Un plan para la Bah¨ªa

Si algo no tiene la Junta de Andaluc¨ªa y el Gobierno de la naci¨®n para buscar una soluci¨®n al problema de Delphi es tiempo, fundamental en un asunto tan complejo. No hace ni 10 d¨ªas que la empresa anunci¨® su decisi¨®n de cerrar la f¨¢brica de Puerto Real. Todo este tiempo lo ha consumido la Junta en la ingrata tarea de encontrar un interlocutor cualificado. Parece que la direcci¨®n central de Delphi ha encargado al despacho de Garrigues Walker que los represente en este asunto. Seg¨²n parece, la decisi¨®n de la empresa es firme, aunque no se puede descartar que sea una estrategia de negociaci¨®n. En cualquier caso, la Junta y el Gobierno no disponen de mucho tiempo para evaluar la situaci¨®n y adoptar alguna medida.

Por ahora, los trabajadores y sus familias han demostrado una moderaci¨®n extraordinaria dada la decisi¨®n tan brutal que se les ha planteado. Sobre todo si se les compara con los operarios de la vecina planta de Navantia, que a estas alturas tendr¨ªan cortado el tr¨¢fico en el puente Carranza y habr¨ªan prendido fuego a la ciudad de C¨¢diz. Los trabajadores de Delphi han entendido que los ciudadanos de la Bah¨ªa son sus aliados y que la Administraci¨®n es el veh¨ªculo para canalizar sus puntos de vista. En 10 d¨ªas han realizado varias manifestaciones, incluida la masiva del d¨ªa 1 de marzo, han decidido seguir en sus puestos de trabajo y llevar a cabo una estrategia inteligente.

Por ahora han concitado el apoyo de todos los partidos, sindicatos y ciudadanos en sus reivindicaciones. Pero no parece posible que esta moderaci¨®n dure para siempre. ?Qu¨¦ ocurrir¨¢ cuando se acabe la materia prima existente en la f¨¢brica? ?y cuando llegue la hora de cobrar la siguiente n¨®mina? Por otra parte, los partidos pol¨ªticos han hecho suya la causa de manera moderada y responsable ?hasta cu¨¢ndo va a durar esta estrategia? Las elecciones est¨¢n a la vuelta de la esquina y el clima pol¨ªtico en Espa?a no parece el m¨¢s propicio para el debate sereno.

La situaci¨®n de la f¨¢brica, la actuaci¨®n de los trabajadores y la premura del calendario pol¨ªtico hacen que el tiempo se agote. La Junta y el Ministerio de Industria tendr¨¢n que acelerar la negociaci¨®n y la b¨²squeda de soluciones. Y no parece que el camino de las bajas incentivadas, las prejubilaciones y las recolocaciones vaya a ser f¨¢cil de aceptar. La Bah¨ªa de C¨¢diz ha vivido varias crisis del sector naval en los ¨²ltimos 23 a?os, con la p¨¦rdida de m¨¢s de 10.000 empleos directos. La ¨²ltima se sald¨® con 1.200 prejubilaciones tras unas semanas agitadas. Altadis ha hecho otra reestructuraci¨®n que ha supuesto la salida de 167 trabajadores en los ¨²ltimos meses y ha dejado la factor¨ªa gaditana en su m¨ªnimo hist¨®rico. Tan s¨®lo Airbus, de las grandes empresas de la Bah¨ªa, aguantaba junto con la planta de Dragados Offshore. La industria aeron¨¢utica est¨¢ en plena crisis, aunque parece que la repercusi¨®n ser¨¢ peque?a en la f¨¢brica de Puerto Real.

Esta situaci¨®n de crisis industrial ha reducido el papel econ¨®mico de la Bah¨ªa de C¨¢diz y ha cambiado la naturaleza de la actividad productiva. Las bodegas y el sector pesquero pasaron por una profunda crisis hace a?os. Todo ello se ha paliado por ahora con el emergente sector tur¨ªstico. Aun as¨ª, el paro en la provincia de C¨¢diz asciende a 104.706 personas, un 13,7 %, el menor en muchos a?os pero el tercero de Espa?a. En estas circunstancias es dif¨ªcil que la Bah¨ªa pueda digerir el cierre de la empresa, como podr¨ªa ocurrir en otros lugares. El Gobierno ha dicho que no abandonar¨¢ a los trabajadores a su suerte, lo que puede tranquilizar a muchos. Pero hace falta mantener la empresa y un plan de reactivaci¨®n industrial que tenga como base una pol¨ªtica de incentivos y de fomento de la investigaci¨®n productiva para promover la instalaci¨®n de nuevas empresas. Algunos reclaman una soluci¨®n p¨²blica, tipo Santana Motor de Linares, pero no ser¨ªa una soluci¨®n definitiva. El Estado no puede ser un hospital de empresas pero s¨ª debe implicarse en una pol¨ªtica industrial activa a favor de las zonas con mayor desempleo.