Marc Simoncini: "Los sitios de citas triunfan si hay equilibrio entre sexos"
El fundador y director general de Meetic asegura que existe una Uni¨®n Europea del amor: "El 25% del tr¨¢fico de mensajes es entre diferentes pa¨ªses" - Seg¨²n Simoncini, hoy la gente ya no se averg¨¹enza de la cita por Red
La rom¨¢ntica cena de su aniversario de boda se hab¨ªa convertido en un mar de l¨¢grimas de tres divorciados, amigos de su marido. Mientras ellos se quejaban de su soledad y ella maldec¨ªa el olvido de su pareja, Marc Simoncini ide¨® un sitio de citas por Internet. Era noviembre de 2001 cuando lanz¨® Meetic en Francia. Seis a?os despu¨¦s de esa cena, es la p¨¢gina de citas m¨¢s visitada de Europa. Tiene casi 26 millones de personas registradas en 14 pa¨ªses. En Espa?a, 704.000 internautas la visitan cada mes, seg¨²n la medidora de audiencias Nielsen NetRatings. El sitio espa?ol almacena 4,5 millones de internautas que alguna vez se han registrado en la p¨¢gina. De ellos, el 6% han pagado la cuota para acceder plenamente a sus servicios.
"Meetic suena a m¨ªtico, un sitio donde conocer a gente especial", explica Simoncini. Algo debe tener porque empez¨® como un juego para alegrar a sus amigos divorciados y se ha convertido en una m¨¢quina de hacer dinero. La empresa factur¨® 78,8 millones el a?o pasado, casi el doble que en 2005, cuando sali¨® a bolsa. La gran mayor¨ªa de ingresos provienen de las suscripciones; s¨®lo el 2% lo genera la publicidad y otro peque?o porcentaje de los acuerdos con otras compa?¨ªas. Por ejemplo, con Terra o Yahoo!
Su negocio es relacionar a la gente. Del mismo barrio y ciudad o de cualquiera de los pa¨ªses europeos en los que operan, incluidos China y Brasil. "No hay diferencias culturales entre los europeos, salvo los ingleses. El 25% del tr¨¢fico de mensajes es entre personas de pa¨ªses diferentes".
La gente se relaciona por medios electr¨®nicos como el email, el chat o el tel¨¦fono m¨®vil, pero tambi¨¦n a trav¨¦s de citas reales en fiestas organizadas en locales de ocio. A diferencia de otros sitios similares, dice Simoncini, "Meetic no vende ni promete el amor. ?Nadie se enamora por Internet!, pero s¨ª vende citas. Ojal¨¢ que en una de ellas encuentre el amor de su vida". Al menos el 80% de sus clientes se han citado en alguna ocasi¨®n. Otro cantar es que se convierta en una relaci¨®n duradera. Entonces el porcentaje baja al 25%.
Mujeres gratis
Los sitios de encuentros triunfan "si hay equilibrio entre sexos", dice su fundador. Cuando Meetic se presenta en un pa¨ªs, los servicios son casi gratuitos para las mujeres. Pueden comunicarse libremente, pero para realizar b¨²squedas por caracter¨ªsticas concretas deben pagar. Las ofertas van de los 29,45 euros mensuales a los 9,95 por el abono anual.
El reclamo para captar clientes finaliza cuando se equilibra la balanza. Despu¨¦s todos pagan, sean hombres o mujeres, como ya ocurre en Francia, Alemania, Dinamarca, Suecia, Suiza, Holanda y Gran Breta?a. De media, en los pa¨ªses de la UE en los que operan hay 60% de hombres y 40% de mujeres.
Simoncini acaba de presentar la segunda versi¨®n de Meetic en Par¨ªs. "Hemos mejorado el camino para llegar a la cita. Empezamos con textos e im¨¢genes. Ahora llegan el v¨ªdeo y la voz a trav¨¦s del tel¨¦fono". Un n¨²mero Meetic conectar¨¢ a los interesados sin que se tengan que dar el n¨²mero real y podr¨¢n tener videoconferencia.
De momento no ha dado el salto a Estados Unidos, donde las ¨²ltimas estad¨ªsticas indican un principio de saturaci¨®n del mercado. "A¨²n as¨ª tengo ganas de cruzar el Atl¨¢ntico, pero no s¨¦ cu¨¢ndo. Antes debemos posicionarnos en Gran Breta?a", donde hace un mes compraron el sitio Dating Direct. "Si conseguimos afianzarnos en Inglaterra, el salto a Estados Unidos ser¨¢ m¨¢s sencillo". Donde s¨ª ha puesto sus tent¨¢culos es en China, a trav¨¦s de YeeYoo (que significa 'millones de amigos' en mandar¨ªn). El sitio cuenta con 10 millones de participantes. "No entrar en el pa¨ªs asi¨¢tico ser¨ªa un error estrat¨¦gico".
El fen¨®meno singles es otra de las claves del ¨¦xito. Antes la gente s¨®lo ten¨ªa una relaci¨®n amorosa, "ahora hay tres o cuatro; los problemas de comunicaci¨®n son reales y mucha gente no quiere vivir en pareja". Adem¨¢s, asegura, las mujeres han cambiado. Una percepci¨®n que certifica por su propia experiencia en estos seis a?os. Al principio ni entraban en Meetic. Despu¨¦s iban, pero no lo dec¨ªan. M¨¢s tarde lo reconoc¨ªan s¨®lo si se les preguntaba y ahora se vanaglorian de formar parte de la comunidad. "Hoy la gente ya no se averg¨¹enza".
MEETIC: www.meetic.es
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