Inquietante dilema en las calles de Oxford

Hay algo de verdad? ?D¨®nde est¨¢ el enigma? ?Qui¨¦n es el asesino? ?Qu¨¦ papel juegan las matem¨¢ticas? ?Existe una l¨®gica oculta que ordena y explica la realidad? ?Es todo falso? ?Qu¨¦ trampas hay en el juego? Todos estos ingredientes se mezclan en Los cr¨ªmenes de Oxford, un thriller "seco, duro y tr¨¢gico" con el que el director bilba¨ªno ?lex de la Iglesia se estrena en este g¨¦nero y en el que enfrenta a un viejo profesor de matem¨¢ticas y a un joven estudiante de l¨®gica y su manera diferente de entender la vida.

"No s¨¦ si descubrir¨¦ o no el enigma, pero me excita, me vuelve loco", asegura el realizador

La pel¨ªcula, basada en la novela del mismo t¨ªtulo del escritor argentino Guillermo Mart¨ªnez, comienza con un asesinato y el motor de la historia se centra en el deseo del espectador por descubrir al asesino. La ciudad de Oxford -la calle Broad, la librer¨ªa Blackwell, el pub White Horse o el teatro Sheldonian-, siempre agitada por estudiantes, profesores y bicicletas, ha sido estos d¨ªas el escenario de di¨¢logos matem¨¢ticos y discusiones filos¨®ficas, muy densos y en ocasiones violentos, entre los actores John Hurt (el profesor de matem¨¢ticas), brit¨¢nico, y Elijah Wood (el estudiante de l¨®gica), estadounidense, los dos protagonistas de El crimen de Oxford, junto a la espa?ola Leonor Watling. Pero tambi¨¦n ha habido hueco para la m¨²sica, para el amor, para la felicidad en este filme, de producci¨®n mayoritariamente espa?ola (Tornasol Films y Estudios Picasso), junto con la empresa francesa La Fabrique de Films y el brit¨¢nico Kevin Louder, que se rueda en ingl¨¦s y que cuenta con un presupuesto de ocho millones de euros.

"Nunca me he metido en un l¨ªo tan grande", reconoce, siempre ingenioso, divertido y tambi¨¦n m¨¢s canoso ?lex de la Iglesia frente a una pinta en el pub White Horse, al caer la tarde y la luz. "Es mi primera incursi¨®n en el thriller y quiero hacerlo diferente. No s¨¦ si descubrir¨¦ o no el enigma, pero me excita, me vuelve loco. Es un filme lleno de di¨¢logos y conseguir que lo que se habla sea inteligente y al mismo tiempo atractivo desde un plano visual es lo que m¨¢s me ha costado", asegura el realizador, que, a pesar de las complicaciones climatol¨®gicas del rodaje, tempestades, lluvias y nevadas, en el Reino Unido -comenz¨® el trabajo en Londres el pasado 22 de enero-, nunca ha perdido el humor ni la energ¨ªa. Tampoco la pasi¨®n, como confiesa el actor Elijah Wood, el famoso Frodo de El se?or de los anillos, que ha descubierto en el realizador vasco a alguien muy especial. Tiene una mirada limpia, unos ojos de un azul intenso y una risa que se oye en toda la calle Broad de Oxford, ante la alegr¨ªa de las decenas de seguidores que enloquecen cuando reconocen al actor y sacan sus c¨¢maras y tel¨¦fonos m¨®viles. "No fotos, por favor, no flash", pide una y otra el ayudante de direcci¨®n, ante la luz inusitada que sale de tantos aparatos callejeros. "He trabajado con actores buen¨ªsimos, estupendos, pero nunca me he encontrado a nadie m¨¢s disciplinado, m¨¢s encantador y m¨¢s profesional en mi vida", dice De la Iglesia de Elijah Wood.

El actor, a sus 26 a?os, reconoce que, a la media hora de conocer a ?lex de la Iglesia en un caf¨¦ de Nueva York, sab¨ªa que iba a trabajar con ¨¦l. Hab¨ªa le¨ªdo el gui¨®n que le enviaron meses antes -"es incre¨ªblemente inteligente, no supe qui¨¦n era el asesino hasta el final"- y todo fue luego cuesti¨®n de buscar fechas. "No hab¨ªa visto ninguna pel¨ªcula suya pero su energ¨ªa, su personalidad, su pasi¨®n han conseguido arrebatarme. Puede hacer algo muy original en el g¨¦nero del thriller", explica Wood, que tuerce apenas el gesto cuando sale en la conversaci¨®n su personaje de Frodo. "Ah, Frodo", dice con ese tono de contestar lo inevitable. Ha sido un instante, con sonrisa incluida, pero se recompone. "Me ha abierto m¨¢s oportunidades que cerrado. Afortunadamente, me ofrecieron otros personajes diferentes inmediatamente despu¨¦s y por eso no me congel¨¦ en El se?or de los anillos. Tambi¨¦n el ¨¦xito de la pel¨ªcula ha hecho que me convierta en un actor muy conocido y se me han abierto las posibilidades para elegir proyectos que nunca me hubieran ofrecido".

Wood se estrena en El crimen de Oxford en el cine espa?ol, pero tambi¨¦n en el sexo cinematogr¨¢fico. Por primera vez ha rodado escenas de sexo y lo ha hecho con Leonor Watling. Fue al cuarto d¨ªa de rodaje. "Era una nueva experiencia para m¨ª. Estaba muy nervioso, pero ella [Leonor Watling] es tan maravillosa, que todo fue muy bien, tanto personal como profesionalmente".

Tambi¨¦n para John Hurt, el actor s¨®lido, inolvidable en tantos t¨ªtulos (Dogville, Harry Potter, Contact...), este filme es su primera incursi¨®n en Espa?a. Sentado en un pupitre colegial, dentro del teatro Sheldonian, Hurt es, a sus 67 a?os, un aut¨¦ntico profesor de matem¨¢ticas, maduro y atractivo. "Es una pel¨ªcula sobre gente inteligente", sentencia el int¨¦rprete.

Hurt es el ogro. Wood es el caballero. La matem¨¢tica frente a la l¨®gica. La veteran¨ªa y la solidez frente a la seducci¨®n y la valent¨ªa. El crimen de Oxford es un castillo, dice su realizador, lleno de trampas y de juegos.