El Betis sigue cerca del descenso tras su tercer empate consecutivo

Luis Fern¨¢ndez ha fabricado un equipo solidario, bregador y tremendamente plasta para los contrarios. Lo que a¨²n no se le ha ocurrido es c¨®mo conseguir que meta goles. El Betis no enamora, pero cumple y si sigue sin alejarse del descenso es principalmente por su poca capacidad de rentabilizar los partidos. Como ayer, cuando el Recreativo apenas le caus¨® problemas y acab¨® llev¨¢ndose un punto. Pancrat¨¦ tuvo la mejor ocasi¨®n -que tampoco fueron tantas- a poco m¨¢s de 20 minutos del final, pero el franc¨¦s se exhibi¨® en su carrera en la misma medida en la que se aturull¨® a la hora de superar a L¨®pez Vallejo en su salida desesperada. Dani y Sobis tambi¨¦n lo intentaron. Y hasta el canterano Juande empalm¨® desde fuera del ¨¢rea con desparpajo e intenci¨®n, pero id¨¦ntico saldo.

El Betis comenz¨® el encuentro con ese esp¨ªritu de rebato que le caracteriza desde la llegada del franc¨¦s a su banquillo. Lo mejor que le trajo el arre¨®n inicial fue un libre indirecto dentro del ¨¢rea. L¨¢stima que Assun??o decidiera tirar a derribar al portero y a la barrera que, de puntillas, formaban los futbolistas m¨¢s altos del Recreativo.

Poco despu¨¦s, le toco el turno a los visitantes. Sinama se hart¨® de ver pelotazos ir y venir por el aire -eso es de lo que m¨¢s hubo en la primera mitad-, se ech¨® a la banda, dej¨® a Melli crujiendo, levant¨® la cabeza y coloc¨® un centro en el segundo palo que Juanma tan s¨®lo acert¨® a pegar el exterior de la red. Poco m¨¢s se vio del Recreativo en Heli¨®polis en la primera mitad y en el resto del encuentro.

De las extra?as medidas que Fern¨¢ndez ha tomado como costumbre con respecto al c¨¦sped de Heli¨®polis -cabezas de ajo en las porter¨ªas, pu?ados de sal... - la que m¨¢s ha influido para bien y para mal ha sido la de estrechar el terreno de juego. Seg¨²n lleg¨® consider¨® que no ten¨ªa jugadores de banda como para sacarles provecho y las reban¨®. As¨ª , se beneficia el juego directo y se subvenciona el barullo y el grumo en el centro del campo. Lo peor es que cuando se domina el encuentro, uno se encuentra con que a lo m¨¢s a lo que se puede aspirar es a trasladar el apelotonamiento hasta al ¨¢rea del contrario. Y ya no se puede echar mano del caldero de la cal.

El Betis no supo ganar ayer un partido que domin¨® durante la mayor parte del tiempo y en el que el Recreativo se dej¨® ir. Los verdiblancos ya no caen al primer golpe, pero a¨²n no saben c¨®mo dar ellos.