Ulla, Umia y Sar, en la UVI

Las r¨ªas y cauces de Galicia est¨¢n amenazados por 4.590 puntos de vertido y s¨®lo la mitad de estos derrames cuenta en estos momentos con una autorizaci¨®n administrativa. As¨ª consta en el inventario realizado por la Conseller¨ªa de Medio Ambiente, un diagn¨®stico previo de la situaci¨®n que revela cu¨¢l es el origen de estas emisiones que el bipartito quiere ahora minimizar. La mayor parte (3.231) proceden de depuradoras de aguas residuales, mientras que el resto se reparten entre los vertidos generados por industrias (1.056) y los relacionados con la actividad agroganadera, las aguas pluviales y las de refrigeraci¨®n.

No todo el territorio de Galicia se reparte por igual la carga contaminante de estas instalaciones. Los r¨ªos m¨¢s castigados son el Umia, el Ulla y el Sar y para atajar sus problemas la Xunta pondr¨¢ en marcha dentro de cuatro meses un programa especial de regeneraci¨®n. Estos cauces, admite el conselleiro, Manuel V¨¢zquez, est¨¢n "en la UVI". La cuenca del Ulla es el lugar de la comunidad que sufre los efectos de m¨¢s puntos de vertido, en total 509, seguido de la r¨ªa de Arousa, con 211, del r¨ªo Tambre, con 261, de la r¨ªa de Vigo, con 190, y del r¨ªo Mero, con 110. Por provincias, es A Coru?a la que acoge el 34% de estos focos de emisi¨®n al agua, el 25% est¨¢ en Pontevedra, el 22% en Ourense y el 19% en Lugo.

Multas

"No era correcta la actitud del Gobierno anterior, que dec¨ªa que todo estaba bien", lament¨® ayer V¨¢zquez. El responsable socialista asegura que de los 453 expedientes sancionadores abiertos por la Xunta desde el a?o 2000, casi la mitad (213) fueron incoados por el bipartito. La mano dura con la contaminaci¨®n en los r¨ªos y el mar, promete Medio Ambiente, continuar¨¢.

La mayor parte de las multas se impusieron en este tiempo por vertidos en el r¨ªo Ulla (87), en la r¨ªa de Arousa (48), en la r¨ªa de Vigo (41), en el Umia (30), en el Tambre (22), en la r¨ªa de Pontevedra (13), en el r¨ªo Anll¨®ns (13) y en el Mandeo (12). El decreto que regula estas emisiones impone sanciones que oscilan entre los 6.000 y los 600.000 euros, aunque las m¨¢s elevadas "pr¨¢cticamente" no se aplicaban hasta ahora, seg¨²n explic¨® el conselleiro de Medio Ambiente.

La unidad de control que crear¨¢ la Xunta para evitar vertidos ilegales en los r¨ªos y en la costa estar¨¢ integrada por m¨¢s de 200 personas. En el equipo estar¨¢n 24 t¨¦cnicos que supervisar¨¢n las instalaciones de depuraci¨®n de las empresas y les propondr¨¢n mejoras, 150 vigilantes medioambientales de conservaci¨®n de la naturaleza y 32 guardias fluviales del organismo Augas de Galicia, dependiente de la Conseller¨ªa de Medio Ambiente. Este personal ser¨¢ el encargado de localizar e identificar los derrames contaminantes.

El Gobierno gallego se propone implicar a los ciudadanos en la lucha contra los vertidos no autorizados y para ello crear¨¢ un servicio de alerta para que los vecinos denuncien cualquier incidencia.