La ¨²ltima hornada de narcotraficantes empez¨® a sufrir condenas en 2003

Desde 2003 empezaron a entran en la c¨¢rcel famosos fugitivos, la mayor¨ªa juzgados en rebeld¨ªa y que no han sido clasificados por Instituciones Penitenciarias. Los qeu est¨¢n presos no saldr¨¢n de prisi¨®n antes de 2035. Es el caso de Francisco Javier Mart¨ªnez Sanmill¨¢n, fugitivo desde 1992 cuando conoci¨® la condena de 17 a?os como implicado en el caso N¨¦cora. Sanmill¨¢n tiene pendiente otra condena de 20 a?os, id¨¦ntica a la de su antiguo socio Alfredo Cordero. Viv¨ªa en una lujosa mansi¨®n en Alicante cuando lo descubri¨® la polic¨ªa pese a que se hab¨ªa cambiado las huellas dactilares con una operaci¨®n de cirug¨ªa.

El septuagenario Manuel Carballo Jueguen, socio de Pablo Vioque en el narcotr¨¢fico, tendr¨¢ que cumplir una condena de 17 a?os. Despu¨¦s de permanecer en busca y captura desde 1991, Carballo se entreg¨® en julio del pasado a?o. El cambad¨¦s Ramiro Somoza es otro de los que han batido r¨¦cord de fugitivo. Huido desde 1993 como implicado en un alijo de 2.000 kilos de coca¨ªna, se refugi¨® en Dakar (Senegal) hasta que fue detenido en 2003 por otro importante alijo.

En la ¨²ltima operaci¨®n policial cayeron dos afamados narcos como Jos¨¦ Benito Charl¨ªn o Daniel Ba¨²lo, a pesar del enfrentamiento de ambas familias. Trabajaban para un importante cartel colombiano dirigiendo los desembarcos de coca¨ªna en Galicia cuando fueron detenidos en diciembre pasado. Charl¨ªn ha tenido buenos maestros como miembro de Los Charlines, para el que trabaj¨® el padre de Daniel Ba¨²lo, pero su arrepentimiento como m¨¢ximo responsable de los transportes de droga del clan le costaron la vida.