El Gobierno acusa al PP de "apropiaci¨®n sectaria de los s¨ªmbolos nacionales"
El PSOE dice que el uso del himno espa?ol en la marcha del s¨¢bado vulnera un decreto de Aznar
La utilizaci¨®n del himno y la bandera de Espa?a en la manifestaci¨®n del pasado s¨¢bado en Madrid contra la negociaci¨®n con ETA, convertida en un acto en contra del Gobierno de Zapatero, indign¨® ayer al Ejecutivo y al PSOE. Acusaron a la direcci¨®n del PP, impulsora de la manifestaci¨®n, de "apropiaci¨®n sectaria de los s¨ªmbolos nacionales" y de "vulnerar el esp¨ªritu de un decreto de 1997, que dio rango oficial" al uso del himno nacional. El portavoz del PSOE, Diego L¨®pez Garrido, record¨® por "ins¨®lito" el uso del "himno de todos" en un "acto partidista, de ataque al Gobierno".
Un decreto del 11 de octubre de 1997, de la primera legislatura del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, regul¨® el uso del himno nacional para actos oficiales. El Ejecutivo de Aznar lleg¨® previamente a un compromiso con los sucesores del autor del himno, Bartolom¨¦ P¨¦rez Casas, para que "cedieran con car¨¢cter exclusivo" al Estado los derechos de autor, de acuerdo con la Ley del Patrimonio del Estado. Y pag¨® por tales derechos 130 millones de pesetas (781.000 euros) a los sucesores de P¨¦rez Casas.
El decreto del 11 de octubre de 1997 precisa, en su versi¨®n breve, el uso del himno nacional para los siguientes casos: en los actos oficiales a los que asistan el Pr¨ªncipe o la Princesa de Asturias y los Infantes de Espa?a; en los actos oficiales a los que asista el presidente del Gobierno; en los actos deportivos o de cualquier otra naturaleza en los que haya una representaci¨®n oficial de Espa?a y en los dem¨¢s casos previstos en el Reglamento de Honores Militares.
La utilizaci¨®n del himno nacional est¨¢ limitada a "momentos representativos de la unidad de Espa?a" y "evita usos partidistas", destac¨® de la lectura del decreto el portavoz del PSOE, Diego L¨®pez Garrido. Y record¨®, a continuaci¨®n, que la manifestaci¨®n del s¨¢bado en Madrid no s¨®lo no se ajustaba a los l¨ªmites fijados por el decreto sobre el himno nacional, sino que, adem¨¢s, vulneraba "el esp¨ªritu del decreto por cerrar un acto partidista, en el que se atac¨® la pol¨ªtica antiterrorista del Gobierno".
Tanto el Gobierno como el PSOE valoran como "grave" lo sucedido el s¨¢bado y lo sit¨²an en la estrategia de la direcci¨®n del PP de "apropiaci¨®n de los s¨ªmbolos y las pol¨ªticas de todos" que, a su juicio, es "propia de posiciones sectarias y reg¨ªmenes autoritarios". "?Qui¨¦n ha utilizado en la historia de Espa?a los s¨ªmbolos nacionales, apropi¨¢ndoselos, para combatir, en algunas ocasiones, incluso, a la mayor¨ªa de la poblaci¨®n? ?Hasta d¨®nde va a llegar Rajoy?", pregunt¨® ayer L¨®pez Garrido.
"Actos partidistas"
El Gobierno suma ahora la "apropiaci¨®n" por la direcci¨®n del PP del himno nacional a su estrategia de "pretender monopolizar en sus actos partidistas la representaci¨®n de las v¨ªctimas del terrorismo, la pol¨ªtica antiterrorista y la bandera nacional".
El Gobierno no duda en calificar la manifestaci¨®n del s¨¢bado en Madrid como "la m¨¢s sectaria de las que ha organizado el PP contra el Ejecutivo, en la que m¨¢s se ha insultado al presidente del Ejecutivo, en la marcha y en los discursos, y en la que ha quedado reflejada de modo m¨¢s claro su estrategia de monopolizar la idea de Espa?a". "La actitud del PP en la manifestaci¨®n; las mentiras, como que el Gobierno est¨¢ negociando con ETA y los insultos que se dirigieron al presidente del Gobierno, lleg¨¢ndole a comparar con los terroristas, alejan al primer partido de la oposici¨®n del consenso en la lucha contra el terrorismo", aseguran fuentes gubernamentales.
El Ejecutivo considera que la direcci¨®n del PP -como reflej¨® la manifestaci¨®n del s¨¢bado, y como en ella declar¨® su presidente, Mariano Rajoy- pretende imponer "su pol¨ªtica antiterrorista al Gobierno y s¨®lo le apoyar¨¢ si el Ejecutivo acepta lo que dice".
Precisamente, esta posici¨®n de salida del PP ataca de lleno al Pacto Antiterrorista, que en diciembre de 2000 suscribieron el PP y PSOE -y que los populares invocan como base unitaria-, ya que, en su primer punto, expresa que al Gobierno le corresponde dirigir la pol¨ªtica antiterrorista y compromete adem¨¢s a los dos principales partidos nacionales a no utilizar el terrorismo como arma de confrontaci¨®n pol¨ªtica.
Intentar la unidad
Pese a todo, el Ejecutivo volver¨¢ a intentar la unidad con el PP en la lucha contra el terrorismo. El ministro del Interior, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, mantiene su pretensi¨®n de convocar esta misma semana a los l¨ªderes del PP para celebrar la reuni¨®n preparatoria de la Comisi¨®n de Seguimiento del Pacto Antiterrorista. "Lo ¨²nico que pedimos es que nadie imponga condiciones previas para celebrar el encuentro", declaran fuentes gubernamentales.
El Gobierno cree que si en el PP hubiera "voluntad pol¨ªtica" se podr¨ªa restablecer la unidad contra el terrorismo. "Suscribimos el articulado del Pacto Antiterrorista, que invoca el PP, y sus bases, como que la paz no debe tener un precio pol¨ªtico; que hay que luchar contra el terrorismo utilizando los instrumentos del Estado de derecho y que con terrorismo, no hay di¨¢logo", insisten fuentes gubernamentales.
El Ejecutivo mantiene, tambi¨¦n, que el Pacto Antiterrorista es "perfectamente compatible" con ampliar la unidad contra el terrorismo a otros partidos, como el PNV, b¨¢sico en la lucha contra el terrorismo en Euskadi. "En 2000 no pudo entrar en el consenso, pero hoy s¨ª se dan las condiciones para que lo haga. Y eso hay que aprovecharlo", a?aden las fuentes consultadas.
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