La justicia exime a los ferrocarriles de Francia de toda responsabilidad en el Holocausto

El Tribunal Administrativo de Burdeos rectific¨® ayer una pol¨¦mica sentencia contra la SNCF, la empresa p¨²blica de los ferrocarriles franceses. El pasado mes de junio, un tribunal de primera instancia de Toulouse conden¨® a la SNCF como responsable del transporte forzado, en mayo de 1944, de Georges Lipietz hasta el campo de Drancy, un punto de reagrupamiento de jud¨ªos franceses previo a la salida de convoyes con destino a los campos de concentraci¨®n y exterminio. La sentencia obligaba a la SNCF a pagar 62.000 euros a los cuatro herederos de Lipietz, entre ellos su hijo Alain, hoy diputado europeo. Ese fallo ha sido desautorizado ahora por una instancia judicial superior en Burdeos.

La familia Lipietz ha anunciado que presentar¨¢ un recurso ante el Consejo de Estado. Los jueces de Burdeos consideran que la SNCF "no ten¨ªa ninguna autonom¨ªa de decisi¨®n" en aquella ¨¦poca, ya que actuaba bajo "requisa y obligada" por los poderes que representaban el Gobierno colaboracionista de Vichy y las fuerzas ocupantes alemanas.

La familia Lipietz apoyaba su demanda en los documentos que prueban que la SNCF cobr¨® sus servicios como transportista al Estado franc¨¦s. La esposa de Georges Lipietz recuerda adem¨¢s que "los deportados fueron enviados a Drancy en vagones para ganado".

"En ese contexto no puede hablarse de servicio p¨²blico", han dicho los magistrados de Burdeos. La SNCF ha recordado que fueron numerosos los trabajadores de la compa?¨ªa que se implicaron en actos de resistencia y fueron asesinados por los nazis.

2.000 nuevas demandas

Tras la sentencia favorable a los Lipietz, fueron presentadas m¨¢s de 2.000 nuevas demandas contra la SNCF, algunas de ellas procedentes de Estados Unidos. El cambio radical de orientaci¨®n marcado por el dictamen de Burdeos influir¨¢ sin duda en un sumario que empez¨® a instruirse por la misma causa en Nueva York el pasado mes de marzo.

La mayor¨ªa de las organizaciones jud¨ªas francesas han celebrado la decisi¨®n de Burdeos. "Hay que acabar con esos procesos. Desde el momento en que, en 1995, el presidente de la Rep¨²blica admiti¨® la responsabilidad de Francia en la deportaci¨®n de 75.000 jud¨ªos, el asunto qued¨® cerrado", precisaba ayer un comunicado de una organizaci¨®n representativa de los jud¨ªos de Francia.

De los 75.000 deportados, apenas 2.500 regresaron con vida a Francia desde los campos de la muerte.

El gran rabino franc¨¦s, Joseph Haim Sitruk, tambi¨¦n cree que "no era un buen proceso". "Hab¨ªa que abstenerse. No es posible tomar a la SNCF por responsable", asegur¨®.

Para Anne-Marie Revcolevschi, secretaria de la asociaci¨®n a favor del recuerdo del Holocausto, "la SNCF estaba a las ¨®rdenes del Estado franc¨¦s y ¨¦ste lo estaba a las del Estado nazi".