Los obispos preparan una nueva batalla contra el Gobierno por la educaci¨®n
El conflicto se centra ahora en los contenidos de la asignatura educaci¨®n para la ciudadan¨ªa
Los obispos ultiman estos d¨ªas una agenda para 2007 que apuntala rencillas internas y, sobre todo, nuevos conflictos con el Gobierno socialista. Apenas hay novedades sobre el pasado curso. Los prelados, descontentos con las decisiones de Educaci¨®n sobre la ense?anza del catolicismo en la escuela p¨²blica, centrar¨¢n en cambio la ofensiva en c¨®mo el Ejecutivo ha planteado la asignatura educaci¨®n para la ciudadan¨ªa. La batalla contra la supuesta "ilegalidad" de los contenidos de esa materia curricular alcanzar¨¢ a instituciones e instancias judiciales espa?olas y europeas.
"En los a?os pasados los alumnos pod¨ªan tener dos horas de clase de religi¨®n a la semana. Ahora, el Gobierno las quiere reducir a una sola hora. Parece que existe el deseo de que la religi¨®n quede como algo residual, algo de muy poca importancia que se deja ah¨ª por no quitarlo, casi como un residuo decorativo. Da pena comprobar que despu¨¦s de 30 a?os de democracia estemos todav¨ªa con esta discusi¨®n de 'religi¨®n, s¨ª; religi¨®n, no', cuando es un asunto que cualquier pa¨ªs serio deber¨ªa tener resuelto". Estas palabras del arzobispo de Pamplona, Fernando Sebasti¨¢n, uno de los grandes ide¨®logos de la jerarqu¨ªa cat¨®lica, resumen el estado de ¨¢nimo de la Conferencia Episcopal Espa?ola (CEE).
La tesis es que el Gobierno no s¨®lo debe respetar la libertad religiosa de los ciudadanos, sino que debe favorecerla facilitando su ense?anza, en este caso de la moral y religi¨®n cat¨®licas. "La manera de entender las cosas del Ejecutivo lleva f¨¢cilmente a una cierta violencia espiritual y cultural", dice el arzobispo Sebasti¨¢n.
La asignatura de religi¨®n sigue dentro del sistema educativo, impartida por decenas de miles de profesores contratados y pagados por el Estado, pero seleccionados para cada curso por los obispos. Es decir, el Gobierno introdujo muy pocas novedades en la reforma aprobada el curso pasado. Pese a todo, los prelados se sintieron muy insatisfechos, casi agredidos, y respaldaron que sus organizaciones afines se movilizaran a fondo contra la Ley Org¨¢nica de Educaci¨®n (LOE).
Eso fue el a?o pasado. En 2007 la ofensiva va m¨¢s all¨¢. Los obispos quieren intervenir tambi¨¦n en el valor curricular y los contenidos de las asignaturas alternativas a la de catolicismo. Para ello preparan un manifiesto, que van a hacer p¨²blico tras la reuni¨®n de la Comisi¨®n Permanente de la Conferencia Episcopal, los pr¨®ximos d¨ªas 27 de febrero a 1 de marzo. El comit¨¦ ejecutivo episcopal ultim¨® el documento en su reuni¨®n del jueves, primera del a?o. Componen este ¨®rgano seis prelados y un sacerdote jesuita: los cardenales Antonio Mar¨ªa Rouco (Madrid), Antonio Ca?izares (Toledo) y Carlos Amigo (Sevilla); los arzobispos Lluis Mart¨ªnez Sistach (Barcelona) y Carlos Osoro (Oviedo); el obispo de Bilbao y presidente de la CEE, Ricardo Bl¨¢zquez, y el jesuita Juan Antonio Mart¨ªnez Camino, como portavoz y secretario general de la instituci¨®n.
El objetivo del manifiesto episcopal, que va a ser "muy duro" seg¨²n fuentes eclesi¨¢sticas, es la asignatura llamada educaci¨®n para la ciudadan¨ªa. Algunos prelados ya han reclamado a fieles que ejerzan la objeci¨®n de conciencia ante esa asignatura, y la propuesta ha sido asumida con entusiasmo por la asociaci¨®n Profesionales por la ?tica. Presentada como la "promotora de la campa?a de objeci¨®n de conciencia frente a la imposici¨®n obligatoria de la asignatura educaci¨®n para la ciudadan¨ªa", esta organizaci¨®n tambi¨¦n est¨¢ estudiando denunciar "la ilegalidad de los contenidos de esta materia curricular ante diferentes instituciones e instancias judiciales espa?olas y europeas".
Jaime Urcelay, portavoz de Profesionales por la ?tica, apela a un dictamen del Consejo de Estado para decirle al Gobierno que "no puede formar parte de los aspectos b¨¢sicos del sistema educativo la difusi¨®n de valores que no est¨¦n consagrados en la Constituci¨®n". Afirma: "Los contenidos de la asignatura educaci¨®n para la ciudadan¨ªa claramente se entrometen en la formaci¨®n moral de los alumnos. Por tanto, es posible iniciar acciones pol¨ªticas y legales en defensa de los derechos de los padres en todos los ¨¢mbitos posibles".
Profesionales por la ?tica sostiene en un largo documento que el Ministerio de Educaci¨®n ha sometido a varias "grav¨ªsimas manipulaciones" al dictamen del Consejo de Estado en que la citada asociaci¨®n basa sus severas denuncias, y se propone hablar con los grupos parlamentarios del Congreso sobre el asunto antes de tomar otras decisiones.
Otro asunto es la unanimidad episcopal ante estas campa?as. La severidad cr¨ªtica que algunos prelados reclaman contra el Gobierno por estos conflictos educativos ahonda la divisi¨®n de la Conferencia Episcopal. Son muchos los que reclaman m¨¢s energ¨ªa -entre otros, los cardenales Rouco y Ca?izares-, pero abundan tambi¨¦n quienes apuestan por el di¨¢logo o por unas denuncias menos agrias.
Es la misma discordia, por cierto, que la escenificada semanas atr¨¢s a prop¨®sito del fallido di¨¢logo del Gobierno con ETA. Algunos obispos calificaron de inmoral cualquier contacto con los terroristas, mientras otros, como el presidente de la CEE, el obispo Bl¨¢zquez, no vieron con malos ojos una posible negociaci¨®n. La disputa contin¨²a.
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