Sarkozy: Francia est¨¢ "exasperada"

Nicolas Sarkozy se enorgullece de haber rescatado "una parte" del electorado de extrema derecha y considera que la sociedad francesa est¨¢ "exasperada" por "la negaci¨®n de la identidad nacional, la inmigraci¨®n incontrolada, el fraude y el despilfarro". El candidato conservador a la presidencia present¨® ayer un libro titulado Ensemble (Juntos) con la bandera francesa en las tapas. En ¨¦l no solo recoge su ambicioso programa pol¨ªtico basado en la cultura de lograr los objetivos propuestos y en la regeneraci¨®n del Estado, sino que tambi¨¦n pretende -"desde el fondo del coraz¨®n"- transmitir sus valores y la concepci¨®n que tiene del ejercicio del poder. Sarkozy se comprometi¨® asimismo a alcanzar el equilibrio de las finanzas p¨²blicas en 2010.

Los ministros deber¨¢n ofrecer resultados anualmente. Si no cumplen ser¨¢n destituidos

Tras la pol¨¦mica que levant¨® su propuesta de crear un "Ministerio de la Inmigraci¨®n y la Identidad" y la trifulca dial¨¦ctica que protagoniz¨® con la socialista S¨¦gol¨¨ne Royal en torno a los enfrentamientos entre j¨®venes y polic¨ªa en la parisiense Estaci¨®n el Norte, acusando gen¨¦ricamente a los franceses de izquierdas de defender a los delincuentes, Sarkozy intent¨® ayer evitar la imagen agresiva de pol¨ªtico dado a enfrentar una parte de la sociedad con la otra.

El candidato Sarkozy centr¨® su discurso en las propuestas b¨¢sicas de su programa, esencialmente en las econ¨®micas y se comprometi¨®, si es elegido presidente, a dejar el desempleo en un 5% al final de su mandato de cinco a?os. Actualmente est¨¢ algo por debajo del 9%.

Sarkozy tambi¨¦n se comprometi¨® a alcanzar el equilibrio de las finanzas p¨²blicas en 2010, y anunci¨® una remodelaci¨®n a fondo de la forma de gobernar basada en tres principios: transparencia, cultura de conseguir los objetivos propuestos y concertaci¨®n social. El Ejecutivo lo reducir¨¢ a un m¨¢ximo de 15 carteras, con paridad entre hombres y mujeres.

Habr¨¢, por supuesto, un Ministerio de Inmigraci¨®n e Identidad Nacional, pero tambi¨¦n uno de Sanidad y Deporte y otro de Educaci¨®n y Cultura. Los ministros deber¨¢n ofrecer resultados anualmente y si no cumplen las previsiones ser¨¢n sustituidos. El presupuesto ser¨¢ respetado -lo que casi nunca sucede en Francia- y para ello Sarkozy crear¨¢ un Ministerio de Asuntos Financieros que controle las cuentas p¨²blicas, e introducir¨¢ una cl¨¢usula en la Constituci¨®n que impida al Estado endeudarse, con la ¨²nica excepci¨®n de los gastos en inversiones.

Sin embargo, para poner en marcha todas estas reformas, implicar al presidente de la Rep¨²blica en la labor del Gobierno -ahora es s¨®lo ¨¢rbitro- y dotar de m¨¢s poder al Parlamento, Sarkozy no necesita reformar la V Rep¨²blica, como pretenden, entre otros, Royal y Bayrou. Considera que el modelo presidencial "le va muy bien a Francia".

El candidato conservador puso especial ¨¦nfasis en uno de sus temas favoritos: la funci¨®n del Banco Central Europeo (BCE), un asunto clave para la competitividad econ¨®mica francesa. Para Sarkozy, uno de los principales problemas de la construcci¨®n europea es la independencia del BCE, que preside un franc¨¦s, y el hecho de que el euro se haya sobrevaluado un 30% frente al d¨®lar y las monedas asi¨¢ticas. En clave proteccionista, Sarkozy insisti¨® en que hay que poner la moneda ¨²nica "al servicio del empleo" y arremeti¨® contra el hecho de que se asuma que la cuesti¨®n monetaria debe ser llevada por expertos y no someterse a criterios pol¨ªticos.

En su opini¨®n, no hay ning¨²n impedimento para que los ministros de Finanzas de los 13 pa¨ªses integrados en el euro impongan sus criterios para hacer m¨¢s competitivos los productos europeos. "No tenemos otra elecci¨®n", dijo, "debemos establecer estrategias econ¨®micas concertadas entre el Eurogrupo y tambi¨¦n con econom¨ªas din¨¢micas como la de Reino Unido", dijo.

Seg¨²n el candidato conservador, la idea de avanzar en la integraci¨®n econ¨®mica europea la comparten ya varios pa¨ªses con cuyos gobernantes, dijo, ha mantenido contactos, entre ellos Espa?a, Alemania e Italia. Evit¨® la respuesta cuando se le record¨® que Alemania no est¨¢ dispuesta a cambiar las estrictas reglas que imponen el control de la inflaci¨®n por el BCE. Al margen de esta cuesti¨®n, los temas de pol¨ªtica internacional brillaron por su ausencia, a excepci¨®n de la "solidaridad" con Londres en el asunto de los marinos brit¨¢nicos detenidos por Ir¨¢n.

La campa?a electoral, admiti¨®, no es tan dura como la hab¨ªa imaginado. Los ¨¢speros cruces dial¨¦cticos de los ¨²ltimos d¨ªas "son normales en la confrontaci¨®n de ideas". Eso s¨ª, la izquierda, dijo, "tiene una responsabilidad en la crisis moral" que sufre Francia.

En Francia hay una gran tradici¨®n de literatura electoral, s¨ª por eso se entiende los libros que presentan los candidatos durante la campa?a. A menos de tres semanas de la primera vuelta, los aspirantes al El¨ªseo han agotado ya casi todas las sorpresas, pasado varias veces por las mismas pol¨¦micas y repetido hasta la saciedad sus propuestas. Les quedan pocas sorpresas en las alforjas.

Por eso, no es de extra?ar que no s¨®lo Sarkozy sino tambi¨¦n sus rivales insistan en sacar nuevos libros para reclamar la atenci¨®n. En el caso del candidato de la Uni¨®n por un Movimiento Popular (UMP) se trata de la segunda obra, ahora en forma de programa presidencial, que presenta durante la campa?a, despu¨¦s de T¨¦moignage (Testimonio), todo un ¨¦xito de ventas. La semana pasada fue la socialista S¨¦gol¨¨ne Royal la que public¨® Maintenant (Ahora). El centrista Fran?ois Bayrou presentar¨¢ ma?ana su tercera obra en menos de tres meses: Confidences (Confidencias).