Violencia machista: un problema que no cesa
Los dos primeros meses de 2007 acaban, una vez m¨¢s, con un balance sangriento y brutal: 14 mujeres v¨ªctimas mortales de sus parejas o ex parejas. De 25 a 85 a?os. De todas las regiones y clases sociales. Una m¨¢s que en el mismo periodo del a?o pasado y las mismas que en 2005. La Ley Integral contra la Violencia de G¨¦nero lleva ya m¨¢s de a?o y medio funcionando, la conciencia social crece, aumenta el n¨²mero de denuncias, de ¨®rdenes de protecci¨®n, de condenas a los agresores, pero el goteo de muertes no cesa.
"A pesar de todos los esfuerzos, todav¨ªa hay pocas denuncias de las mujeres que luego se comprueba que corren un riesgo mortal", se?ala Montserrat Comas, presidenta del Observatorio contra la Violencia Dom¨¦stica y de G¨¦nero del Consejo General del Poder Judicial. De las 14 mujeres que han perdido la vida este a?o, s¨®lo en tres casos se hab¨ªan dictado medidas de protecci¨®n. Otra hab¨ªa puesto una denuncia, pero la retir¨® con posterioridad. Se cumple la estad¨ªstica habitual: en 2006, siete de cada 10 mujeres no hab¨ªan denunciado nunca a quien las terminar¨ªa asesinando, seg¨²n los datos del Consejo del Poder Judicial.
"Muchas veces las mujeres tienen poca percepci¨®n del riesgo", indica Comas. "En un 30% de las medidas cautelares adoptadas consta la renuncia de la v¨ªctima a que se siga manteniendo la protecci¨®n".
Noelia P. R. ten¨ªa 33 a?os y viv¨ªa en Alcal¨¢ de Guadaira cuando fue asesinada por su ex novio, hace apenas 15 d¨ªas. Ella, consciente de los malos tratos de que era objeto, s¨ª hab¨ªa dado el primer paso y hab¨ªa denunciado: ten¨ªa una orden de protecci¨®n. Pero le ofrecieron un dispositivo de alarma y lo rechaz¨®. "Hay que conseguir que las mujeres, a trav¨¦s de letrados y psic¨®logos, tengan una percepci¨®n m¨¢s real de la gravedad de lo que les est¨¢ pasando", a?ade Comas. "Que no minimicen la violencia de sus agresores".
"Una pauta cultural"
Pero este proceso, inevitablemente, es lento, a decir de todos los expertos. "Cada vez hay m¨¢s mujeres atendidas, se est¨¢n poniendo muchas medidas urgentes en marcha, queremos crear 23 nuevos juzgados especializados, se van a incrementar los efectivos policiales, pero acabar con este problema no lleva un d¨ªa ni dos", se?ala Encarnaci¨®n Orozco, Delegada del Gobierno para la Violencia de G¨¦nero. "Pero es un problema social de calado, es una pauta cultural la que produce este fen¨®meno, as¨ª que lo que estamos haciendo es poner los medios para ir cambiando mentalidades".
?C¨®mo es esta mentalidad que mata mujeres? ?Cu¨¢l es el perfil de los agresores? No son ni locos, ni drogadictos ni alcoh¨®licos, sino que act¨²an en pleno uso de sus facultades mentales. Este dato se desprende al menos de las conclusiones provisionales de un estudio que est¨¢ elaborando el Consejo General del Poder Judicial sobre las 147 sentencias dictadas en esta materia por los tribunales del jurado -que juzgan homicidios y asesinatos- entre 2001 y 2005.
S¨®lo en el 3,4% de estas condenas se apreci¨® el consumo de bebidas alcoh¨®licas o estupefacientes como circunstancia atenuante. Y s¨®lo en el 2% de los casos el jurado entendi¨® que la alteraci¨®n et¨ªlica o por otras drogas era tan alta como para considerarla eximente -parcial, no total- de la responsabilidad criminal.
En cuanto a las alteraciones ps¨ªquicas, determinaron la exenci¨®n absoluta de responsabilidad del 2% de los condenados y actuaron como atenuante en el 12,2% de los casos.
Otra de las conclusiones resalta "la extraordinaria brutalidad ejercida por los autores contra las v¨ªctimas", "el car¨¢cter sorpresivo de la agresi¨®n" en la mayor¨ªa de los casos y "el aprovechamiento de la situaci¨®n de indefensi¨®n" que ten¨ªan las mujeres cuando se cometieron los hechos.
Los autores suelen usar para matar los medios que tienen m¨¢s cerca: la mayor¨ªa us¨® cuchillos u otro tipo de objetos punzantes o estrangularon a sus v¨ªctimas con cuerdas o con sus propias manos.
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