"Me despert¨¦ en la ambulancia"

Una visita inesperada agit¨® el vestuario del Chelsea mientras celebraba el t¨ªtulo de la Carling Cup en la privacidad de su caseta. Cuando los jugadores proced¨ªan a los preceptivos ba?os, c¨¢nticos y descorches de botellas de champ¨¢n, dos manos imprevistas reclamaron el derecho a agarrar las orejas de la peque?a Copa de plata que distingue al campe¨®n del torneo. Eran las manos de John Terry, el capit¨¢n, que hab¨ªa abandonado el campo inconsciente, en camilla, con un collar¨ªn protegi¨¦ndole de mayores da?os y con una mascarilla de ox¨ªgeno ayud¨¢ndole a respirar.

Terry, en palabras de sus compa?eros, hab¨ªa protagonizado una escena "horrible", golpeado involuntariamente en la cabeza por Diaby, del Arsenal, su rival en la final. Y Terry, en una demostraci¨®n "de clase" y fuerza, ya hab¨ªa abandonado el hospital para celebrar el t¨ªtulo con los suyos: "Le estaba diciendo a los colegas que no me acuerdo de nada", reconoci¨®, ante las c¨¢maras de la televisi¨®n de su club. "Recuerdo saltar al campo en la segunda parte y nada m¨¢s hasta que me levant¨¦ en la ambulancia, camino del hospital", continu¨®. "Me hice un esc¨¢ner y me dijeron que todo estaba bien. Es genial estar de vuelta. Mis compa?eros estuvieron fenomenal", cerr¨® el central antes de sincerarse: "Bueno, me sigo sintiendo un poco grogui a¨²n. Gracias a los compa?eros, mi presencia no fue muy necesaria en el segundo tiempo. Durante toda la competici¨®n han estado muy concentrados".

Terry, que hab¨ªa estado 10 minutos inconsciente sobre el c¨¦sped, ya no llevaba collar¨ªn ni mascarilla de ox¨ªgeno. Por algo Cech, portero del Chelsea, le dijo nada m¨¢s verle que se merec¨ªa que le nombraran hombre de hierro del a?o 2007. El meta hab¨ªa observado el golpe, los gritos de sus compa?eros y la entrada a la carrera de m¨¦dicos y fisioterapeutas con gesto desencajado. Esta temporada ¨¦l mismo sufri¨® una fractura en el cr¨¢neo al golpearse con un delantero rival. Desde entonces juega con un casco protector: "No me sent¨ª bien los minutos antes de que le pusieran en la camilla. Me record¨® a mi lesi¨®n y con las lesiones de cabeza nunca se sabe", argument¨® el meta. "Afortunadamente, los fisioterapeutas fueron muy r¨¢pidos", prosigui¨® Cech. "Sent¨ª much¨ªsimas emociones porque se trat¨® del mismo caso que el m¨ªo con mi lesi¨®n, y ya se ha visto lo dif¨ªcil que es volver y todo lo que conlleva".

El partido, duro y tenso, alcanz¨® el cl¨ªmax en el minuto 90, cuando tres jugadores, Mikel, del Chelsea, y Adebayor y Tour¨¨, del Arsenal, fueron expulsados. Los clubes apelaron ayer contra las expulsiones de Mikel y Adebayor, que protest¨® insistentemente y no abandon¨® el campo hasta que le fue a buscar un asistente del Arsenal. "Estoy seguro de que los jugadores ser¨¢n sancionados", dijo Ars¨¨ne Wenger, t¨¦cnico de los gunners. "?Ser¨¢ por uno o dos partidos? Con la Asociaci¨®n de f¨²tbol siempre tienes una buena oportunidad de preocuparte". La tangana, en la que participaron todos los jugadores de ambos equipos, comenz¨® cuando Tour¨¨ respondi¨® a una dura entrada de Mikel. "Me disculpo", dijo ayer el defensa. "El Chelsea iba ganando y estaba empezando a perder tiempo. Eso no me hac¨ªa feliz. Por eso fui a buscar a Mikel y compartimos unas palabras. Luego se sum¨® Lampard, y quiz¨¢s hiciera las cosas m¨¢s grandes, pero eso es el f¨²tbol. No es que quisiera golpear al ¨¢rbitro. S¨®lo quer¨ªa saber por qu¨¦ me hab¨ªa expulsado. No creo que hiciera nada mal".

Jos¨¦ Mourinho, el t¨¦cnico del Chelsea, tambi¨¦n defendi¨® al expulsado Mikel, que hab¨ªa entrado al campo en sustituci¨®n del lesionado Terry. "A veces, gente madura pierde el control de sus emociones", dijo. "No se puede matar a un jugador por lo que pas¨®. Si Mikel hizo algo mal, no es mi trabajo matarle. Mi trabajo es educarle".