El Madrid vuelve al escaparate

El Real Madrid volver¨¢ a disputar una final europea tres a?os despu¨¦s del desaguisado que le mont¨® el Hapoel Jerusal¨¦n en Charleroi. Le espera, el pr¨®ximo 10 de abril y en el mismo escenario, por la Copa ULEB, el Lietuvos Rytas de Lituania. No la disputar¨¢ de milagro el Unics Kaz¨¢n, que apur¨® hasta el tercer periodo sus siete puntos de ventaja con m¨¢s facilidad de la sugerida por la escuadra madridista.

Al cuadro de Joan Plaza le dio un ataque de v¨¦rtigo en el peor momento. Entre la final de la Copa que regal¨® al Bar?a y el ba?o de multitudes de anoche s¨®lo se met¨ªa en l¨ªos. La sombra acechaba a un grupo que en los anteriores cinco partidos s¨®lo hab¨ªa superado, por un punto, al Estrella Roja. Pese a las derrotas en Valladolid, Barcelona, con el Gran Canaria en casa y en el mism¨ªsimo Kazan, el preparador del Madrid tuvo los arrestos necesarios para seguir fiel al juego el¨¢stico y de buen ver que tan buenos resultados le dio hasta su debacle en M¨¢laga. La historia pes¨® en una plantilla que en octubre firmaba su pasaporte a la Euroliga, competici¨®n que tendr¨¢ asegurada de vencer en B¨¦lgica.

Salvo en los tramos finales, el l¨ªder de la ACB jug¨® atenazado. Casi tir¨® su billete a B¨¦lgica por sus prisas en solventar el duelo con los rusos a toda prisa. Un error garrafal que s¨®lo remedi¨® la actuaci¨®n soberbia de Felipe Reyes. El p¨ªvot cordob¨¦s salv¨® los muebles en los primeros diez minutos con otros tantos puntos y nueve rebotes. Ning¨²n madridista m¨¢s se salv¨® de la quema en el arranque, cuando los de Kaz¨¢n martilleaban desde el per¨ªmetro de lo lindo. Para colmo, los gemelos Lavrinovic echaron el cierre a la zona rusa, con tanto acierto que Hervelle se prodig¨® desde la l¨ªnea de 6,25. Stambergas y Savanovic hicieron el resto. Hasta que se les fundieron los plomos.

Para suerte del Madrid, enfrente tuvo un conjunto que pierde el norte cuando tiene los garbanzos en el bolsillo. Le pas¨® en Kaz¨¢n, concediendo 13 puntos de renta en los ¨²ltimos dos minutos. Por algo resoplaba en el palco Antonio Mart¨ªn, el responsable de la secci¨®n. M¨¢s que nada, porque, con toda una vida por delante, con 40 minutos para cimentar el pase, el Madrid a punto estuvo de claudicar en un correcalles, con posesiones cortas y tiros forzados.

Louis Bullock fue el m¨¢xime beneficiario de la p¨¢jara que descompuso las l¨ªneas rusas. Por mucho que comande las estad¨ªsticas de anotaci¨®n, el escolta no anda fino. Ayer maquill¨® unos n¨²meros nada halag¨¹e?os, cinco puntos en una docena largas de intentos en los primeros 20 minutos. Si el Madrid va a disputar su segunda final de la campa?a, es por Felipe Reyes.