"Buscando a ETA desesperadamente"

El ministro del Interior, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, se enfrent¨® ayer con nuevos argumentos a la principal acusaci¨®n que el PP le hace en el caso De Juana, la cesi¨®n al chantaje de ETA. Admiti¨® y explic¨® que, adem¨¢s de las razones legales y humanitarias de la prisi¨®n atenuada del etarra, en las que se ha explayado estos d¨ªas, hay motivos pol¨ªticos. Super¨® el temor de que el PP considerara la motivaci¨®n pol¨ªtica una cesi¨®n a ETA. Para ello utiliz¨® un argumento que se entiende muy bien en el Pa¨ªs Vasco y menos en el resto de Espa?a por desconocimiento de la pol¨ªtica de dicha comunidad: que es una exigencia a cualquier Gobierno de "evitar males mayores", de impedir la creaci¨®n de un caldo de cultivo en el que "se legitima" la violencia, de no beneficiar a los m¨¢s violentos, de no permitirles fabricar m¨¢rtires y de que el trabajo de a?os "se puede perder en una tarde". En definitiva, que la pol¨ªtica penitenciaria es parte decisiva de la pol¨ªtica antiterrorista, como fue con los Gobiernos de UCD, del PSOE y del PP. Lo ilustr¨® con declaraciones del ex ministro del Interior Jaime Mayor, uno de los m¨¢ximos denostadores de la pol¨ªtica antiterrorista del Gobierno, cuando acerc¨® a 32 presos de ETA a Euskadi durante el secuestro de Ortega Lara: "Los miembros de ETA en el supuesto de que decidieran una actuaci¨®n, lo tienen m¨¢s complicado pues no pueden justificar que ha habido una cerraz¨®n de Interior".

Rubalcaba neg¨® al PP que la prisi¨®n atenuada a De Juana fuera producto de una negociaci¨®n con ETA, pues no existe proceso de paz. Aclar¨®, adem¨¢s, que no hay chantaje de ETA porque la huelga de hambre de De Juana fue personal y no logr¨® su objetivo, la libertad. "O libre o muerto, ese fue el reto de De Juana. Y la respuesta del Estado ha sido: ni libre, ni muerto". Se aplic¨® la ley y evit¨® una muerte. Con muchos datos demostr¨® al PP que en sus ocho a?os de Gobierno hab¨ªa aplicado la misma pol¨ªtica penitenciaria, e incluso de modo m¨¢s ca¨®tico, que el actual Ejecutivo. Rubalcaba desvel¨® que ese caos fue producto del consentimiento por el Gobierno del PP de asumir la decisi¨®n de ETA, a fines de 1995, de que sus presos redimiesen condenas, incluso, extras.

Desvelada la "hipocres¨ªa" del PP, constat¨® que "no le ha dado al Gobierno ning¨²n margen para hacer pol¨ªtica antiterrorista" pues "cuanto m¨¢s cerca se est¨¢ del fin de ETA, el PP hace m¨¢s oposici¨®n con ella". Precis¨® que ¨¦ste es el ¨²nico campo de oposici¨®n que queda al PP -lo tiene "muy mal" en materia econ¨®mica y social- y por ello "est¨¢ buscando desesperadamente a ETA para recuperar el poder, como lo hicieron tras el 11-M, jugando al contra peor, mejor". El portavoz del PP, Eduardo Zaplana, no respondi¨® con argumentos y fabric¨® frases y titulares, jugando con el pasado, los GAL y la negociaci¨®n con ETA. El debate, exigido por el PP, escribi¨® otro cap¨ªtulo de la divisi¨®n en pol¨ªtica antiterrorista.