El espumoso 'sexocom' de Paris Hilton

Por qu¨¦ es tan famosa Paris Hilton, a pesar de que, realmente, no destaca por nada? Quiere ser cantante, y los temas de su disco, Paris, "dan ganas de llorar", seg¨²n ella misma. La cr¨ªtica especializada comparte el sentimiento, aunque no necesariamente en el mismo sentido. Sus dotes histri¨®nicas son m¨¢s bien limitadas, y sus compa?eros de reparto apuntan a la poca seriedad de Hilton, que llega tarde y borracha a los sets y no memoriza sus papeles. Pero, no obstante, al introducir su nombre en el buscador Google aparecen 68 millones de entradas. Por comparar: la cotizaci¨®n en Internet de Tom Cruise anda por 12 millones de p¨¢ginas; la de Britney Spears, en 18 millones; la de Pen¨¦lope Cruz, en 5 millones, y la de Madonna, en 72 millones. C¨®mo se descuide, la va a pillar Paris.

Hilton prometi¨® en julio pasado que ser¨ªa c¨¦libe durante un a?o "para redescubrirme"

"No soy muy lista y se me olvidan las cosas todo el tiempo", declar¨® Hilton a la polic¨ªa de Los ?ngeles

Hasta 2003, Hilton era conocida por sus farras junto a otros hijos de pap¨¢ millonarios, mimados, carentes de afecto y necesitados de atenci¨®n. Ese a?o, la cadena televisiva estadounidense Fox la fich¨® para realizar un reality show, The simple life (La vida simple), junto a la hija adoptiva del cantante Lionel Richie, Nicole, con el siguiente argumento: eran abandonadas en un pueblo de la Am¨¦rica profunda, sin m¨®viles ni tarjetas de cr¨¦dito, con la misi¨®n de sobrevivir trabajando y viviendo como personas normales. Lo que debi¨® ser un experimento sobre c¨®mo aprender a orde?ar vacas degener¨® r¨¢pidamente. En la primera temporada, Hilton y Richie robaron la tarjeta de cr¨¦dito a su jefe y orde?aron su cuenta bancaria como si ¨¦sta fuese una vaca lechera.

Hilton, de 25 a?os, quiz¨¢ deba su fama a una gran manipulaci¨®n publicitaria. El ¨¦xito de The simple life se debi¨® quiz¨¢ a que, una semana antes de su estreno, circul¨® por Internet un v¨ªdeo casero -con el sugerente t¨ªtulo de Una noche en Paris- en el que realizaba un amplio repertorio de actos sexuales con su novio de entonces, Rick Salomon.

Los m¨¢s suspicaces apuntan a que fue una t¨¢ctica publicitaria para el reality show, versi¨®n que Hilton rechaza tajantemente. Una noche en Paris fue galardonada por la industria pornogr¨¢fica con tres premios: pel¨ªcula m¨¢s vendida, m¨¢s alquilada y "mejor campa?a de marketing".

Los romances de Paris son incontables y tema favorito de la prensa, que hurga en su vida sexual, alentada quiz¨¢ por la propia Hilton. En julio pasado prometi¨® que ser¨ªa c¨¦libe durante un a?o "para redescubrirme". Los paparazzi lo tomaron como un reto y documentaron sus romances. En 15 d¨ªas, ya hab¨ªa sido captada besando a dos hombres distintos.

"No recuerdo lo que pas¨®, ?sabe? No soy muy lista y se me olvidan las cosas todo el tiempo", declar¨® a la polic¨ªa de Los ?ngeles durante un interrogatorio. La ignorancia de Hilton, quien acept¨® un viaje a Hait¨ª con un argumento singular -"no me molestar¨ªa pasar unos d¨ªas en Francia"-, parece no tener l¨ªmites. En abril estuvo a punto de costarle la vida. En una fiesta de cumplea?os salt¨® a la piscina cuando se cay¨® dentro una de las luces del jard¨ªn. "Todos nos quedamos asombrados, pero ella pens¨® que era divertid¨ªsimo", seg¨²n un asistente.

La fortuna familiar de los Hilton (un icono de la industria hotelera) se estima en 1.000 millones de d¨®lares, seg¨²n la lista de la revista Forbes. Paris posiblemente incrementar¨¢ ese patrimonio sin mucho esfuerzo. Contar con su presencia en un evento o programa de televisi¨®n cuesta entre 100.000 y un mill¨®n de d¨®lares. Forbes estima sus ganancias, en 2006, en 6,5 millones de d¨®lares.