Seis deliberaciones al borde del abismo

El pasado jueves, en el sal¨®n de plenos del Tribunal Constitucional, la incertidumbre acumulada durante m¨¢s de una semana a cuenta de la deliberaci¨®n sobre la recusaci¨®n de Pablo P¨¦rez Tremps se deshizo con un desenlace que el Gobierno no esperaba. Por seis votos a favor (del bloque conservador) y cinco en contra (del grupo progresista) el Tribunal Constitucional aprobaba por primera vez en su historia la recusaci¨®n de uno de sus magistrados.

La decisi¨®n era crucial para el futuro del Estatuto de Catalu?a. Tras la votaci¨®n, la mayor¨ªa del Constitucional pasaba a manos de los conservadores, magistrados elegidos a propuesta del PP, el partido pol¨ªtico que m¨¢s ha luchado para que el Estatuto de Catalu?a sea declarado inconstitucional.

Acebes calent¨® el debate: "Es impensable que Tremps participe en la deliberaci¨®n"

Hasta llegar a la recusaci¨®n de P¨¦rez Tremps, los magistrados del Constitucional deliberaron en jornadas maratonianas, algunas de ma?ana y tarde. Otros d¨ªas, los debates se alargaron hasta la medianoche.

Los magistrados deliberaban sobre una cuesti¨®n que ya analizaron un a?o antes, aunque la presi¨®n entonces era mucho menor. En enero de 2006 se trataba de dilucidar si la admisi¨®n a tr¨¢mite de la reforma del Estatuto en el Congreso era constitucional o no, y el PP recus¨® a P¨¦rez Tremps con el argumento de que hab¨ªa hecho un estudio para la Generalitat. Tres magistrados conservadores: Guillermo Jim¨¦nez S¨¢nchez, Javier Delgado Barrio y Vicente Conde Mart¨ªn de Hijas, no compartieron los argumentos del PP y se rechaz¨® la recusaci¨®n.

Ahora era otra historia. Al menos as¨ª lo entendieron esos tres magistrados. El Estatuto de Catalu?a ya hab¨ªa salido del Congreso, muy rebajado, y hab¨ªa sido respaldado por amplia mayor¨ªa en el refer¨¦ndum convocado en Catalu?a. El PP calentaba a su manera la deliberaci¨®n del Alto Tribunal. ?ngel Acebes, secretario general del PP, declaraba el mismo d¨ªa que comenzaron los debates: "Ser¨ªa impensable que P¨¦rez Tremps pudiera intervenir".

Pese a la presi¨®n del PP, la presidenta del Constitucional, Mar¨ªa Emilia Casas, que tambi¨¦n hab¨ªa sido recusada sin ¨¦xito por los populares aduciendo los trabajos de su marido, estaba tranquila porque la cosa ya hab¨ªa sido juzgada antes por el Tribunal, que en enero de 2006 consider¨® que los trabajos acad¨¦micos de P¨¦rez Tremps no eran causa de recusaci¨®n.

Las primeras reuniones para debatir el recurso del PP abordaron una cuesti¨®n formal -la falta de firmas de los diputados del PP en la ratificaci¨®n de su recurso- como posible causa de inadmisi¨®n del mismo. Pero la propuesta decay¨® pues los magistrados entendieron que ser¨ªa un esc¨¢ndalo no entrar a debatir el fondo del asunto y despachar la recusaci¨®n del PP con un rechazo por cuestiones de forma en la presentaci¨®n del recurso.

Cuando los magistrados entraron a analizar los trabajos de P¨¦rez Tremps para la Generalitat, por encargo del Gobierno de Jordi Pujol y pagados por el Gobierno tripartito que presid¨ªa Pascual Maragall, se levantaron dos frentes. En uno de ellos se situaron los cinco magistrados del bloque progresista y en el otro, los que apoyaban la recusaci¨®n, cinco de los seis conservadores.

El empate a cinco se deshizo en la deliberaci¨®n de la tarde del jueves, la quinta que se produc¨ªa en poco m¨¢s de una semana. Guillermo Jim¨¦nez, vicepresidente del Constitucional y catedr¨¢tico de Derecho Mercantil, no acababa de compartir una recusaci¨®n por trabajos acad¨¦micos. Eso podr¨ªa invalidar en el futuro a los miembros del Constitucional que no proceden del mundo de la judicatura sino del mundo acad¨¦mico, como el mismo Guillermo Jim¨¦nez. Pese a esas dudas, Jim¨¦nez acab¨® inclinando la balanza a favor del bloque conservador, ante la decepci¨®n de Mar¨ªa Emilia Casas.

El pasado lunes, se hizo p¨²blico el acuerdo y se abri¨® la mayor fractura en la historia del Constitucional.