede hacer esta f¨¢cil ecuaci¨®n", asegura Francesc Francisco-Busquets, subdelegado del Gobierno en Girona. La desaparici¨®n de los controles exhaustivos no supondr¨¢ un menoscabo de la vigilancia fronteriza, que se volver¨¢ m¨¢s selectiva. Tambi¨¦n se incrementar¨¢n los contactos con las polic¨ªas rumanas y b¨²lgaras para intentar interceptar posibles bandas de malhechores que crucen la frontera para perpetrar sus delitos. Fuentes policiales aseguran que estas organizaciones mafiosas no tendr¨¢n ahora "ni m¨¢s ni menos dificultades" para actuar, puesto que la frontera no constitu¨ªa desde hace a?os un obst¨¢culo insalvable en sus movimientos.
La Subdelegaci¨®n del Gobierno mantiene que resulta imposible tener una cifra de los extranjeros que entran por La Jonquera (Alt Empord¨¤). Hasta ahora s¨®lo son conocidas las cifras de las personas a las que se les niega la entrada, y que no son tampoco muy fidedignas porque se incluye a quienes intentan entrar en varias ocasiones. En septiembre del a?o pasado el Partido Popular difundi¨® que en cuatro meses hab¨ªan cruzado la frontera unos 60.000 ciudadanos b¨²lgaros y rumanos, aunque no se bas¨® en ning¨²n documento oficial.
Prostitutas
Francisco-Busquets asegura que tampoco se prev¨¦ un incremento de la prostituci¨®n, aunque ser¨¢ m¨¢s dif¨ªcil combatirla que mediante las extradiciones inmediatas de las mujeres b¨²lgaras y rumanas que superaban los tres meses de estancia en el pa¨ªs. La f¨®rmula de la expulsi¨®n por falta de visado no era generalizada y, seg¨²n datos policiales, permit¨ªa hasta ahora retirar de la calle o los prost¨ªbulos a una de cada diez mujeres. La polic¨ªa deber¨¢ centrarse ahora en la investigaci¨®n de posibles redes mafiosas dedicadas a la extorsi¨®n de mujeres o en la inspecci¨®n de locales que no re¨²nan las debidas condiciones.
Francesc Francisco-Busquets cree que debe evitarse el f¨¢cil alarmismo respecto a la entrada de Bulgaria y Rumania en la Uni¨®n. "Dos nuevos pa¨ªses significan que tendremos una Europa m¨¢s fuerte", destaca el representante del Estado. Los miembros de la comunidad rumana de Girona lamentan que su nacionalidad se asocie a menudo de una manera demasiado ligera con la delincuencia y la prostituci¨®n.
La revisi¨®n del padr¨®n de poblaci¨®n extranjera en la provincia de Girona de 2005 arroja unos datos totales de 100.367 ciudadanos de otras nacionalidades empadronados. La comunidad m¨¢s numerosa es la de Marruecos, con 28.438 personas, seguida de la de Gambia (7.091) y Rumania (4.981). El n¨²mero de extranjeros se ha duplicado en Girona en los ¨²ltimos cuatro a?os.
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