Unas 5.000 personas protestan en Sevilla contra la reuni¨®n de la OTAN
Los manifestantes piden el regreso de las tropas espa?olas
La estadounidense Margaret Van Epp no tuvo inconveniente en sumarse ayer a la marcha antimilitarista que recorri¨® la ronda hist¨®rica de Sevilla, a pesar de que su pa¨ªs -y sobre todo, su presidente George W. Bush- acapararon parte de las consignas m¨¢s cr¨ªticas. Entre 4.000 y 5.000 personas, seg¨²n la polic¨ªa, se manifestaron para rechazar la reuni¨®n de ministros de Defensa de la OTAN que se celebrar¨¢ en Sevilla esta semana.
La primera manifestaci¨®n de protesta por la celebraci¨®n en Sevilla de una reuni¨®n de ministros de Defensa de la OTAN se celebr¨® ayer sin incidentes y sin la afluencia masiva que despert¨® la anterior contracumbre, organizada en 2002 contra un encuentro del Consejo de Europa (50.000 manifestantes recorrieron Sevilla entonces). Los actos alternativos a ambas citas oficiales han sido promovidos por el Foro Social de Sevilla, una plataforma que aglutina a numerosos colectivos y que naci¨® precisamente en 2002 para vertebrar el rechazo a aquella reuni¨®n comunitaria. "La de hoy es una manifestaci¨®n preventiva, como dir¨ªan ellos, para demostrar que no queremos que vengan", manifestaba uno de los portavoces del Foro, Federico Noriega, poco antes del comienzo de la marcha.
La pancarta de cabecera mostraba ayer un reguero de demandas, en sinton¨ªa con el batiburrillo de consignas coreadas y siglas que apoyaron la convocatoria: "OTAN no, no pasar¨¢n. Que vuelvan las tropas. OTAN no, bases fuera. Con la resistencia de los pueblos contra el imperialismo".
Para algunos manifestantes, sin embargo, su participaci¨®n respond¨ªa a una convicci¨®n m¨¢s simple, como el caso de Margaret Van Epp, una profesora estadounidense jubilada que se incorpor¨® a la protesta "en solidaridad" y "por la paz". Su compromiso pacifista est¨¢ arraigado: antes de mudarse a Sevilla, Margaret se ha manifestado en Idaho (Estados Unidos) contra la guerra de Irak cada viernes. El papel de la OTAN en estos tiempos la llena de dudas. "En estos momentos de reconfiguraciones mundiales hay cosas que me superan, s¨¦ cu¨¢les son mis ideales, estoy contra la militarizaci¨®n, pero no puedo hablar ligeramente sobre si a Espa?a le conviene estar en un bando o no", analiza.
Margaret se habr¨ªa sentido m¨¢s c¨®moda si la marcha hubiese discurrido bajo un simple lema a favor de la paz y contra la guerra de Irak, por ejemplo, pero no parec¨ªa en absoluto inc¨®moda por caminar junto a carteles que defin¨ªan a su presidente, George W. Bush, como "el terrorista n¨²mero uno" o junto a manifestantes que gritaban "gazpacho bueno, coca-cola veneno".
Apartados de la primera pancarta, portada por integrantes del Foro Social, caminaban dirigentes de Izquierda Unida, incluido su coordinador general, Gaspar Llamazares; el coordinador andaluz, Diego Valderas, el candidato a la alcald¨ªa de Sevilla, Antonio Rodr¨ªguez Torrijos, o los parlamentarios Concha Caballero, Antonio Romero y Jos¨¦ Manuel Mariscal. Llamazares se?al¨® que la OTAN es "un instrumento de guerra" y advirti¨® de que aquel pa¨ªs que apuesta por la paz para la resoluci¨®n de los conflictos "no puede estar en la estructura militar de la OTAN", informa Europa Press. "No cabe decir que Espa?a se libra de la guerra de Irak cuando est¨¢ presente en Afganist¨¢n dentro de Naciones Unidas", agreg¨®.
Adem¨¢s de IU y PCE, numerosos colectivos pol¨ªticos de izquierdas secundaron la manifestaci¨®n, apoyada tambi¨¦n por los sindicatos CC OO, CGT, CNT, USTEA y SOC. Abundaron las banderas republicanas y, sobre todo, los carteles individuales con la palabra "paz". Algunas personas se desplazaron desde otras provincias, como Mar¨ªa Cazalilla, de 73 a?os, llegada desde Linares (Ja¨¦n) porque "como comunista estoy en contra de la guerra y a favor de la paz". Afiliada al PCE desde los 15 a?os, Mar¨ªa quiso lanzar un mensaje recogido de su propia experiencia personal durante el franquismo. "Nosotros tenemos que demostrar que no somos como ellos, si t¨² piensas en ser como ellos, no ser¨ªamos nosotros", aconsej¨® un familiar de Mar¨ªa a otro que clam¨® que se vengar¨ªa de los franquistas.
La protesta, que concluy¨® tras dos horas de marcha por la ronda hist¨®rica, finaliz¨® con un comunicado le¨ªdo por el actor Antonio Dechent en el que invit¨® a luchar contra "la amenaza, intimidaci¨®n e injerencia violenta que la OTAN ejerce contra los pueblos y ciudadanos". El Foro Social tiene programada otra manifestaci¨®n para el jueves 8 desde el centro comercial Los Arcos hasta el barrio de Santa Clara, pr¨®ximo al Palacio de Congresos donde se re¨²nen los ministros de Defensa.
Accesos controlados
La entrada a Sevilla no es f¨¢cil ni r¨¢pida desde que comenz¨® a aplicarse el dispositivo de seguridad con vistas a la reuni¨®n de la OTAN. Largas colas y largas esperas aguardan a las personas que deben acceder a la capital andaluza, principalmente por la A-92 (Sevilla-Almer¨ªa), A-49 (Sevilla-Huelva) y A-4 (Sevilla-Madrid).
A partir de hoy est¨¢ previsto que comiencen las obras para vallar los alrededores del Palacio de Congreso y Exposiciones, sede de la reuni¨®n, lo que previsiblemente repercutir¨¢ en el tr¨¢fico en el barrio de Sevilla Este, que sufrir¨¢ las restricciones de forma especial.
El Foro Social de Sevilla ha arremetido contra el plan de seguridad y ha criticado que "se enjaule a cerca de 100.000 vecinos de Sevilla Este". El vallado que circundar¨¢ el barrio ser¨¢ permeable para permitir el paso en los momentos en los que no se desplacen las delegaciones ministeriales. Unos 4.600 guardias civiles y pol¨ªcias se encargan de la seguridad.
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