Sants: una comisar¨ªa muy especializada

Un robo no es un plato de buen gusto. Las personas robadas acostumbran a sufrir un ataque de indignaci¨®n y rabia contra los autores del robo. Y la cosa puede ser peor. Es lo que le ocurri¨® a J. C. G. el pasado 2 de enero sobre las seis de la tarde. "Iba por la calle de los Comtes de Bell-lloc, a unos 50 metros de la estaci¨®n de Sants, cuando me pararon un par de hombres de procedencia for¨¢nea, lo digo por los rasgos y el acento. No me produjeron recelo alguno porque normalmente son gente muy agradable, cre¨ªa que iban a preguntarme alguna direcci¨®n". Pero no, apenas unos segundos despu¨¦s ten¨ªa un cuchillo de cocina en la barriga. "Me pidieron lo que llevara: 40 euros. No quisieron ni el reloj ni el m¨®vil, que es antiguo, ni tarjetas de cr¨¦dito ni el monedero. S¨®lo el dinero".

Con el mal cuerpo que estas cosas originan, J. G. C. se dirigi¨® a la estaci¨®n, recordando que en su interior hay una comisar¨ªa de los Mossos d'Esquadra. Iba con la intenci¨®n de poner la denuncia y, si fuera el caso, indicarles la ubicaci¨®n de los individuos, por si decid¨ªan intentar detenerlos. Se qued¨® con las ganas.

"Me dijeron que no pod¨ªa poner la denuncia all¨ª porque ellos estaban s¨®lo para hurtos dentro de la estaci¨®n. Lo m¨ªo, como hab¨ªa un arma por medio, no era un hurto sino un atraco y, adem¨¢s, fuera del recinto". Eso s¨ª, "muy amablemente" le recomendaron que fuera a poner la denuncia en la comisar¨ªa de la Zona Franca, para lo que pod¨ªa utilizar el autob¨²s 109 (uno de los que ofrece peor servicio del mundo y parte del extranjero). All¨ª, adem¨¢s, tienen libros con fotos de delincuentes y podr¨ªa tratar de reconocerlos.

J. G. C. mir¨® su reloj, calcul¨® cu¨¢nto tiempo le llevar¨ªa ir y volver al purgatorio de la Zona Franca y desisti¨®. "Decid¨ª poner la denuncia en la comisar¨ªa de donde vivo, en Sant Feliu del Llobregat". Y as¨ª lo hizo. El Cuerpo Nacional de Polic¨ªa no le puso ning¨²n reparo.

Un portavoz de los Mossos d'Esquadra neg¨® que se tratara de una treta para reducir el n¨²mero de denuncias. El portavoz a?adi¨® que no se le impidi¨® poner la denuncia y que s¨®lo se le "recomend¨®" que fuera a la Zona Franca (a unos nueve kil¨®metros de distancia, casi todos en obras). La comisar¨ªa de Sants puede aceptar denuncias y debe hacerlo, insisti¨® la misma fuente.

La versi¨®n de J. G. C. es bastante consistente, detallada y precisa. No parece que pudiera confundir las instrucciones del agente. Adem¨¢s, explic¨®, "yo pod¨ªa haber ido con la intenci¨®n de que quedara constancia de la denuncia a efectos de una posible p¨®liza de seguros".

El portavoz de los Mossos reconoci¨® que la comisar¨ªa de Zona Franca est¨¢ en el quinto pino y matiz¨® que dentro de un a?o entrar¨¢ en funcionamiento la de la plaza de Espanya. Un alto cargo del departamento fue m¨¢s conciso: "Es evidente, el ciudadano se encontr¨® con un mosso poco diligente". Porque lo cierto es que la recomendaci¨®n de ir hasta all¨ª a denunciar parece casi una maniobra totalmente disuasoria.

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