Bruselas endurecer¨¢ la lucha contra los acuerdos ilegales entre empresas

La comisaria de Competencia, Neelie Kroes, est¨¢ decidida a endurecer la lucha contra los carteles con nuevas investigaciones y con la imposici¨®n de las sanciones m¨¢s graves posibles, seg¨²n una fuente de la Comisi¨®n Europea. Los carteles son asociaciones secretas de empresas de un mismo sector que se constituyen para restringir la oferta de determinados productos y as¨ª aumentar artificialmente los precios en perjuicio de los consumidores y de la competencia general del pa¨ªs. Kroes ha emprendido una cruzada contra ellas con multas r¨¦cord.

Cuando Neely Kroes fue nombrada comisaria, se alzaron algunas voces cr¨ªticas que le reprochaban haber pertenecido a los consejos de administraci¨®n de numerosas empresas. Tem¨ªan que fuera condescendiente con sus antiguos colegas. "No voy a ser una gatita", respondi¨® ella en su primera rueda de prensa. Las cifras le dan la raz¨®n.

La guerra contra los carteles se ha intensificado durante los dos ¨²ltimos a?os, con un total de multas que superan los 4.000 millones de euros, de los que m¨¢s de 3.500 millones se han impuesto durante los ¨²ltimos 12 meses. Desde junio de 2005, m¨¢s de 60 funcionarios se dedican exclusivamente al descubrimiento y persecuci¨®n de c¨¢rteles.

La lucha contra estas pr¨¢cticas restrictivas de la competencia ha sido una de las pol¨ªticas m¨¢s emblem¨¢ticas de la Comisi¨®n pero se ha intensificado recientemente. Entre 1970 y 2001 se adoptaron una media de 1,5 decisiones anuales en contra de los carteles. Entre 2001 y 2003, la media de decisiones anuales se elev¨® a ocho. Pero en los ¨²ltimos 12 meses, ha empezado la guerra sin cuartel contra este tipo de pr¨¢cticas cada vez m¨¢s extendidas que perjudica directamente a los consumidores, los usuarios de servicios p¨²blicos y la competitividad de la econom¨ªa en general.

Destacadas empresas europeas, han sido sancionadas con importantes multas durante los ¨²ltimos a?os: Shell, (160 millones de euros); Solvay, (167); Arjo Wiggins Appleton, (184); Arkema, (219); Basf, (236); Lafarge, (249); ENI, (272); Siemens (396); Hoffmann-La Roche (462), y finalmente esta semana ThyssenKrupp. (479 millones de euros). En muchas ocasiones son las propias empresas las que han acabado delatando a sus c¨®mplices a cambio de inmunidad.

La Comisi¨®n ha decidido endurecer las multas, tras descubrir los largos periodos de tiempo que han estado funcionando estos carteles, para lanzar una se?al a las empresas que hasta ahora han considerado m¨¢s rentable la actuaci¨®n ilegal a pesar de las sanciones. Seg¨²n la normativa comunitaria, la sanci¨®n puede ascender hasta un m¨¢ximo del 10% del volumen anual de las ventas. El malestar de Bruselas es porque algunos c¨¢rteles como el del sector de los fabricantes de sacos industriales descubierto en 2005 ha estado funcionando 20 a?os, con lo que la sanci¨®n, en este caso de 290 millones de euros, habr¨¢ sido f¨¢cilmente digerible.

Otro c¨¢rtel significativo descubierto a principios de este a?o, constituido por los fabricantes de aislantes de aparatos de conmutaci¨®n y aislamientos de gas, en el que estaban implicadas importantes empresas como ABB, Alstom, Areva, Siemens, Fuji Electric, Hitachi, Mitchubichi, Schneider, Siemens y Toshiba, sufri¨® una multa de 750 millones de euros, pero estuvo "enga?ando a la compa?¨ªa de servicios p¨²blicos y consumidores durante m¨¢s de 16 a?os", seg¨²n coment¨® Kroes.

Un aspecto que ha propiciado el endurecimiento de las penas ha sido la aparici¨®n de numerosos casos de reincidencia. Es el caso del c¨¢rtel de fabricantes de ascensores y escaleras mec¨¢nicas, que aumentaron los precios artificialmente para edificios p¨²blicos incluidos los hospitales durante 10 a?os y que fue multado con 990 millones de euros. Como se trata de contratos que incluyen servicios de mantenimiento, los efectos perversos pueden prolongarse durante 20 o 50 a?os m¨¢s. ThyssenKrupp sufri¨® un aumento de la sanci¨®n del 50% por haber sido sancionada ya en 1998.

Tambi¨¦n fueron multados m¨¢s severamente por reincidentes Arkema, Solvay y Edison, en el cartel de agentes blanqueadores, en 2006 y Shell en el c¨¢rtel del polipropileno. "A pesar de que subiremos las sanciones al m¨¢ximo, los infractores europeos de este tipo de fraudes a¨²n tienen suerte porque en Estados Unidos, adem¨¢s de la sanci¨®n van a la c¨¢rcel", una fuente comunitaria.

Los medios utilizados por los carteles, mensajes electr¨®nicos, con c¨®digos secretos; direcciones an¨®nimas, en cartel de los aislantes por gas; reuniones secretas en Mil¨¢n, Viena, Amsterdam, Praga y Londres, para acordar subidas de precios en cartel del caucho sint¨¦tico, o reuniones fuera de las empresas, como el del c¨¢rtel de blanqueadores, que celebraba sus encuentros en un restaurante de Bruselas, indican todo un tipo de funcionamiento m¨¢s propio de las organizaciones delictivas, que tiene poco que ver con empresas que se vanaglorian de c¨®digos de ¨¦tica y normas de buen gobierno.

En este sentido, Kroes ha dirigido sus advertencias tambi¨¦n a "los accionistas para que examinen con cuidado c¨®mo se gestionan sus empresas".