"La sentencia deja el triste mensaje de que la violencia es rentable"
Emir Suljagic, superviviente de Srebrenica, cree que Serbia es culpable
El escritor y periodista bosnio Emir Suljagic no s¨®lo sobrevivi¨® a Srebrenica, sino a un encuentro cara a cara con el general serbio Ratko Mladic durante los d¨ªas de la matanza. A pesar de ser un var¨®n en edad militar, pudo contarlo porque era traductor de Naciones Unidas. Pero Suljagic, de 32 a?os, perdi¨® a gran parte de su familia en la masacre y, desde entonces, se ha dedicado a investigar los cr¨ªmenes de guerra, como periodista de la revista bosnia Dani. Es autor de un libro sobre su experiencia en medio del horror, Postales desde la tumba, que The Economist calific¨® de "obra maestra destinada a perdurar", y que ser¨¢ publicado este a?o por Galaxia Gutenberg.
"Los supervivientes, no s¨®lo de Srebrenica, sino de otros cr¨ªmenes genocidas en Bosnia-Herzegovina, s¨®lo pueden sentirse traicionados", aseguraba ayer desde Hamburgo, donde reside en la actualidad, tras conocer la sentencia que ha exculpado al Estado serbio de genocidio en Bosnia. "La sentencia no es ni justa, ni equilibrada", a?ade.
"La ¨²nica lecci¨®n que podemos sacar de esta sentencia y su ¨²nico mensaje es triste e inquietante: que la violencia es rentable", contin¨²a Emir Suljagic. "A Serbia se la he permitido salir impune del cargo de asesinato y las fuerzas pol¨ªticas e ideol¨®gicas que estuvieron detr¨¢s del genocidio y de la divisi¨®n de Bosnia van a estar muy satisfechas con esta sentencia", agrega.
La clave del fallo judicial est¨¢, seg¨²n Suljagic, en saber qui¨¦n ten¨ªa el mando sobre las fuerzas paramilitares y militares serbias que asesinaron a decenas de miles de personas durante la limpieza ¨¦tnica en Bosnia, entre 1992 y 1995. Srebrenica, donde 8.000 bosnios fueron asesinados en el verano de 1995, fue la culminaci¨®n del exterminio de los musulmanes del este de Bosnia, que comenz¨® en la primavera de 1992 en ciudades como Foca y Visegrad, donde Ivo Andric ambient¨® Un puente sobre el Drina y donde los musulmanes pasaron de ser el 70% de la poblaci¨®n a desaparecer del censo.
Unidades paramilitares
"La sentencia ignora no s¨®lo la verdad hist¨®rica, sino hechos demostrados. El asunto crucial es si desde Belgrado se controlaba a los dirigentes pol¨ªticos y militares de los serbios de Bosnia. Para pronunciarse, el Tribunal de la ONU dictamin¨® que el Gobierno serbio deb¨ªa admitir su complicidad en los cr¨ªmenes. Sin embargo, a pesar de que dicha admisi¨®n existe, en lo referente a la unidad llamada de Los Escorpiones, el Tribunal decidi¨® ignorarlo", explica Suljagic.
Para este periodista -y para otros tribunales internacionales- es un hecho que se produjo un genocidio en Bosnia. "Hay evidencias masivas de que se produjo un genocidio en Bosnia-Herzegovina y de que no hubiese podido cometerse si Serbia no hubiese jugado un papel tan activo", se?ala. En uno de los numerosos an¨¢lisis de la denuncia que ha escrito para el Instituto Bosnio de Londres, Suljagic recuerda una frase de Radovan Karadzic, el jefe pol¨ªtico de los serbios de Bosnia que, junto al general Mladic, est¨¢ inculpado de genocidio por Srebrenica: "Cuando comenz¨® la guerra, el Ej¨¦rcito federal ofreci¨® toda su ayuda".
La reacci¨®n en Bosnia a la sentencia refleja la divisi¨®n en la que vive el pa¨ªs desde los acuerdos de paz de Dayton, con los que termin¨® la guerra, en noviembre de 1995, pero que dej¨® el pa¨ªs separado en dos entidades: la Federaci¨®n Croata Musulmana y la Rep¨²blica Serbia (RS). En Sarajevo ha sido recibida con profunda decepci¨®n. En Banja Luka, capital de la RS, como una demostraci¨®n de justicia.
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